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Mientras pudimos
Eve Friedman es una dramaturga de ochenta y tres años que vive sola en un caótico apartamento situado en el corazón de Manhattan. Los muslitos de pollo en oferta, los recuerdos de infancia que la asaltan en la piscina y las conversaciones nocturnas con el portero de su edificio son suficientes para que el día a día le siga resultando soportable. No obstante, cuando su camino se cruza por casualidad con el de Jorge, un joven extranjero que se ha mudado a Nueva York para triunfar como guionista, el mundo de ella se tambalea inesperadamente. A lo largo de la estrecha relación que entablan, la anciana tendrá que enfrentarse a una soledad diferente de la que había conocido hasta el momento, y a la pérdida paulatina pero inexorable de su don más preciado: las palabras.
Una novela íntima y tierna que abarca sin tapujos y con una escritura limpia y madura temas complejos como la amistad intergeneracional, la senilidad y la muerte.
Una novela íntima y tierna que abarca sin tapujos y con una escritura limpia y madura temas complejos como la amistad intergeneracional, la senilidad y la muerte.
203 pages, Paperback
Published December 2, 2020
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Community Reviews
Displaying 1 - 14 of 14 reviews
February 6, 2025
qué miedo da envejecer....
January 19, 2021
conseguir crear un personaje literario de esos que llegan despacito, sin muchos aspavientos y que poco a poco comienza a germinar y crecer y termina siendo la flor más bonita del jardín es algo que #pabloherrandeviu ha conseguido con esta novela donde Eve Friedman campa a sus anchas, sin saberse observada por el lector que, atento y, sin saber como, también está en Manhattan al lado de ella sosteniendola de igual modo que una madre vela por la seguridad de su hijo.
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Querida Eve, ¿que voy a hacer contigo? Te marchas y ni una nota me dejas. Ya lo sé, Deborah tiene la culpa, bien sabías tu que no era de fiar. Espero que Jorge no se quede de brazos cruzados. Puede que le cueste un poco pero, ya sabes, la juventud es así, que olvida mucho antes que esa enfermedad que se te ha instalado como huésped permanente. ¿ crees que es posible olvidarlo todo Eve? yo tampoco lo sé, pero ojalá, siempre quede, al menos, un recuerdo al que asirse o una canción o un guión... qué se yo Eve, lo que sea. Siempre dicen que lo mejor esta por llegar.... Ojalá aún quede lo mejor Eve, ojalá. Las sorpresas, las buenas, siempre acechan a la vuelta de la esquina. te cuento un secreto Eve, ¿has oído hablar del karma? pues es infalible. díselo a Deborah de mi parte. Feliz Navidad Eve, donde quiera que estés.
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#pabloherrandeviu ha escrito una novela que se va abriendo como las campanillas con el fresco de la tarde y se mantiene indemne cuando el sol está en lo más alto. Dos personajes, Eve y Jorge, que podrían ser como el agua y el aceite, congenian a la perfección gracias a la pasión de ambos: el teatro. Pero esto sería mucho más sencillo si Eve no fuese una anciana de avanzada edad y Jorge apenas un joven recién llegado a Nueva York. Pero la vida de Eve es acuciante y absorbente y aunque ella vive sola todos sus fantasmas la acompañan a diario. La ausencia de su hermano y el miedo a la pérdida de memoria la llevan a refugiarse en Jorge donde encuentra ese cobijo necesario para que la vida mantenga su sentido.
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Querida Eve, ¿que voy a hacer contigo? Te marchas y ni una nota me dejas. Ya lo sé, Deborah tiene la culpa, bien sabías tu que no era de fiar. Espero que Jorge no se quede de brazos cruzados. Puede que le cueste un poco pero, ya sabes, la juventud es así, que olvida mucho antes que esa enfermedad que se te ha instalado como huésped permanente. ¿ crees que es posible olvidarlo todo Eve? yo tampoco lo sé, pero ojalá, siempre quede, al menos, un recuerdo al que asirse o una canción o un guión... qué se yo Eve, lo que sea. Siempre dicen que lo mejor esta por llegar.... Ojalá aún quede lo mejor Eve, ojalá. Las sorpresas, las buenas, siempre acechan a la vuelta de la esquina. te cuento un secreto Eve, ¿has oído hablar del karma? pues es infalible. díselo a Deborah de mi parte. Feliz Navidad Eve, donde quiera que estés.
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#pabloherrandeviu ha escrito una novela que se va abriendo como las campanillas con el fresco de la tarde y se mantiene indemne cuando el sol está en lo más alto. Dos personajes, Eve y Jorge, que podrían ser como el agua y el aceite, congenian a la perfección gracias a la pasión de ambos: el teatro. Pero esto sería mucho más sencillo si Eve no fuese una anciana de avanzada edad y Jorge apenas un joven recién llegado a Nueva York. Pero la vida de Eve es acuciante y absorbente y aunque ella vive sola todos sus fantasmas la acompañan a diario. La ausencia de su hermano y el miedo a la pérdida de memoria la llevan a refugiarse en Jorge donde encuentra ese cobijo necesario para que la vida mantenga su sentido.
January 8, 2025
entrañable. me ha llenado esto de descubrir a eve. tan bonito leer qué es la vida para ella. un abrazo fuerte fuerte fuerte, que cruce el oceáno y traspase paredes, supermercados, cines, abrigos de paño, guiones, amistades y carritos de la compra.
yo tampoco sabría vivir si un día me despojasen de palabras.
yo tampoco sabría vivir si un día me despojasen de palabras.
October 13, 2025
Historia real sobre Pablo, un joven español viviendo en Nueva York y Eve, una dramaturga de 83 años. Les unen muchas cosas, entre ellas el amor por la escritura y la soledad. Una relación preciosa ❤️
December 20, 2025
"Tú y yo nos vamos a reír mucho cuando todo esto haya pasado, Jessie. Te prometo que, tarde o temprano, se nos concederá la oportunidad de mirar atrás y tomarnos a broma este último trance que nos está exprimiendo. Como me has dicho siempre, no hay alivio más noble que la risa. Merecemos reírnos de nuestra peor versión".
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Evelyn, una mujer octogenaria que vive en su departamento en Nueva York está acostumbrada a esa soledad: saludos con el portero, palabras cruzadas con los cajeros en la tienda. Pero el que esté acostumbrada ni significa que le guste, pues es en la noche cuando esa angustia, esa ansiedad la ataca.
Su vida cambia cuando conoce a Jorge, un chico español de veintitantos años que sueña con escribir un guión, y al encontrarse con ella en un parque entablan amistad para trabajar juntos en ello, ya que ella fue dramaturga. Y es con este chico, con estas visitas, que Evelyn vuelve a tener una ilusion...
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¿Da miedo envejecer? Yo pienso que si no leemos historias así, el terror no se nos pasa por la cabeza, creemos que siempre estaremos jóvenes y sanos. Peor aún, creemos que estaremos acompañados.
Aquí el autor entre el humor y el dolor nos narra una historia donde vemos lo duro que es renunciar a la vida misma por la edad, lo que es la soledad, sobre todo en la gente mayor, que hoy en día es vista como una carga. Y duele. Duele porque sabemos que no se queda en la ficción, sucede en la realidad.
Una acaba este libro y te deja un dolor tremendo, como si esa persona que conocimos a través de las letras estuviera de carne y hueso ante nosotros, para de esa manera sentir más su impotencia hasta el final, pero, ¿podemos culpa a Deborah(sobrina)?
.
Pero Pablo no nos muestra a la dulce abuela que tenemos estereotipada, no. En Eve tenemos las imprudencias de las personas mayores, las palabras que dicen sin pensar, y como, son difíciles de tratar también. Es lo que la hace totalmente humana.
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Leer este libro fue todo un combo de emociones, porque todo lo que leí lo vivo día a día con mi abuela, que le gana a Eve en algunos años.
Mi abuela... con su lucha por su independencia cuando ya no puede estar sola, cuando tienes que cuidarla de "pequeños accidentes", cuando dice palabras hirientes, cuando te presta atención más de la que te imaginas, cuando ves que su mente empieza a fallar, cuando comprendes lo que es lidiar con la vejez y tener que perderte a ti misma...
Si... puede que no ha todos les pegue por igual este libro, pero a mí, que lo vivo en tiempo real. Ha sido duro, ha sido un espejo, ha sido un abrazo reconfortante, ha sido un cuestionamiento a mi misma y la manera en la que trato no solo a mi abuela, sino a los adultos mayores de mi alrededor
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"Estamos solos. No tenemos a nadie. Ni siquiera a nosotros mismos".
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Evelyn, una mujer octogenaria que vive en su departamento en Nueva York está acostumbrada a esa soledad: saludos con el portero, palabras cruzadas con los cajeros en la tienda. Pero el que esté acostumbrada ni significa que le guste, pues es en la noche cuando esa angustia, esa ansiedad la ataca.
Su vida cambia cuando conoce a Jorge, un chico español de veintitantos años que sueña con escribir un guión, y al encontrarse con ella en un parque entablan amistad para trabajar juntos en ello, ya que ella fue dramaturga. Y es con este chico, con estas visitas, que Evelyn vuelve a tener una ilusion...
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¿Da miedo envejecer? Yo pienso que si no leemos historias así, el terror no se nos pasa por la cabeza, creemos que siempre estaremos jóvenes y sanos. Peor aún, creemos que estaremos acompañados.
Aquí el autor entre el humor y el dolor nos narra una historia donde vemos lo duro que es renunciar a la vida misma por la edad, lo que es la soledad, sobre todo en la gente mayor, que hoy en día es vista como una carga. Y duele. Duele porque sabemos que no se queda en la ficción, sucede en la realidad.
Una acaba este libro y te deja un dolor tremendo, como si esa persona que conocimos a través de las letras estuviera de carne y hueso ante nosotros, para de esa manera sentir más su impotencia hasta el final, pero, ¿podemos culpa a Deborah(sobrina)?
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Pero Pablo no nos muestra a la dulce abuela que tenemos estereotipada, no. En Eve tenemos las imprudencias de las personas mayores, las palabras que dicen sin pensar, y como, son difíciles de tratar también. Es lo que la hace totalmente humana.
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Leer este libro fue todo un combo de emociones, porque todo lo que leí lo vivo día a día con mi abuela, que le gana a Eve en algunos años.
Mi abuela... con su lucha por su independencia cuando ya no puede estar sola, cuando tienes que cuidarla de "pequeños accidentes", cuando dice palabras hirientes, cuando te presta atención más de la que te imaginas, cuando ves que su mente empieza a fallar, cuando comprendes lo que es lidiar con la vejez y tener que perderte a ti misma...
Si... puede que no ha todos les pegue por igual este libro, pero a mí, que lo vivo en tiempo real. Ha sido duro, ha sido un espejo, ha sido un abrazo reconfortante, ha sido un cuestionamiento a mi misma y la manera en la que trato no solo a mi abuela, sino a los adultos mayores de mi alrededor
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"Estamos solos. No tenemos a nadie. Ni siquiera a nosotros mismos".
December 15, 2021
Es una historia de amistad intergeneracional entrañable. Por un lado, Eve, una anciana neoyorkina que fue una reconocida guionista en el pasado, y por otro lado, Jorge, un joven veinteañero emigrante español que sueña con convertirse él también en guionista algún día.
Los primeros encuentros entre dos personas de mundos tan diferentes van dando paso lentamente a una fuerte amistad, sobre todo para Eve quien poco a poco va notando más la necesidad de abandonar esa soledad en la que vivía en su apartamento de Manhattan y sentir la cercanía de Jorge, de quien acaba siendo sentimentalmente dependiente.
La novela no tiene grandes pretensiones, es tan solo una simple historia entre el vínculo que establecen dos personas, sin grandes alaracas, su mérito radica en su sencillez. Lo que más me gusta es la naturalidad con la que enfoca que dos personas pueden ser amigas independientemente de la nacionalidad, de su género y sobre todo de la edad, de hecho, con esta última parte es con la que más he disfrutado, amistad sin edad.
Sin embargo, tengo la sensación de que a la trama le falta algo, me he quedado con ganas de más, como si la historia no estuviera completamente cerrada; quizás otro final, quizás un poco más de extensión de la historia en el tiempo, no se exactamente el qué, pero es como si me hubiera quedado a medias.
En cualquier caso, muy agradable de leer y entretenida.
Los primeros encuentros entre dos personas de mundos tan diferentes van dando paso lentamente a una fuerte amistad, sobre todo para Eve quien poco a poco va notando más la necesidad de abandonar esa soledad en la que vivía en su apartamento de Manhattan y sentir la cercanía de Jorge, de quien acaba siendo sentimentalmente dependiente.
La novela no tiene grandes pretensiones, es tan solo una simple historia entre el vínculo que establecen dos personas, sin grandes alaracas, su mérito radica en su sencillez. Lo que más me gusta es la naturalidad con la que enfoca que dos personas pueden ser amigas independientemente de la nacionalidad, de su género y sobre todo de la edad, de hecho, con esta última parte es con la que más he disfrutado, amistad sin edad.
Sin embargo, tengo la sensación de que a la trama le falta algo, me he quedado con ganas de más, como si la historia no estuviera completamente cerrada; quizás otro final, quizás un poco más de extensión de la historia en el tiempo, no se exactamente el qué, pero es como si me hubiera quedado a medias.
En cualquier caso, muy agradable de leer y entretenida.
October 25, 2022
Esta novela, que cuenta la tierna historia de la relación que se crea entre un chico joven y una mujer de ochenta y tres años, te consigue trasladar al centro de Manhattan, y lo que es más importante, te divierte y emociona según avanza la trama.
Todo lo que sucede lo vemos a través de los ojos de la protagonista. Asistimos como espectadores privilegiados a su progresivo deterioro mental, y también nos alegramos de la luz que aporta a su vida la llegada de ese chico al que le une el amor por la literatura.
Me ha encantado, se trata de una lectura muy recomendable.
Todo lo que sucede lo vemos a través de los ojos de la protagonista. Asistimos como espectadores privilegiados a su progresivo deterioro mental, y también nos alegramos de la luz que aporta a su vida la llegada de ese chico al que le une el amor por la literatura.
Me ha encantado, se trata de una lectura muy recomendable.
January 22, 2025
¿Alguna vez has sentido que un libro parece estar escrito para ti? Eso fue exactamente lo que me pasó con este. Es un relato sobre la vejez, la soledad y las decisiones de vida.
Seguimos a Eve, de 83 años, y a Jorge, que está en sus 20s. Su amor por el arte los une en una amistad inesperada con un propósito común: escribir un guion. Cada lunes se reúnen. Él le devuelve la esperanza, un motivo para seguir adelante y ver la vida con otros ojos. Ella le ofrece su amistad, sus consejos y el peso de su experiencia. Es una historia sobre el paso del tiempo, sobre cómo los años no perdonan ni dejan olvidar.
Cuando pensamos en alguien de 83 años, solemos imaginar a una abuelita dulce que hornea galletas. Eve es todo lo contrario. Pasó su vida cuidando a sus padres, luego se independizó y decidió que no necesitaba a nadie para compartir su vida. Quería su espacio, y así lo ha llevado hasta el final. Con sus limitaciones, incertidumbres y miedos, sigue viviendo sola en su apartamento en Manhattan y así quiere que sea hasta el final de los tiempos.
Este libro invita a reflexionar. A detenernos un momento y preguntarnos: ¿estamos siendo fieles a nosotros mismos? Eve es un personaje que me marcó profundamente, alguien a quien fácilmente puedo tomar como referente. Me imagino preguntándome: ¿qué haría Eve en esta situación? Porque está tan bien construida que es fácil visualizarla en otros escenarios fuera del libro: en sus años dorados en Broadway, en la piscina donde siente que su cuerpo le pertenece.
También nos hace mirar a los jóvenes y a la sociedad en general. Rompe con la creencia —que al menos yo tenía— de que una persona mayor es frágil, dependiente o incapaz. A veces solo necesitan cariño, un poco de ayuda en algunas cosas, pero nada más. Lo importante es la conversación, el sentir que siguen formando parte del mundo, porque lo son.
Hace unos años me habría costado imaginar a alguien de 80 o 90 años viviendo solo por elección. Pero últimamente he conocido casos así, y me parece increíble. Yo he vivido con mis abuelas toda mi vida, y este libro me hizo abrazarlas aún más fuerte. También me hizo preguntarme si, en mi afán de devolverles todo lo que me han dado, no les estoy robando su independencia. Si, sin darme cuenta, les estoy impidiendo sentirse válidas, ser parte activa de la vida, aunque a veces olviden cosas o quieran saltarse la prohibición de comer pastel de chocolate.
No tengo dudas: este es mi mejor libro del mes. Y me atrevo a decir que se colará fácilmente en mis mejores lecturas del año.
Seguimos a Eve, de 83 años, y a Jorge, que está en sus 20s. Su amor por el arte los une en una amistad inesperada con un propósito común: escribir un guion. Cada lunes se reúnen. Él le devuelve la esperanza, un motivo para seguir adelante y ver la vida con otros ojos. Ella le ofrece su amistad, sus consejos y el peso de su experiencia. Es una historia sobre el paso del tiempo, sobre cómo los años no perdonan ni dejan olvidar.
Cuando pensamos en alguien de 83 años, solemos imaginar a una abuelita dulce que hornea galletas. Eve es todo lo contrario. Pasó su vida cuidando a sus padres, luego se independizó y decidió que no necesitaba a nadie para compartir su vida. Quería su espacio, y así lo ha llevado hasta el final. Con sus limitaciones, incertidumbres y miedos, sigue viviendo sola en su apartamento en Manhattan y así quiere que sea hasta el final de los tiempos.
Este libro invita a reflexionar. A detenernos un momento y preguntarnos: ¿estamos siendo fieles a nosotros mismos? Eve es un personaje que me marcó profundamente, alguien a quien fácilmente puedo tomar como referente. Me imagino preguntándome: ¿qué haría Eve en esta situación? Porque está tan bien construida que es fácil visualizarla en otros escenarios fuera del libro: en sus años dorados en Broadway, en la piscina donde siente que su cuerpo le pertenece.
También nos hace mirar a los jóvenes y a la sociedad en general. Rompe con la creencia —que al menos yo tenía— de que una persona mayor es frágil, dependiente o incapaz. A veces solo necesitan cariño, un poco de ayuda en algunas cosas, pero nada más. Lo importante es la conversación, el sentir que siguen formando parte del mundo, porque lo son.
Hace unos años me habría costado imaginar a alguien de 80 o 90 años viviendo solo por elección. Pero últimamente he conocido casos así, y me parece increíble. Yo he vivido con mis abuelas toda mi vida, y este libro me hizo abrazarlas aún más fuerte. También me hizo preguntarme si, en mi afán de devolverles todo lo que me han dado, no les estoy robando su independencia. Si, sin darme cuenta, les estoy impidiendo sentirse válidas, ser parte activa de la vida, aunque a veces olviden cosas o quieran saltarse la prohibición de comer pastel de chocolate.
No tengo dudas: este es mi mejor libro del mes. Y me atrevo a decir que se colará fácilmente en mis mejores lecturas del año.
January 23, 2023
Cuando estuve en la presentación del libro (nunca había ido a ninguna presentación de ningún libro y no entendía que se hacía allí), me sorprendió que se comentara que la novela no hubiera tenido una gran acogida por parte de las editoriales porque el personaje principal era una acaparadora anciana de 80 años. ¿En serio importa la edad del personaje sino lo que nos trasmite o lo que nos provoca? Sinceramente Eve es un personaje peculiar, acaparador y al mismo tiempo desesperante. Os recomiendo que os sumerjáis en esta singular historia de “amor”.
August 26, 2022
Simplemente preciosa.
January 14, 2025
Este libro me ha destrozado.
This entire review has been hidden because of spoilers.
November 11, 2025
Es mi libro preferido para regalar. Lo habré comprado decena de veces. Me encantó!
June 14, 2022
Para los que más que una buena trama, buscan personajes que les atrapen. Para los amantes de las reflexiones profundas (relaciones, soledad, vida y final de ésta…) hiladas a través de la cotidianidad. Para los que quieren divertirse sin dejar de lado la seriedad y también para aquellos que saben todo el aprendizaje que puede guardar una amistad intergeneracional. Para los buscadores de historias amenas, para los que buscan mezclas, pues a veces no sabes si es lectura, teatro o guión cinematográfico.
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