Este abecedario juega con las letras y las acciones; se aproxima a los verbos, los merodea, degusta, experimenta. Es, también, un ensayo filosófico para llevar en el bolsillo y tener siempre al alcance de la mano. Vir Cano borronea sus apuntes en desacato ante lo dado, como quien se arriesga a la apuesta de hablar, de decir, de dejarse tomar por las palabras, allí donde ellas son refugio y trinchera, terreno y delirio, placer y peligro.
Un experimento enunciativo que invita a trazar tangentes sobre los diccionarios vencidos de la academia. Un borrador que traduce las palabras y las introduce en la cotidianidad, otorgándole la potencia de la transformación absoluta, fantástica, quizá utópica pero siempre colectiva.
Un borrador para un abecedario del desacato es justamente eso: un borrador, donde se soslayan ideas sobre algunas palabras y te invita a que continues con el mismo. Me parece de lo mejor, lo más lindo y original que leí en el último tiempo.
me gusta este libro como una compilación de cosas que se sienten. las definiciones están bien bonitas y apapachan pero cuestionan. y no se, me gusta este ejercicio de redefinir las palabras, que no signifique significado literario, que sea una definición por vivencias y corazonadas. temblar y recordar creo que son mi top. tkm vir cano
Borrador para un abecedario del desacato es justamente eso: un borrador, un texto susceptible de ser modificado. Pero también es un intento de abrir nuevos significados a palabras dichas muchas veces, para borrar los límites que desde cierto poder hegemónico marcan los pensamientos y sentires que un vocablo dispara. A cada letra, una palabra. A cada palabra, una novedosa y no convencional definición.
Un libro que no fue pensado como libro: surgió en plena pandemia como una manera de sobrellevar la suspensión de la vida cotidiana. Vir hacía una entrada por letra, luego con su compañera grababan un video para Instagram de no más de 60 segundos. El proyecto de autopreservación (que no es lo mismo que la autoconservación) dió lugar a un proyecto editorial.
El libro se define como "un ensayo filosófico para llevar en el bolsillo y para tener siempre a mano".
Elegí para marcar tres entradas: La H: Huir. La N: Narrar La Y: Yacer. Tres (no) definiciones que parecieran hablarme directamente.
Subrayé en cada palabra del abecedario varias frases que me invitaron precisamente a re-pensar. ¿Cuántas veces nos damos el tiempo de ver el impacto de ciertas palabras en lo que hacemos/sentimos/pensamos? Me parece que este pequeño gran libro invita precisamente a ello, a expandir lo que creemos saber sobre algunas cosas, a expandir el abanico de acciones que podemos vincular a alguna palabra. Una forma de transformarse a sí mismo, si acaso así se desea. Me parece que este será un borrador al que recurriré más de alguna vez, y quizás terminé por subrayarlo completamente.
me pareció muy interesante y tiene lindas reflexiones. pero sí hay cuestiones respecto al lenguaje inclusivo que no están del todo prolijos, quiero creer que un poco de ahí viene el concepto de borrador.
una parte que me gustó mucho: "vivir: a veces un infierno, a veces un remanso, en ocasiones un abismo, en otras un letargo; a como dé lugar, el embrollo en el que estamos inmersos, el desafío al que no podemos renunciar."
Me encanta como laboratorio, como espacio para diseccionar el lenguaje, tocarle las vísceras, retorcerle la tripa. Cada palabra lleva a una reflexión, en algunos casos se me vuelve un poco genética pero Vir siempre logra una red en expansión de preguntas y, lo más importante; una sed incontrolable de más textos, de mas letras
Maravilla de lectura. De las que lees en un ratito y sabes que vas a volver millones de veces. Vir nos invita a transformar el lenguaje, a desafiar las estructuras y repensar las definiciones, entendiendo las mismas como construcciones colectivas en constante metamorfosis, partiendo desde la resistencia y también desde el amor.
Me encantó, me pareció un ejercicio escritural muy interesante. Me quedé con muchas ideas y la selección de palabras me pareció precisa. De mis favoritas: conmover, incomodar, lacerar, narrar.