El elusivo Elías Aslanian, la mente detrás de Sifrizuela, nos sumerge en el velado mundo de una tribu urbana afluente, que ha sido considerablemente influenciada por la extensiva sociedad de consumo americanizada que el petróleo ha ocasionado en Venezuela y por el proceso de la modernidad, para mostrarnos a la sifrinidad, su historia y peculiaridades que no son más que una mirada pop y social a la historia reciente del país. Un paseo dinámico por un mundo de mandíbulas dislocadas y zarcillitos de perla.
Empecé a leer este libro casi forzada porque una persona, sin yo pedírselo, me lo prestó pensando que me interesaba leerlo (no sean así). So I had to read it fast porque a parte se lo tenía que devolver en una semana y, la verdad, es que lo leí en un día. Creo que me sorprendió (in a good way) porque me esperaba más una apología a la sifrinidad y un recuento de la nostalgia de los sifrinos con su historia, pero me sorprendió que leyéndolo todo era mucho más académico y objetivo y, a pesar de que si tenía su toque pequeño de nostalgia y de comedia, se sentía más como leer una tesis o un artículo de investigación, porque al final eso es lo que es: un estudio historico de las élites venezolanas y, más específicamente, del sifrino. También me gustó que no solo se enfocaba en los sifrinos y su burbuja, sino también los comparaba pues con la clase media-baja y clase baja de la Venezuela evidentemente estratificada, y con esto se le sumaba un gran aporte de consciencia social (sin necesidad de denigrar o caer en prejuicios) al estudio y, de hecho, el libro termina invitando a los sifrinos (lol) —que seguro son la mayoría de las personas que leerán este libro— a tomar consciencia de su privilegio y dejar a un lado los prejuicios y las limitaciones sociales. Algo que sí le criticaría el libro es que busca abarcar demasiados momentos históricos y tratar demasiados temas en muy poco espacio (a penas 140 páginas), por lo que a veces el estudio se siente un poco superficial, pero creo que lo bueno se esto es que da apertura para que este tema sea tratado en otras perspectivas y estilos por otras personas interesadas en este fenómeno cultural y social. Definitivamente fue una lectura interesante, con la que quizá no conecté demasiado, pero que me hizo enterarme de cosas que ignoraba y que le veo el potencial de hacer que muchos venezolanos que quizá si conecten un poco más logren sensibilizarse ante la sociedad.
A los venezolanos nostálgicos nos encanta leer un libro que ilustre con referencias históricas impecables el fenómeno de cómo Caracas siempre parece que ha cambiado tanto, pero a la vez no ha cambiado nada.
Elias enlaza el auge y la caída de la identidad cultural sifrina con hechos políticos, económicos y culturales, con la prosperidad, la crisis, la incertidumbre y los contrastes sociales. Es un retrato corto y fácil de leer sobre una ciudad donde siempre coexisten la miseria y la idea distorsionada y superficial de modernidad que siempre ha existido en Venezuela.
Para meternos el dedo en la llaga, seguir manteniendo el cariño y nunca perder la esperanza... un must read para los llorones de todo tipo (resentidos o nostálgicos).
Un libro que nos pasea desde los tiempos remotos de una Venezuela que muchos no conocimos a través de la mirada de una tribu urbana de la que mucho se habla pero poco se conoce. Una declaración de que en el fondo todos quisimos ser Laura
Me gustó mucho, sobre todo porque cuenta muy entretenidamente una parte importante de la historia de Caracas y cómo se configuró su sociedad. Todo lo que llegue para llenar los vacíos que expliquen quiénes somos y por qué somos así, merece una lectura.
Absolutely fantastic! Extremely nostalgic and well written, definitely learned a lot and opened conversations with my parents about sifrinismo when they were younger. A must read.
Es un tratado sociológico muy interesante y entretenido. En Venezuela pasan tantas cosas que olvidamos, leerlas y recordar es un ejercicio muy interesante. Desde el origen de los sifrinos, su evolución y actualidad, este libro cubre todo el espectro de lo que somos los venezolanos. Me gustó mucho y me dejó muchas referencias a otras cosas que leer.
Un retrato bonito, idealista y muy bien investigado de la sifrinad. Se queda un poco corto en sus argumentos. A veces chocan los pasajes nostálgicos, con prosa más literaria, con las argumentaciones académicas; sin embargo la lectura nunca deja de ser fluida y provocadoramente evocativa. Me hubiera gustado que se explayara más en la última parte, donde especula sobre el futuro de la tribu urbana. Espero que sirva como punto de partida espiritual para muchas más exploraciones de la sifrinidad, desde otras perspectivas y con otros estilos.