El país de las emociones tristes: Una explicación de los pesares de Colombia desde las emociones, las furias y los odios

by Mauricio García Villegas

En Colombia hemos tenido demasiados conflictos que se habrían podido resolver pero que terminaron en una guerra, demasiados proyectos que se habrían podido llevar a cabo pero que acabaron extraviados en las disputas entre facciones, demasiados consensos que se rompieron por rencores, demasiadas leyes que se enredaron en las contiendas, demasiados buenos propósitos que se malograron en los odios, en síntesis, demasiadas buenas ideas estropeadas por malas emociones. Claro, en todos estos fracasos también hubo mucho de injusticia social, de despotismo, de oligarquía, de incapacidad administrativa y de corrupción; pero todos estos pesares habrían sido más fáciles de superar si no hubiesen estado envenenados por las furias de la política, por el cerramiento emocional de los espíritus. ¿Cómo explicar esto? Este libro responde a esta pregunta de la siguiente en todas las sociedades (como en las personas) existe una tensión interna entre, por un lado, lo que Baruch Spinoza llamaba, las emociones tristes, como el odio, la venganza, el resentimiento, la envidia, el miedo y, por el otro, las emociones amables o plácidas, como la benevolencia, la civilidad, la compasión, el respeto y la simpatía. Cada país adopta un determinado balance emocional entre estos dos abanicos emocionales, de lo cual obtiene su identidad cultural, que es algo así como el temperamento de los grupos sociales. En Colombia ese balance, sobre todo en el ámbito de la cultura política, ha estado demasiado inclinado hacia los odios y las venganzas. Este es un libro empieza con los hallazgos de la llamada revolución cognitiva para explicar el peso que tienen las emociones en la naturaleza humana y termina con una discusión sobre el mal, la polarización política y con una defensa ética de la tolerancia y otras emociones plácidas.

Genres: Essays

339 pages, Kindle Edition

Published November 23, 2020

Reviews

[Schwarzer_Elch · Rating 1 out of 5]

La hipótesis es buena, pero la visión del autor está completamente sesgada y esto hace que se contradiga a sí mismo. Una lástima, además, que un análisis de este tipo deje completamente de lado el valor y el aporte de las civilizaciones americanas pre colombinas (a las cuales, además, mezcla en una única unidad) y de las afro descendencias.

Este libro fue parte del club de lectura de El Estante Literario
#ElEstanteLiterario #CLE #EEL #CLE2021 #CLE_ #LaBuenaLectura

[Jo’s Reading Room · Rating 1 out of 5]

A este libro hacía falta una macheteada, trabajo del editor. Pero haciendo un balance y obviando que podía borrar la primera parte y otras secciones o explicaciones que me di cuenta que son lugares comunes suyos (como lo de los abogados, tiene un libro o dos de ello, que cool pero suficiente nombrarlo y chao) al final me gustó y pues su hipótesis fue interesante. Principalmente me gustó su análisis España-LATAM, pero por otro lado las raíces afro las vi de pasada y las indígenas pues brillaron por su ausencia. Me sorprendió mucho que en sus conclusiones eso no haya estado incluido, principalmente cuando se lanza a querer recuperar el amor por la naturaleza de las élites del siglo XIX. Ahí se nota el sesgo muy aristocrático y yo diría hasta desubicado si habla de Colombia. (tomado de WhatsApp lol)

[Juliana Toro Henao · Rating 5 out of 5]

Este libro me hizo acordar de la más repetida frase de Douglas North, en este caso no sería “las instituciones son las reglas de juego de una sociedad” sino “las emociones son las reglas de juego de una sociedad”. Mauricio Villegas nos lleva por un viaje donde demuestra cómo las emociones que traemos desde el pasado determinan nuestro presente. Emociones tristes son las que hemos vivido desde nuestros antepasados españoles, desde la religión catolica y son ellas quienes han forjado nuestra tradición política, social e ideológica. Es un libro que mezcla la experiencia de vida del autor (en una familia antioqueña tradicional que no hace sino recordarnos nuestra infancia) con toda la rigurosidad teórica que lo caracteriza, desde temas tan actuales como las ciencias del comportamiento hasta la historia de la espana colonial e incluso un recorrido por la historia colombiana. Una obra increíble que en medio de su profundidad, es un texto sencillo para comprender quienes somos y que sonó como país y cultura.

Algunas de las frases preferidas:

- Llego la guerra y comenzó el silencio
- Lo único que valía la pena en la vida era el amor y que la naturaleza humana está inevitablemente destinada al afecto
- Somos una cultura aferrada a las emociones tristes. cada país adopta un determinado arreglo emocional
- Que la materia sea capaz de pensar en al materia es, en definitiva, uno de los misterios más fascinantes del universo. Jorge Volpi
- Cuando nos liberamos, así sea parcialmente, de la desmesura que ponemos en las imágenes del mal, las emociones tristes de aplacan; no desaparecen, pero se amansan. Así aprendemos a diferencias lo real de lo imaginario, lo útil de lo contraproducente y lo que podemos hacer para remediarlo de lo imposible.
- El amor es menos predecible que el odio. Las personas que se quieren se reinventar y en esa tarea descubren nuevas formas de amarse.

[Mariana Castro Echavarría · Rating 4 out of 5]

Este es un ensayo para reflexionar sobre Colombia y lo que somos como país: dos bandos visceralmente enfrentados entre sí. Más allá de la narración histórica desde la conquista de América y la influencia que tuvimos desde la España del Siglo del Oro, rescato el debate que plantea Mauricio García Villegas sobre el origen de nuestros enfrentamientos, y cómo estos enfrentamientos han sido políticos, más que sociales; y cómo precisamente la política y el poder se han servido de nuestros arreglos emocionales para sembrar odio, miedo, rencor y venganza.

La tesis de las emociones tristes es tomada de Baruch Spinoza; no creo entonces que en este ensayo uno se encuentre con una tesis reveladora, novedosa y estructurada. Tampoco creo que esa fuera la pretensión del autor. Lo que sí creo es que MGV pudo exponer con claridad cómo esas emociones tristes han marcado nuestra historia, nuestras guerras, nuestras profundas divisiones.

Es necesario aceptar la invitación del autor y detenernos en reconocer cuáles son esas emociones que moldean nuestro pensamiento, porque solo identificando la carga emocional que nos envuelve podemos encontrar otras razones y otras emociones para actuar de manera diferente. Aprecio muchísimo el elogio que hace el autor de la “tibieza” o la moderación: que las emociones nunca se apoderen lo suficiente de nosotros como para caer en dogmatismos.

Excelente y recomendado, advirtiendo que no es un texto de historia ni de filosofía: es una interpretación, claramente subjetiva, pero con ideas que pueden resultarnos profundamente útiles.

[Carlos · Rating 3 out of 5]

Como el autor mismo señala, es un libro que busca entretener. Es un texto que en el tono de ensayo no tiene una estructura muy rígida y académica como se acostumbra a leer en el autor. No desarrolla una tesis de forma rigurosa sobre las emociones tristes; lanza una red de ideas desde diferentes aristas que deja inquietudes al lector. Al finalizar el texto, me sentí un poco engañado en el momento en que el autor dirige su tesis al señalar la importancia del programa político de los "moderados" en Colombia y se siente un tono político que convierte este libro en parte de lo que será la propuesta "intelectual" de las elecciones 2022.

[Kristina]

Hay bastantes cosas interesantes en este libro, me hubiese encantado una visión más psicológica, al final está hablando de las emociones, pero fue mi culpa por no haber revisado primero quién era su autor (un abogado con doctorado en Ciencia Política). Por lo tanto, este libro tiene una visión más sociológica y política sobre por qué los colombianos somos como somos.

De hecho, lo resume bastante bien cuando escribe:
Mi hipótesis es que nuestro balance, sobre todo en el ámbito de la cultura política, ha estado demasiado inclinado hacia los sentimientos tristes y, como consecuencia de ello, hemos tenido demasiados conflictos que se habrían podido resolver pero que terminaron en una guerra; demasiados proyectos necesarios que se habrían podido llevar a cabo pero que acabaron extraviados en las disputas entre facciones; demasiados consensos que se rompieron por nimiedades; demasiadas buenas leyes que se enredaron en el proceso de implementación; demasiados líderes sensatos que se embrollaron en sus mezquindades; demasiados propósitos nobles que se malograron en las inquinas; en síntesis, demasiadas buenas ideas estropeadas por malas emociones

Para mí, el libro no deja de ser una reflexión (y como todas ellas muy personal) sobre la historia colombiana desde la perspectiva de un aristócrata; estamos hablando de un hombre blanco privilegiado que se olvidó de la herencia indígena, negra y de género que tenemos, por lo que se acomoda bastante bien al discurso hegemónico de lo que constituye la "patria colombiana".

Sin embargo, entiendo porqué puede puede ser tan cómodo de leer: su lenguaje es muy familiar, muy tibio (guiño guiño) y sus referencias son bastante interesantes, por ejemplo, su planteamiento acerca de las emociones triste se basa en Baruch Spinoza y su filosofía acerca de las pasiones tristes explicada en su obra principal: la Ética (posteriormente Martha Nussbaum la retomará para acabarla jajaja perdón, para diferir con ella en su teoría sobre las emociones políticas), lo que significa que García Villegas debe actualizarse, ah no es cierto jajaja. En este punto solo estoy cansada. En fin...

Para resumir, las pasiones tristes son aquellas que disminuyen nuestro poder de obrar. Incluyen emociones como la tristeza, el miedo, la envidia, el odio y la desesperanza. Estas emociones nos hacen menos capaces de actuar de manera autónoma y racional. Spinoza argumenta que cuando estamos dominados por pasiones tristes, nuestra capacidad de pensar clara y racionalmente se ve comprometida y somos más susceptibles a influencias externas y menos capaces de buscar nuestro verdadero interés y bienestar. Y eso es lo que trata de argumentar García Villegas mientras recorre fragmentos de la historia de Colombia y de su propia familia y crianza.

[Andrea Ramírez Pisco · Rating 5 out of 5]

Soy una gran afortunada: he publicado un par de artículos con Mauricio García Villegas donde yo pongo los números y por supuesto, él pone la magia.

Leo cada uno de los libros de Mauricio con la felicidad propia de quien lee algo que escribió su maestro, los leo con enorme valoración y respeto por cada una de sus ideas bien argumentadas, pero sobretodo los leo con una profunda admiración, porque si hay algo que quisiera aprender de él algún día es la maravillosa forma en la que escribe, hilando temas tan densos como las emociones, la historia y la política de una forma práctica, sencilla y sin pretensiones.

Mi mayor sueño como investigadora es algún día escribir al menos la mitad de lo bien que lo hace él: "Digamos que yo intento entretener contando cosas serias o, por lo menos, cuento cosas serias tratando de que el lector no se aburra. Y bueno, quizás también lo hago porque prefiero, con algo de inmodestia, una desenfadada conversación con muchos, que un sesudo tratado con pocos."

Si usted tiene que escribir cualquier cosa para que otra persona la lea y pretende con eso difundir algún conocimiento (sin importar lo que sea), por favor lea alguno de los libros de Mauricio García Villegas, para mí son una gran cartilla de cómo hacer divulgación científica.

[Oscar Loaiza · Rating 4 out of 5]

Un acercamiento a las razones que podrían explicar muchas de nuestras realidades actuales e históricas en Colombia; pasando por temas tan variados como la revolución cognitiva, la colonización, el papel de la religión católica y sus dogmas, nuestra ubicación geográfica, el contacto con la naturaleza, el origen de los conflictos y la adopción de tendencias emocionales que tienen los países desde sus inicios, combinados con expresiones patrióticas que marcan aún más su devenir.

Una demostración de la inclinación de Colombia hacia las emociones tristes (envidia, miedo, venganza), diferente a las emociones plácidas (civilidad, compasión, benevolencia); división obtenida del pensamiento de Baruch Spinoza.

[Sebastián · Rating 5 out of 5]

Antes de sentarme a escribir una reseña como se debe, es necesario consignar mis pensamientos finales de este libro.
1. Que buen libro para cambiar perspectivas de vida.
2. Un buen libro para conocer un poco de varios temas y elegir una dirección.
3. Un libro medianamente difícil de leer sobre la historia de Colombia.

Sin más, agradecer el encuentro de esta lectura. Más adelante una reseña.

[Elizabeth Ferrer Sanabria · Rating 4 out of 5]

Un ensayo que vale la pena leer, reflexionar, meditar y conversar. El autor hace un recorrido para entender por qué algunas emociones están más arraigadas en los colombianos desde la ciencia, la literatura, la historia, la ética y la moral. Resalto el trabajo bibliográfico que evidencia la multiplicadad de puntos de vista que toma el autor, desde la definición de la emociones tristes y plácidas de Spinoza, pasando por las crónicas de las indias, hasta los relatos que construye Gabo en sus novelas que reflejan los sentires y emociones del país.

[Alexandra Sánchez Hernández · Rating 4 out of 5]

Una buena reflexión sobre el papel de las emociones, la moral, el patriotismo y la religión en la cultura colombiana. Por qué somos un país triste?
Las emociones como una fuente de entendimiento de quienes somos, pero falta la explicación de las inmensas desigualdades que tiene el país y sus brechas estructurales.
Siempre es un gusto leer sobre Spinoza y su dios.
⭐⭐⭐⭐

[Nikotta · Rating 5 out of 5]

Excepcionalmente escrito, el lenguaje que maneja, el conocimiento y la investigación que muestra.
Su posición y exposición son fascinantes, verdaderamente es maravilloso.

[Simon Villa Jaramillo · Rating 5 out of 5]

Solo citaré dos frases del libro que me encantaron: 1. “Lo que necesitamos es odiar menos y comprender más; domesticar las furias y aguzar el entendimiento” Espinoza 2.”aconsejaría que dejaran a los demás con su espíritu mixto de tradición y modernidad, sin querer darle un alma uniforme” Pio Baroja.

[Adriana Villegas Botero · Rating 4 out of 5]

Ver comentario en: http://secretodelectura.blogspot.com/...

[Fernanda Hincapié · Rating 4 out of 5]

En este libro, Mauricio García nos hace un recorrido del malestar político y social de Colombia. Menciona que el odio, el resentimiento, la culpa, la vergüenza, el remordimiento y la venganza, nos han convertido en la sociedad que somos. Un país inclinado hacia las emociones tristes, propenso a la violencia y a las emociones exacerbadas. Sirviéndose de la filosofía de Baruch Spinoza, García Villegas, Montaigne, Octavio Paz, entre otros; hace una interacción entre las emociones y la política en un intento por diagnosticar las patologías que agobian a nuestro país. "Lo que necesitamos es odiar menos y comprender más; domesticar las furias y aguzar el entendimiento; empeñarnos más en reducir el mal y menos en destruir a la gente mala".

[K. Sánchez · Rating 5 out of 5]

Este libro me ha sorprendido gratamente porque:

i) su narrativa es supremamente cómoda, diría yo, para cualquier tipo de lector, y eso es algo que agradezco sumamente en las ciencias sociales, pues es una manera apropiadísima de expandir las temáticas que se trabajan y hacerlas asequibles a gran cantidad de personas;

ii) la variedad de temas lo hace muy interesante. Hablar de filosofía, de política, de biología, etc. ha sido una linda manera de enlazar temáticas y darle un potencial increíble, pues la variedad de puntos que se tratan aquí, seguramente, da para que cada cual, dependiendo de sus intereses, pueda profundizar o tener nuevas curiosidades frente a cualquier asunto tratado;

iii) me encantó la dulzura de esta prosa, porque ese modelo en forma de ensayo le da un tono personalísimo. Te pone a pensar cosas y te saca del rigor académico que estás acostumbrado a ver en muchas lecturas de no-ficción.

No me pronuncio justamente sobre la carga del "rigor académico" en profundidad, primero, porque no quiero hacer críticas relacionadas con la orientación temática (sobre todo en lo relativo al abordaje histórico) y, segundo, porque no considero que un ensayo con estas dimensiones deba ser excesivamente profundo y remilgoso para su estilo.

[David · Rating 3 out of 5]

"En Colombia, el gran contraste político, el que más incidencia tiene en lo que hemos terminado siendo, no es entre modelos de sociedad o ideologías, sino entre, por un lado, quienes luchan por principios que consideran verdades absolutas, verdades que ni se cuestionan ni se negocian y, por el otro, aquellos que defienden ideales políticos, no verdades reveladas, que se discuten y tramitan a través de procedimientos judiciales. El gran contraste no es ideológico sino ético, y por eso, más que saber cuál es el modelo de sociedad que queremos, lo que necesitamos es sosegarnos, encontrar arreglos emocionales más plácidos."

Mauricio García Villegas

[Andrea Jaramillo · Rating 5 out of 5]

Uno de los mejores libros que me he leído sobre Colombia y sobre la naturaleza humana de sus ciudadanos. Mauricio logra hacer un análisis de la historia incluyendo motivaciones y sentimientos, que son los principales causantes de lo que hacemos como individuos. Estuve así 🤯 en cada párrafo/ página.

[Vladimir Castro · Rating 5 out of 5]

Vale la pena!

El camino del medio

[Santiago · Rating 5 out of 5]

Aunque sesgado por momentos y discutibles algunos de sus argumentos, es una buena mirada de Colombia, de su pasado histórico y su influencia en el desarrollo actual del país. Bastante necesaria esta lectura para tener, al menos, un punto de vista válido sobre la política colombiana. Me ha gustado su lenguaje y su forma de abordar tantas temáticas tan variadas sin perder el sentido. Muy recomendado.

[Daniel Ortiz · Rating 2 out of 5]

Este libro es como un perro persiguiéndose la cola.

[Juan David · Rating 5 out of 5]

"Más que un individuo que piensa, el ser humano es un individuo que siente".

Las situaciones socioeconómicas y políticas de un país suelen explicarse desde sus guerras y revoluciones padecidas, sus procesos de industrialización, cultura, geografía, políticas y visión general de una ideología como proyecto de sociedad y por lo general en términos académicos que requieren cierta formación en la materia para una comprensión más amplia del pais en el que se vive y de las razones de su pobreza, subdesarrollo, desigualdad etc.

En este caso Mauricio García, hace una exploración y posterior análisis fundamental a partir de las ideas y estudios del filósofo Spinoza, acerca de lo que este denominó: emociones tristes.

Las emociones tristes hacen alusión a aquellas sensaciones de odio, furia, venganza, despreció, entre otras; las cuales terminan apoderándose del raciocinio del ser humano, siendo tierra fértil para las cadenas del dogmatismo y fanatismo.

"Nuestro abogado interno nos defiende de lo que hacemos y de lo que hacen los nuestros, sin importar mucho el contenido de lo que se discute".

El libro se compone de tres capítulos, dónde inicialmente el autor nos cuenta su experiencia de crianza y de como la religión y el fanatismo acerca de una ideología o creencia nubla la razón, trayendo a colación las emociones tristes y que estás terminen defendiendo una posición radical y no unas ideas abiertas a apoyarse en la riqueza de la diversidad.

Posteriormente a través del proceso evolutivo de las especies, del homo sapiens y teorías de Darwin, el autor nos plantea como la actual revolución cognitiva, nos explica bajo diferentes experimentos realizados la concepción de que el ser humano es más emocional que racional, y que está razón vive en cierto condicionamiento de sus impulsos más mundanos, y que más que enjaular estás emociones, la propuesta de Spinoza fue siempre entender, comprender las razones de por qué alguien dice y piensa lo que piensa, lo cual me llevará a saber por qué siente lo que siente.

En el último capítulo, aclara que el subdesarrollo de nuestras tierras, nuestra falta de civismo y cooperación no solo se explica en las emociones tristes padecidas, también porsupuesto hay unas condiciones materiales e históricas que nos explican la condición de nuestra sociedad como país y en esto incluye la herencia que hemos cargado desde la época colonial y como las grandes ideas desde que somos una república se han visto completamente destruidas; no por ser contrarias o distintas a otras, sino más bien por el odio y la rabia de ver como amenaza aquello que va en contravía de lo inculcado y visto como una verdad absoluta.

"Muchas buenas ideas, las mismas que en otras latitudes han sido claves para generar progreso, han sido entorpecidas por malas emociones, con lo cual tenemos un desarrollo que avanza, pero cargado de lastres. Tal vez deberíamos prestar más atención a los factores emocionales de nuestros fracasos, pues es muy posible que ellos sean responsables de tanto progreso pospuesto. Los colombianos solemos tener convicciones fuertes, quizás asociadas a una tradición política demasiado imperativa y por eso tendemos a descalificar con facilidad a quienes piensan distinto. Pero está valoración suele estar más provocada por la desconfianza, los miedos y las prevenciones, que por una suerte de necesidad de pensar distinto. Las emociones nos separan más que las ideas".

[Alejo López Ortiz · Rating 5 out of 5]

"El País de las Emociones Tristes" de Mauricio García Villegas es un fascinante viaje a través del complejo paisaje emocional de Colombia y la naturaleza humana. Con una perspectiva innovadora, el autor nos guía a través de las emociones que han moldeado la historia y la cultura de este país, mientras nos invita a reflexionar sobre el poder transformador de las emociones plácidas.

García Villegas, un erudito en derecho y ciencia política, combina hábilmente su formación académica con una narrativa poética y personal. Su estilo de escritura nos sumerge en una exploración profunda de las emociones, desde las sombras de la concupiscencia hasta la luminosidad de la compasión.

El argumento central del libro se basa en la distinción entre emociones tristes y emociones plácidas. García Villegas argumenta que Colombia ha estado marcada por emociones tristes como el odio y la venganza, lo que ha contribuido a la violencia y la polarización en la sociedad. Sin embargo, no se detiene ahí; ofrece una visión esperanzadora al destacar la importancia de cultivar emociones plácidas como la benevolencia y la tolerancia para construir una sociedad más justa y democrática.

Este libro es un faro en la oscuridad. García Villegas desafía las narrativas tradicionales al cuestionar la dicotomía alma-cuerpo y la lucha entre el placer y la abstinencia. A través de la historia y la filosofía, nos muestra cómo nuestras emociones son una parte integral de nuestra humanidad y cómo pueden ser agentes de cambio poderosos.

La magia de este libro radica en su capacidad para abrirnos los ojos a la riqueza de las emociones humanas y su influencia en la sociedad. El autor nos lleva de la mano a través de la historia de Colombia, desde los padres fundadores de la nación hasta el presente, revelando cómo las emociones han estado en el centro de los conflictos y los desafíos.

"El País de las Emociones Tristes" no es solo una obra académica; es una obra de arte literario que desafía nuestra forma de pensar y sentir. García Villegas nos anima a liberarnos de las cadenas del odio y la venganza, a abrazar la compasión y la tolerancia, y a embarcarnos en un viaje hacia una Colombia más luminosa.

En un país marcado por la violencia y la polarización, este libro es un faro de esperanza. Es una llamada a la reflexión, a la introspección y a la acción. Es un recordatorio de que nuestras emociones tienen el poder de transformar nuestro mundo y construir un futuro más brillante.

En resumen, "El País de las Emociones Tristes" merece sin duda alguna cinco estrellas. Este libro es un tesoro literario que nos desafía, nos inspira y nos guía hacia un entendimiento más profundo de nosotros mismos y de nuestra sociedad. Una lectura obligatoria para todos los que buscan un cambio positivo en Colombia y en el mundo. ¡No puedo recomendarlo lo suficiente!

[Liliana Franco · Rating 4 out of 5]

Este ensayo me dejó con la sensación de haberme sentado a hablar con un amigo que descarga sus argumentos y pensamientos con mucha pasión y con la esperanza de ser escuchado para lograr el cambio. Es como un grito a los cuatro vientos para que todos sean conscientes del peso que tienen las emociones a la hora de tomar y juzgar las decisiones políticas en Colombia. La escritura me parece impecable, fácil, amena y de divulgación.

Me llega su libro porque incluso las emociones se reflejan hoy (febrero 21, 2023) en las decisiones políticas de Putin, quién expresa en su discurso anual: "Me veo obligado a anunciar hoy que Rusia suspende su participación en el tratado sobre armas estratégicas ofensivas". Si hablamos en términos de Villegas, algo sagrado en el mundo sería prevenir el uso de armas de destrucción masiva; nadie quisiera que su país sea víctima de una de ellas. Si el pueblo pudiera decidir, y fueran al azar a elegir a alguien para activarla, quizás nadie quisiera ser el responsable de dar la orden, sobre todo si saben que pueden recibir una de vuelta. Pero el pueblo no es una sola persona, no tiene conciencia. En ese sentido, lo sagrado pasa a ser definido por quienes representan al pueblo. Aquí es donde Putin redefine lo sagrado. Hoy asegura que nada frenará su guerra hasta el final porque considera a Ucrania “territorio histórico de Rusia” y cierra su discurso con la frase “la verdad está con nosotros”.
Como dice Mauricio, "lo sagrado engendra emociones fuertes de admiración y devoción cuando se trata de quienes lo defienden y de odio y venganza cuando se trata de quienes lo vulneran". Así, gracias al uso de emociones, se puede llevar a un pueblo a aceptar el uso de armas de destrucción masiva bajo la premisa de proteger el territorio propio justificando la violencia como acción política.
En resumen, recomiendo mucho este libro, no solo porque también acepto que las emociones juegan un papel en las redes y los diarios y los políticos y en como nos relacionamos con todos ellos, sino porque también son intrínsecas a nuestra naturaleza y todo lo descrito en este libro podría extenderse a diferentes ámbitos sociales.

[Rafael · Rating 3 out of 5]

Me gusto el libro, a pesar de lo largo, tal vez lo hubiera disfrutado más si fuera un poco más conciso, llegué al punto de odiar el que tuviera tantas citas y menciones redundantes a otros autores para apoyar una misma idea ( aunque me gustó el montón de recomendaciones que encontré de libros para leer o incluso de películas para ver)

Quisiera darle una puntuación más alta, pero me descepcioné poco a poco como el no tomar una posición clara y abogar por una posición neutral acaba siendo un "conservadorismo tibio" como el mismo lo dice en el epílogo.

Estoy de acuerdo con la solución utópica de mejorar la educación, y me encanta la prosa en que termina el libro llegando a esa conclusión.

Así mismo estoy de acuerdo en que la solución más práctica son una serie de reformas como lo plantea en el epílogo, pero es irónico como las desliga de un pensamiento de izquierda.

El hablar de moderados y criticar a la polarización me recordó mucho el panorama político, donde el "centro" se radicaliza al igual que los extremos que tanto crítica.

Aprendí mucho hasta de psicología y de historia, y cambie mi forma de ver las cosas, me quedo con la idea de entender al enemigo antes de odiarlo, pero no con la idea que Colombia necesite un gobierno de los moderados; el ser neutral en una situación de injusticia es estar del lado del opresor.

[Katherine · Rating 4 out of 5]

4.5

Que buen libro para comenzar el año. Entender las emociones (algo que no es ajeno a casi nadie) dentro de la sociedad, la política, la cultura y los conflictos que se viven en Colombia y en otros países. Es un libro para leer con paciencia y que nos deja mucho que reflexionar acerca del futuro de nuestras sociedades, que nos hace dudar cuál sería nuestra posición frente a muchas circunstancias y que revuelca internamente las opiniones que tenemos (entendiendo que nadie es dueño de la verdad absoluta).


Me quedo con este fragmento:
“Los enfermos, decía, son iguales en todos los países, sienten los mismos dolores y mueren por las mismas causas y eso es un testimonio inexorable destino común que corremos los habitantes del planeta. ‘No todo está perdido mientras haya hombres y mujeres que sigan trabajando por la humanidad entera y no solo por su país, su secta, su religión o su partido’. Volver a lo básico, a la vida; eso nos permite recuperar la sociabilidad y además, ser felices. ‘Vivir, simplemente vivir, es en sí mismo la verdadera felicidad’, dijo”. (P. 235)

[Luisa Cajamarca]

Bueno, la verdad tenía grandes expectativas con este libro, y lo acabé justamente porque tenía la esperanza de que algo me sorprendiera al final, pero no.

El libro intenta abarcar demasiados temas y sí, el autor es consciente de ello, pero aún así se queda corto en sustentar su idea de las emociones tristes vs las emociones plácidas.

El apartado que incluye ejemplos de psicología experimental me pareció el mejor logrado para explicar la naturaleza humana, nuestros sesgos, etc. Pero el resto del libro se repite en la misma idea de la importancia de la mesura y la tolerancia a la diferencia.

Me hubiera gustado tener más claridad sobre la definición de las Emociones tristes ya que hacen parte del título del libro, y que explicara por qué la tristeza no es necesariamente una Emoción triste... En fin...

Aunque el autor plantea preguntas interesantes me quedaron muchos vacíos, mucha repetición de momentos históricos que son interesantes pero no aportan claridad.

Lo que más rescato del texto es la Bibliografía que pone al final.

Mayo, 2023

[erikacontadoradecuentos · Rating 5 out of 5]

Tenía una meta terminarlo hoy día de la "independencia de Colombia" sí, no estamos más bajo el yugo de los españoles, pero seguimos esclavos de los corruptos, prisioneros en una guerras y asesinatos sin cuartel, que nos llevo a poner la esperanza en un nuevo presidente que cambió el discurso y en un congreso que busca algo mejor.

Este libro me regala explicaciones de qué es Colombia, como país y sociedad.

Nos da un paseo por la historia, nos explica como la religión y la política han tenido ese vínculo simbiotico para manejarlo a su amaño, pero estas explicaciones se hacen de la mano de varios filósofos y escritores del mundo.

Confirmo, Colombia es un país de emociones tristes, con unos grandes brochazos en los últimos años de esperanza y ganas de cambio.

Es un libro lleno de mensajes para las nuevas generaciones y en mi concepto un libro que se debería leer uno que otro político de este país.

[Jerson Cuellar · Rating 4 out of 5]

Un libro que intenta, desde la filosofía, la ética y la política, explicar por qué en Colombia somos como somos: nuestros conflictos únicos, repetitivos y pasionales que empañan cada momento de nuestra historia. El autor se basa en postulados de Spinoza sobre las emociones tristes que degradan al ser humano, esto para explicar cómo desde la época de la conquista y hasta nuestros días, seguimos siendo en esencia los mismos: seres llenos de odio, venganza, furia, que buscamos aniquilar a nuestros conciudadanos antes de escucharlos.

Tiene algunos pasajes donde se sale del contexto del libro y habla de cosas que no tienen mucha relación, o pretenciosas, perdiéndose el foco. A veces también cae en lugares comunes.

Es un ensayo ameno de leer.

[María Clara Ceballos · Rating 5 out of 5]

“Tal vez deberíamos aprender más sobre las complejidades de la mente; sobre los límites de la racionalidad y su inexorable tránsito por las aguas corrientosas de nuestras emociones; sobre las trampas del egoísmo, las mercedes de la colaboración y los engaños del abogado interno que nos defiende; sobre las limitaciones de la razón y las posibilidades de la voluntad; sobre los laberintos de la verdad y los beneficios de la
duda; sobre el valor de la resiliencia; la importancia de los buenos encuentros; los goces del saber; las bondades de la moderación, el placer de los gustos simples y de los amores cercanos”.