"Las mujeres estamos reescribiendo la historia y espero que este libro te ayude a reescribir la tuya. El conocimiento nos hará libres"
¿Cómo se ha educado a las mujeres por siglos? ¿Para qué se las ha educado? Hasta fines del siglo XIX las mujeres no asistieron a la escuela, su única formación tendía a que fueran "buenas": buenas esposas, concubinas, amantes, madres, hijas, abuelas... Esta educación inorgánica, esta "mala" educación, se vuelve un sustrato permanente y fortísimo que sigue formando a las mujeres aún hoy para cumplir miles de mandatos. Esto es lo que sostiene María Florencia Freijo en (Mal) que las mujeres han sido y aún son preparadas, tanto desde la educación formal como la informal, para amar sin condiciones a riesgo de quedarse "solas", y para limitar su propio poder y sus posibilidades expansivas. Con una aguda mirada histórica y una escritura lúcida y personal, la autora encuentra en el concepto de "mala educación" un punto de partida que consolida una serie de prejuicios sobre las mujeres. Así se construyeron y se sostienen los arquetipos de la mala puta, bruja, vividora, loca... María Florencia Freijo muestra y explica en este libro imprescindible la línea que une la historia silenciada de las mujeres, en busca de descubrir el porqué de esto que aparece como un destino, pero que es en realidad un mandato que sólo con conocimiento se podrá cambiar, para que cada mujer pueda trazar una historia propia más libre y más consciente.
Una vez más, leer las reseñas de Goodreads me deja en claro que la gente no entiende la función de los libros de DIVULGACIÓN. No es un ensayo, ni un paper, ni un trabajo de historización o análisis profundo, ni una tesis. Es un libro de divulgación, cuyo propósito justamente es que pueda ser leído y entendido por una audiencia tan amplia como sea posible: por mí, por vos, por tu mamá que no tiene formación académica, por tu amiga que no le interesa el feminismo, por tu amigo/novio/esposo varón cis. Me encantaría que la gente entienda esto y lo use para decidir si vale su tiempo leer libros de divulgación o no, o al menos lo tenga en cuenta al escribir sus reseñas.
En ese sentido, el trabajo de la autora es muy claro y completo. Al entrelazar la teoría con experiencias propias muestra los lugares exactos en donde aquello que podemos pensar académicamente se hace carne, por qué el feminismo no habla de cuestiones abstractas, o que ya quedaron atrás en el tiempo, o alejadas de la realidad de la mayoría de las mujeres. Efectivamente entiendo por qué es un libro que las mujeres estamos comprando e intentando hacer que otras lean (de hecho, lo terminé y se lo dejé a mi mamá). El libro busca la socialización del conocimiento feminista, y eso es lo que está logrando en la práctica.
Me parece extremadamente malintencionado referirse a la autora como soberbia, pretenciosa, que se cree esto o aquello, que abusa de los filtros en Instagram, cuando en el mismo libro la autora repite una y otra vez que ella - al ser humana y vivir en sociedad igual que todes - no está libre de las mismas cuestiones que ejemplifica y teoriza en el libro. ¿En qué momento hace alarde de su sexualidad, cuando justamente cuenta que el modo de encarar su sexualidad de chica fue influenciado por una sociedad que lo esperaba de ella, y el modo en que se lo hicieron pagar? ¿En qué momento se pone en un lugar superior y de ser la única emancipada cuando todo el tiempo habla de la necesidad de hacer redes con otras mujeres, de seguir aprendiendo, de evitar el castigo y la sospecha moral? Ni hablar de que desde hace bastante la sigo en sus redes y la acusación de que usa "filtros que le hacen cara de bebé" es increíblemente banal - sí, usa filtros de color que no le modifican la cara, o filtros que la modifican de una manera obvia, como diversión; no filtros que le modifican el rostro de manera creíble, que es lo que critica. Realmente no se entiende haber leído un libro que habla de lo pervasivo y perverso de criticarnos todo el tiempo unas a otras, buscando la mínima falla para desacreditarnos completamente, cuando deberíamos apoyarnos tal como lo hacen los hombres (lo cual obviamente no significa ignorar comportamientos de mujeres que realmente son dañinos y cuestionables, o marcar el error cuando realmente es tal), y escribir una reseña que es el ejemplo perfecto de aquello que la autora menciona. O no se terminó de leer el libro, o se lo leyó con una idea ya formada y sin ninguna intención de aprender - y sin embargo tienen la soberbia de decir que el libro no les aportó nada. Se nota.
Me parece pertinente aclarar que si bien el libro de enfoca en las mujeres cis, no deja por fuera a las mujeres trans y la marginalización propia del colectivo, incluyendo además datos sobre el mismo. No obstante, no se trata de un libro sobre todos los tipos de relaciones sexo-afectivas/románticas que podemos tener sino, justamente, de la historia de opresión de las mujeres por el colectivo de hombres cis, incluyendo dentro de relaciones sexo-afectivas con ellos, y la autora es (presumiblemente, perdón si me equivoco) cis y hetero, por lo cual la crítica de que no se menciona a relaciones queer también me parece fuera de lugar.
Por otro lado, enfocándome en la edición, hay un mal uso de las comas por todo el libro que me resultó molesto y debería haber sido corregido por la editora. También me parece que se debería haber trabajado mejor el tema de las referencias: en primer lugar, es un sinsentido dejar links larguísimos en las notas al pie de un libro impreso; se pone la referencia según las normas que utilice la imprenta y a lo último se incluye el link. En segundo lugar, siendo un libro que abarca tantas lecturas teóricas y referencias a datos, me pareció que faltaron más referencias.
En resumen, me parece un libro muy bien trabajado, que no está de más dentro de una biblioteca feminista, y que es ideal para compartir con quienes se inician en el camino del feminismo o a replantearse algunas cuestiones del ser mujer.
Creo que no hay nada que pueda decir sobre este libro que le haga justicia. Simplemente los animo a leerlo, seas mujer u hombre. No importa, lo que SI importa es que empecemos a instruirnos en el tema de cómo fue la mujer tratada a lo largo de la historia. Cómo se nos prohibió educarnos, y cómo es que cuando accedimos a la educación formal no fue de la mejor manera. Mientras que esa educación que vivimos en el día a día, en las charlas, en las redes sociales, en lo que escuchamos en la radio sigue siendo tan opresora como hace varios siglos atrás.
Freijo nos muestra cómo es que esta educación nos encierra, nos arrincona y no nos deja realmente ver lo que sucede. Con el "empoderamiento" actual se busca lo mismo que se buscaba antes, la perfección, la critica y la mujer buena. La que todo lo hace, y lo hace bien, porque somos empoderadas. Que no tenemos margen de error, que no podemos estar desarregladas, enojadas, triste... porque eso nos concierte en una rebelde... y las mujeres rebeldes nadie las quiere, no?
Realmente es un libro que te permite abrir los ojos, que te permite conocer otras historias. Del presente y del pasado, todas conectadas de alguna manera.
Es un libro que voy a recomendar hoy, mañana y siempre. Y que estoy segura voy a volver a releer en unos años y le voy a dar una significación diferente, porque con estas lecturas pasa eso. Uno se reinventa y ve las cosas desde otra perspectiva.
Tengo Solas para leer y definitivamente va a ser una de mis primeras lecturas para el 2022.
Me gustó pero creo que la autora es muy pretenciosa y cree tener la verdad revelada y ser la única emancipada del mundo. Ese tono altanero me chocó. Detesto a las mujeres que se sienten superiores por pasar de una relación a otra, creyendo que eso las pone por encima de quienes no lo hacen y ella parece tener mucho orgullo por ser una mujer liberada sexualmente. Francamente, qué flojera y bien por su libertinaje sexual. (Sí, ya sé, la estoy juzgando). 🤷🏻♀️
Spoiler: El libro tiene múltiples faltas de ortografía, porque la autora no sabe poner acentos diacríticos. (Su FB está igual). Verdaderamente la editorial hizo un trabajo nulo de corrección ortográfica. Tampoco se hizo una revisión de la redacción porque la autora no sabe usar puntuación y, peor aún, no sabe usar el modo subjuntivo. En verdad me fue difícil terminar de leer con tantos errores. Además, es contradictorio que una mujer que vive de presumir su educación no sepa ni redactar. Peor aún, al final de libro le agradece a su editora por el acompañamiento, lo que deja claro que sí, las mujeres estamos MAL educadas y ni ortografía sabemos, así sea nuestro trabajo.
A mí el libro me aportó poco y coincido con otra reseña de Goodreads en que es superficial y un tanto pretencioso pero veo que sirve de introducción a sus ideas y también ESBOZA sin mucho detalle una historia de las mujeres.
Florencia trae un farol enorme para arrojar luz sobre temas que nos generan dudas y no terminábamos de entender por qué. Un análisis sobre nuestra educación y las trabas que históricamente nos pusieron para acceder a ésta, también sobre cómo cada vez que lo hacíamos no era para nosotras sino para un hombre que detentaba el poder en la época; siempre en torno a ellos, para su entretenimiento. Hoy la historia es distinta en ese sentido y las mujeres accedemos a niveles altos de formación para nosotras, pero es fundamental conocer nuestra historia para entender el camino recorrido y el inmenso camino que aún queda por recorrer.
Se que dice maleducadas pero es fundamental que los hombres también lo lean.
Espero que las innumerables fallas en redacción y gramatica sean culpa de la versión digital. Cómo contenido sinceramente a mí no me aportó prácticamente nada. Es llamativo que la autora hablé constantemente de relaciones sexo afectivas de mujeres con hombres, creo que ni siquiera se puede apreciar la palabra LESBIANA ni una vez en en libro. En varios pasajes se puede ver que para ella el empoderamiento femenino es un empoderamiento puramente académico, como si no existiera otro espacio de construcción de conocimiento fuera de las universidades. Me parece un embole repetir constantemente frases de relleno como "más adelante veremos", "como venimos viendo en el libro", "como ya dijimos antes..". La verdad que más que un libro tiene toda la pinta de un TP. Citas larguísimas de otrxs autorxs, y la frutilla del postre es, después de leer sus "conclusiones" sobre la imagen de mujer, cómo ella misma abusa de esos filtros de Instagram que te hacen "cara de bebé" que tanto critica.
La autora explica de manera clara como la figura de la mujer fue creada, modificada y controlada a lo largo del tiempo. Si bien por momentos parece ir muy rápido y superficialmente, no se puede cubrir toda la historia en un solo libro. Encontré más interesante la segunda parte del libro donde los temas son más actuales y hay más desarrollo. Espero la continuación con (Mal)Educados.
Soy Feminista desde que estoy en primaria (tengo 13), creo que hay muchas críticas del libro en las que no comparto opinión, vi que la crítica más grande fue que Flor hablaba como si supiera todo y hubiera descubrido la verdad absoluta, y mi pregunta es ¿Quién no se sintió así al iniciar en el feminismo?
Vivíamos Todxs con una visión incorrecta de la vida, y aunque la seguimos teniendo (ya que nunca se sabe todo siendo activista, siempre se aprende algo nuevo) todxs creemos que descubrimos la gran respuesta a nuestros problemas (sin enterarnos que nos van a traer más).
El libro no plantea nunca algo que yo no sabía, pero si lo hace para miles de otras personas.
No voy a decir que si ya estas hace mucho en el feminismo el libro va mostrarte cosas que no conocías, porque estaría mintiendo. Pero si recién inicias es un libro que se tiene que tomar muy en cuenta.
Pd: me encanta cuando cuenta que le avergüenza haberce creído más por ser amiga de los hombres, creo que muchas nos avergonzamos de eso.
Me pareció un libro muy recomendable para introducirse, a partir del concepto de "(mal) educadas", en la historia de los mandatos, arquetipos y desigualdades con los que hemos sido (mal) educadas las mujeres. Es un libro de divulgación, por lo tanto totalmente accesible a cualquier persona que desee saber sobre este tema. La escritura es muy amena, hay sustento teórico sin ser abrumador (porque es divulgación) y de paso te llevás nuevas lecturas para seguir ampliando y aprendiendo. Todas estamos atravesadas por las desigualdades que se sostienen en la idea de la "buena mujer", idea que solo reproduce en nosotras empobrecimiento, sobrecarga mental, culpa, entre otras cosas. La autora no solo nos invita a cuestionar, sino a comprender para poder entender desde la empatía lo que vivimos las mujeres y la esperanza de que esto contribuya a una mejor sociedad.
3 estrellas porque leí hace muy poco Solas y lo que planteó en este nuevo libro fue en algunos momentos muy repetitivo. La ultima parte me pareció excelente y con info nueva en terminos de lo que ya habia planteado antes. Sin embargo sigo sosteniendo que todo lo que escribe Flor Freijo es excelente y es de esas lecturas que siempre sabes a quién recomendarselo para que deje de sufrir.
Estando del otro lado de la vereda, solo por el hecho de ser hombre, encontré en este libro un aprendizaje sobre la mujer y su lucha diaria dentro de la sociedad. La autora nos cuenta en primera persona todas las situaciones que debio y debe atravesar en la vida, por el simple hecho de ser mujer. Cruda realidad, libro que todo hombre (heterosexual) debe leer si o si.
Es un libro medio pochoclero, hay análisis de género mucho más profundos que este. Más alla de eso, lo que me gustó es que es de lectura rápida y amena, y hace un repaso a lo largo de la historia muy útil para entender lo invisivilizadas que somos y fuimos a lo largo del tiempo
Como chabon hetero, crecí expuestos y modelado por una serie de roles y representaciones que condicionaron y condicionan la forma en que estoy en el mundo y como me relaciono con los Otros: mujeres, hombres, no binarios y hasta otros animales.
Los hombres tenemos nuestras cargas por nuestro género: valientes, fuertes, hábiles, proveedores, ambiciosos, etc pero cuando levantamos la vista de nuestros ombligos y repasamos lo que somos, hacemos y pensamos es fácil ver la infinidad de privilegios que tenemos.
Cosas tan básicas como salir despreocupados a la noche de que nos droguen y nos violen, de subirnos a un taxi, de que nos acosen con gritos desde una obra, etc etc etc.
Leer la perspectiva de una mujer feminista que dedico no poco tiempo, energía y padecimiento a develar estas estructuras me parece clave para descubrir los sesgos que tenemos y dejar de reproducirlos en nosotros y en nuestro entorno, incluyendo hijos.
El libro es un ensayo con algunas referencias bibliográficas interesantes, referencias históricas y hasta mitológicas pero está especialmente atravesado por la voz de la autora lo que le da ese valor de testimonio donde late lo personal en el dedo que señala los mecanismos y hechos que la historia y la sociedad pasan por alto.
Funciona como introducción a ciertos temas y planteos, en un tono ameno de leer (aunque con algunos errores de edición). No es mal libro pero tampoco siento que diga nada nuevo sobre cómo las mujeres fuimos educadas bajo los estereotipos de género que seguimos reproduciendo hoy en día. Se vuelve bastante repetitivo y demasiado autorreferencial para mí gusto.
"Démonos tregua, fuimos (mal) educadas, pero ahora decidimos dar un giro de timón. Y empezar un nuevo camino."
¡Hola a todos! Hoy les traigo la opinión sobre este libro al cual estaba completamente negada a leerlo, definitivamente en mi cerebro decía: nunca leeré ese libro porque yo no soy feminista, ni me interesa nada de eso. Y... en este momento debo decir que al haberlo terminado en 3 horas me considero FAN de esta autora, y de este libro. La complejidad que tienen los temas que se tratan en este libro, la escritora los deshace y nos lo explica con palabras que todos podemos comprender. Es un libro que deberían leer hasta en la escuela porque es algo que las mujeres desde que somos chiquitas deberíamos saber. Es que estamos tan bajo el mandato de los hombres que, a veces, somos incapaces de ver otros horizontes. Mal Educadas te hace abrir los ojos o te recuerda lo que debemos hacer.
"Si sos gorda, te tenés que bancar que todos opinen de vos, escondiendo el temor personal al cuerpo gordo, a tenerlo ellos mismos en un discurso disfrazado sobre la salud."
El capítulo que habla sobre la gordofobia, los estereotipos, me hizo sentir tan identificada. Siempre tratando de encajar en esos cuerpos flacos, haciendo miles de dietas para sentir que sos del mismo grupito de las populares, dejando de comer para que te acepten ¡Por Dior! Cuantas cosas mal hice y hacemos para ser parte del todo que debe ser perfecto ¿Según quién?
"La gordofobia, además de un miedo personal que puede traducirse en enfermedades alimenticias, es una enfermedad social en donde sobre todo el cuerpo de las mujeres está sometido al escrutinio público."
Con esta frase dejo esta mini opinión, definitivamente recomiendo este libro. ¡Nos leemos pronto! Elu
Me encantó el libro de principio a fin, algunos capítulos mas que otros. Todos tocan experiencias en las que me siento identificada y estoy segura de que la mayoría de mujeres que lean este libro también lo van a sentir así. Fui desplegando mis impresiones en los avances, asi que solo quiero destacar algunas frases e ideas principales con las que elijo quedarme:
"El diálogo entre nosotras se hace urgente para sacar a la luz un sentir que parece personal, que nos hace pensar que somos las únicas que tenemos esa sensación de malestar, pero que en realidad es colectivo"
"La promesa social hacia nosotras es que si somos , vamos a ser amadas. Y si somos amadas, seremos felices."
Karen Horney en respuesta a Freud: las mujeres no envidiamos el pene, las mujeres envidiamos la independencia masculina.
"Si, somos hijas de abuelas y madres que muchas veces no se permitieron soñar por miedo, o por el qué dirán, o incluso porque no se puede soñar lo que no existe en nuestro mundo de representaciones"
"Ser bella, ser sexy, ser lo que se espera de una"
"El amor propio es romper con la dependencia de nuestro estado anímico a los mandatos de belleza"
Dejo afuera muchos pasajes que había anotado porque siento que concentran las ideas de todo el libro y las estaría revelando todas prácticamente. Es un libro que recomiendo a todas las mujeres fundamentalmente y a todas las personas que compartan la idea de tener que cambiar la realidad patriarcal en la que vivimos, y que entiendan nuestra historia un poco más. Ahora me quedo con ganas de leer los otros libros de Flor Freijo, y también algunos de los que se mencionan en éste. ☺️
Un libro super llevadero acerca de como las mujeres hemos sido educadas a lo largo de la historia, las desigualdades que nos han formado y con las que seguimos viviendo hoy en día. A través de sus páginas se mezclan teoría y experiencias personales de la autora para ejemplificar situaciones que me hicieron sentir comprendida y también me ayudó a entender que de generación en generación avanzamos un poco hacia la equidad pero hay que entender a las diferentes generaciones y mujeres para hacer más cambios a futuro.
Que libro intenso. No sé cómo empezar porque me tomo todo ese tiempo leerlo no por aburrido sino por intenso, es la mejor palabra que encuentro. Creo que califica de manual a esta altura, o ensayo? No quiero catalogarlo como lo equivocado, pero creo que es una lectura casi obligatoria sobre todo en este momento. Encontré muchísima información que desconocía y me pareció súper valiosa para entender muchos aspectos de la historia y su correlato con la actualidad. Muchas mujeres históricas que nunca había escuchado nombrar y nunca leí en los libros de historia, que de hecho fueron cruciales o por lo menos muy influyentes en ciertos acontecimientos de los que todos aprendemos en el colegio. Este libro enseña no solo lo qué pasó sino cómo se edita la historia y se elige que nombres merecen ser escritos y cuáles serán relegados al olvido y cómo estos nombres olvidados suelen ser los de las mujeres. Enseña que la diferencia no es de ahora, no es nueva y no exageramos cuando la marcamos. No solo es un gran material feminista, sino que realmente creo que es un libro muy interesante que da respuestas y a su vez exige que nos preguntemos muchas cosas que son necesarias para no seguir aceptando lo establecido solo porque así nos dijeron que es el mundo. Lo recomiendo mucho para quien esté armando una biblioteca feminista, para quien esté empezando a leer del tema, para quien quiera aprender de historia y para quien quiera leer un libro que le deje algo.
Un libro maravilloso, me encantó, te abre los ojos y te hace decir "hey si, eso me ha pasado a mi" y es que no hay situación que no le haya pasado a una mujer en su vida, definitivamente necesitamos re educarnos, tanto hombres como mujeres
Un básico en el camino del feminismo Una manera fácil clara y contundente de hablar del tema, lleno de citas y documentación te da una buena guía para entenderte y entender el mundo de las mujeres y la educación de la humanidad
Me enojé mucho en el proceso de lectura, ver con datos estadísticos y como desde milenios pasados la sociedad nos educa y enseña a vivir en esta desigualdad es desalentadora y muy angustiante. Hay mucha lucha por delante, y voces públicas como la de Florencia Freijo, donde lleva su relato a lo liso y llano(un libro fácil de leer) es muy importante para que la llegada sea más amplia y se sigan trayendo estos temas a la mesa.
Este libro pone en palabras lo que he querido decir durante toda mi vida. Me da un porqué, me explica en qué desembocan las cosas; la división sexual desde que somos bebés, el mandato de ser cuidadora, “buena”, la exigencia de un cuerpo hegemónico, el control que tiene la mirada sobre una. He tenido experiencias personales sobre todas las problemáticas que menciona Flor. Hace años quería blanquearme la piel; siempre he querido ser mas flaca (ya lo soy, pero que bueno es el mundo para hacerme creer que aún así tengo unos “kilos de más”) y tener buen culo, la gente se sorprende porque no le invierto mucho ni al maquillaje ni a la ropa (¿se sorprenden porque mi hermano y padre no lo hacen? Nah), mi madre siempre me dice que de chiquita no me gustaban ni las muñecas ni los bebés pero igual ahí está todo el set de cuidados que me compró a pesar de que yo ni lo quería; la carreolita, el bebé, la cuna, la andadera... perforada desde que nací para que se note que soy niña; educada para agradar y aguantar la violencia, pero también para prevenirla, tengo que aprender “cómo son los hombres” y si me violentan es mi culpa. Me educaron para reírme de las otras mujeres. Así como Flor, yo también me burlaba de las niñas femeninas. Me creía que por juntarme con puros hombres era mejor que las demás. Compartía las ideas sexistas de que las amistades de mujeres son pura hipocresía, que las mujeres son aburridas y los masculino es mas divertido. Me reí de las “feminazis”, les decía asesinas aborteras. Llegué a acosar porque me parecía gracioso (pero no me parecía gracioso cuando me lo hacían a mí), y si alguien se enojaba los trataba de pesados y exagerados (así como me trataban a mí cuando me agredían). Me arrepiento mucho de eso, pero con el tiempo uno madura y cambia, y pide perdón; especialmente a quien alguna vez agredí de cualquier forma, y a mí misma. Cambié mucho de parecer en cuestión de meses, y me di cuenta de que el feminismo me incomodaba tanto porque me hacia reconocer que fui agresora, y porque ponía en jaque un montón de cosas que creía “normal”. Es decir, sé que estaba ahí, pero el feminismo no me sonaba bien, y lo único que veía de ellas era mujeres siendo golpeadas por policías rusos, mujeres mostrando los senos y haciendo desmadres. Flor escribe sobre una idea que sigue vigente hoy: los hombres son “racionales” y las mujeres “emocionales”. “Mira a esas feminazis locas, gritando y llorando”, comentaban los hombres, y yo quería ser la chica cool y claro que sí, ja ja, estúpidas, así como no quieren que se rían de ellas. Es común ver memes anti feministas donde nos comparan con animales no humanos, con changos, nos acusan de tener retraso, “mejor pónganse a estudiar” nos dicen. Una vez dejas de lado los memes misóginos, (y en mi caso, dejas de buscar aprobación masculina) créeme que te cambia todo.
Me falta mucho por aprender, y seguir a Flor en redes me ha ayudado muchísimo. Me encanta lo que escribe y por fortuna encontré su libro en la biblioteca pública (Flor, llegaste hasta Los Ángeles, California!). Me ha encantado. No soy muy fan de la historia, pero Flor mezcla pasado con situaciones del día, y todo me queda clarísimo y puedo hacer memoria, y ah sí, me acuerdo de esto, me pasó algo parecido, o aquí pudo haber sido esto, y lalala, ¡y cómo me hace enojar! Estoy harta del patriarcado.
Este libro es un recorrido por la historia de la educación de las mujeres, y cómo vestigios de esa educación siguen en pie al día de hoy, a veces disfrazados de supuesta “naturaleza”. Naturaleza” que sólo utilizan como herramienta para sostener las desigualdades. “Como así -creo, y me han hecho creer- ha sido siempre, así es y así será”. Algo de lo que más me ha gustado del libro es que nos planta la semilla de la duda sobre un montón de temas para que nosotras vayamos más allá e investiguemos. La ola reaccionaria después de los feminismos, teorías sobre el patriarcado, economía del género, psicología... pasa breve, pero eficazmente por estos temas, los utiliza para que comprendamos su conclusión, pero al menos a mí, me deja con ganas de más. Y no es para nada un aspecto negativo; el objetivo del libro se cumple.
Hoy conozco más sobre la (mala)educación que tenemos las mujeres. Y mañana espero que este conocimiento sirva para iluminar a las demás. O al menos, para lograr que se cuestionen. Así como Flor, yo también pienso que la educación es la puerta a la libertad.
4.5 porque hay errores en la redacción/edición, y me habría gustado data para apoyar afirmaciones como “las mujeres hoy lideramos los índices de desempleo, pobreza”, etc.
Quiero admitir que aún no eh terminado de leer esta lectura, pero me siento bastante motivada y preparada para hacer una reseña que le hago un poco de justicia. La verdad en todo momento lo ví como un libro simple, para personas que se quieren iniciar en el feminismo o re educarse (y si lo es), me decía inconscientemente que no me iba aportar nada nuevo y que equivocada, me abría los ojos constantemente con tonterías como los dibujos animados que mira mi hermano pequeño ¿Realmente quiero que esa animación sea un factor importante en su día a día?; Darme cuenta que aunque no quiera modificar mi cuerpo, cuando lo escondo (como ponerme remeras que tapen mis brazos porque están llenos de bellos) es como si estuviera modificandolo, porque no lo muestro, lo escondo ante una sociedad para que sus pensamientos sobre mi sean "agradables" no quiero afrontar a mis "amistades" que juzgan y opinan de cuerpos ajenos. En fin hay demasiados ejemplos, fue un libro que disfrute mucho ya que me ayudó a recapacitar muchos de los pensamientos que tuve en el día a día, agradezco mucho está lectura y espero leer más de esta autora 🙋🏼♀️🌼
Tenia muchas expectativas de este libro. La premisa es que hay muchas mujeres históricamente invisibles sobre las que deberíamos saber, y que nuestra educación formal e informal ha sido no solo incompleta sino también nociva. Estoy obviamente de acuerdo con todo esto.
Me hubiera gustado que fuera mas allá, incluyendo más ejemplos de aquellas mujeres que históricamente deben ser reconocidas, pero sobre todo porque me gustaría que el análisis fuera mas interseccional y que incluyera las complicaciones que esto implica. Por ejemplo, el valor económico de la mujer era diferente en las clases bajas que en las clases altas, y el acceso a la educación de, digamos, las mujeres de las familias reales europeas del siglo XVI, si bien era diferenciado y segregado por genero, era muy superior a la educación de cualquier hombre no aristócrata. Esto también es importante entenderlo políticamente, porque muchas mujeres aristocráticas ostentaban poder real, algunas incluso desde puestos de mando. Asimismo, hay muy pocos ejemplos de sociedades no occidentales. Muchas de ellas, en la antigüedad y previamente a la dominación europea colonial, tenían roles de genero menos estrictos y participación real de las mujeres en la toma de decisiones políticas. Creo que el libro ganaría en profundidad si evaluara como el genocidio de los indigenas fue producto del uso de las violaciones de mujeres como arma de guerra, y luego creando estructuras de genero rígidas en sociedades indigenas que no las tenían.
De cualquier manera, es una muy buena introducción a la problemática de genero.
Me provoca varias reflexiones interesantes este libro. Si bien me parece esclarecedor e informativo, también me pasó que mi primera sensación fue de que hay un sesgo en el relato. No quita que lo que se está diciendo sea cierto, pero por ejemplo, en la página 192 habla de "(...)la prevalencia de enfermedades mentales a escala global anual fue de 5,5% para nosotras y 3,2% para ellos(...)". No sé si es un resultado contundente o una estadística conveniente. De a ratos me agobia el sentir como que hasta "en lo bueno" hay "algo malo". Es como decir que un mayor porcentaje de les docentes son mujeres, AHHH pero porque nos instauraron que somos cuidadoras (por decir algo). Todo tiene una contracara y eso, en lo personal, me pone a la defensiva. ¿Es todo tan así? ¿Estoy cuestionando lo que leo por mis raíces de crianza machista? ¿Es exagerado, pero necesario para que en unos años encontremos un equilibrio? Bueno, convengamos que el feminismo tampoco tiene reglas talladas en piedra. Así y todo creo que cumple su objetivo, replantearnos nuestras estructuras, revisar lo que naturalizamos y seguir construyendo un futuro de derechos y responsabilidades equitativos.
fue muy caconoso, lo empecé a leer por que me parecía interesante la idea de conocer el porque o la historia de por que las mujeres siempre se les prohibió el acceso a la educación, pero termine leyendo una auto bibliografía cagada de por que la autora tuvo una vida de mierda (causada por la misoginia) y donde, de vez en cuando, hacía referencias históricas sobre lo que le pasaba. Teniendo en cuenta que varías veces la autora describe al eje del libro como "lo ocultas que estuvieron las mujeres a lo largo de la historia" me parece bastante triste y aburrido que solo hable de que su papá la abandono y que la cancelaron en twitter. Asimismo me pareció re xd que siempre se refiera a "nosotras" a la hora de hablar de problemas de mujeres que no le competen, dijiste que pesabas 58 kilos que me hablas de "nosotras" refiriéndote a las mujeres obesas. También, mientras lo leía, sentí que el libro era una constante publicidad a su otro libro "solas" ya que lo referenciaba constantemente. No estuvo tan mal, pero si iba a hacer un libro sobre sus problemas no metas contextos históricos que ni siquiera tienen algo que ver!!!!!