¿Cómo pudo desaparecer de un almacén del Museo Reina Sofía una enorme escultura de Richard Serra de treinta y ocho toneladas?
La historia que narra esta novela es del todo inverosímil... y sin embargo sucedió. Es increíble, pero es verdad: un museo de primer nivel internacional −el Reina Sofía− encarga para su inauguración en 1986 una obra a una estrella de la escultura, el norteamericano Richard Serra. El escultor entrega una pieza creada ad hoc para la sala en la que iba a exhibirse. La escultura en cuestión −Equal-Parallel/Guernica-Bengasi− consta de cuatro bloques de acero independientes de grandes dimensiones. Inmediatamente se eleva la pieza a obra maestra del minimalismo. Finalizada la muestra, el museo decide guardarla, y en 1990, por falta de espacio, la confía a una empresa de almacenaje de arte, que la traslada a su nave en Arganda del Rey. Cuando quince años después el Reina Sofía quiere recuperarla, resulta que la escultura −¡de treinta y ocho toneladas!− se ha volatilizado. Nadie sabe cómo ha desaparecido, ni en qué momento, ni a manos de quién. Para entonces la empresa que la custodiaba ya ni siquiera existe. Cero pistas sobre su paradero.
La misteriosa desaparición queda elevada también a categoría de obra maestra. Como el escándalo adquiere resonancia mundial, Serra acepta replicar la pieza y darle rango de original, y el Reina Sofía, sumarla a su exposición permanente.
Entre la novela de no ficción y la crónica novelada, entre el disparate y lo alucinógeno, Obra maestra reconstruye a ritmo de thriller trepidante un caso que lleva a hacerse algunas preguntas perturbadoras: ¿cómo es posible que algo así sucediera? ¿Cómo se convierte en original una copia? ¿Qué es arte en el arte contemporáneo? ¿Cuál fue el verdadero destino de la famosa, enorme y pesada escultura de acero convertida en aire? ¿Es posible que un día aparezca?
Para responder a estas y otras preguntas, las páginas de la novela acogen una sucesión de voces muy dispares: las de la fundadora del Reina Sofía, algunos de sus directores, los policías de la Brigada de Patrimonio que investigaron la desaparición, la jueza que instruyó el caso, personal del museo, ministros, el empresario que custodió la obra, galeristas americanos, el propio Richard Serra, su amigo −y antiguo ayudante− Philip Glass, marchantes de arte, críticos, artistas, concejales, coleccionistas, un coreógrafo que danzó alrededor de la escultura, ingenieros, periodistas, historiadores, vigilantes, políticos, una terrorista, un jubilado, un camionero, un chatarrero, un taxista, una agente de la Interpol, el propio autor del libro, en tratos con una editora para escribirlo, o César Aira, que propone una teoría tan loca como deliciosa sobre el verdadero destino de la escultura.
Juan Tallón Salgado, nacido en Vilardevós (Ourense) en 1975, es un periodista y escritor gallego.
Licenciado en Filosofía, trabaja en el campo del periodismo y la comunicación. Fue corresponsal del periódico La Región y después jefe de prensa de la Secretaría General de Emigración hasta 2008. Trabajó en la Cadena SER, en la revista Jot Down, y en El Progreso.
Participante en diferentes publicaciones colectivas, obtuvo con su primera novela el VI Premio Nicomedes Pastor Díaz.
En 2013 publica «El váter de Onetti» en castellano, al no encontrar editores que quisieran publicarlo en gallego, idioma en el que estaba escrito originalmente.
En 2018 publica su primera gran novela, «Salvaje Oeste», que ficciona el poder en la España del Siglo XXI.
En 2020 publica una nueva novela impregnada de su fino estilo literario, que titula «Rewind», a pesar de las dudas de sus editores con respecto al título.
Sus libros abundan en la metaliteratura y en la derrota.
Obra maestra de Juan Tallón ¡redoble de tambores! fue la segunda lectura del año. Advierto que como Juan y yo somos amigos a lo mejor mi crítica no os resulta convincente pero ese es un problema que tenéis vosotros, no yo. La nueva novela de Tallón acaba de salir, está en todas partes y os vais a hartar de verla. A muchos os encantó Rewind (los que no la hayáis leído, ya sabéis) y creo que os gustará Obra Maestra. No se parecen en nada ni tienen nada que ver.
Obra Maestra es una novela que parece, y que me temo que es algo que Juan se va a hartar a desmentir , una obra de no ficción. El talento de Juan está en a partir de un hecho real, la desaparición de una escultura de Richard Serra de más de treinta toneladas de peso y la reacción de incredulidad que esto provoca, construir un relato con más de ochenta voces reconstruyendo el pasado, la desaparición y el presente de la obra que no existe. Por las páginas de la novela aparecen funcionarios, policías, Richard Serra, ministros, directores de museos, empleados alemanes de fundiciones, poetas, jueces, pintores chiflados, escritoras intensas, editoras, críticos de arte, galeristas... todos con una voz diferente, un tono y una vida real que roza en algún momento a la escultura o su desaparición. Obra Maestra es a veces una crónica de sucesos, otras un relato policiaco, una biografía, un sainete costumbrista, una serie de policías, una clase de arte. Lees pasando las páginas con prisa, con rapidez, como buscando al asesino, la solución y al mismo tiempo disfrutando el hecho de ir saltando de personaje en personaje sin mirar atrás. ¿Quién es este? ¿Qué le pasa? ¿Qué tiene que ver con la escultura? ¿Será este el que dará la pista definitiva? ¿Este es el ladrón? ¿Pero como fueron tan tontos? Madre mía, este es idiota. Como no quiero que mi amistad con Juan y mi admiración por este increíble trabajo de creación de voces obnubile mi criterio, confesaré que algún capítulo, alguna voz me ha aburrido y alegremente la hubiera saltado si no fuera porque pensaba ¿y si aquí está la pista? Mi recomendación, por supuesto, es que corráis a leer Obra Maestra. Si pensáis encontrar algo como Rewind os llevareis un chasco pero si lo enfrentáis con la actitud de «a ver que ha hecho ahora Tallón» os gustará seguro.
Sorpresa muy agradable. No tiene nada que ver con Rewind, libro bastante mediocre del que salí decepcionado hace bien poco.
Por contra con aquel, aquí los personajes, unos reales, otros figurados, a pesar de ser muchos están muy bien construidos: no pretende hacer una biografía de cada uno de ellos, y con tres pinceladas resultan más creíbles; la historia es buena, muy típica española una absurdidad tan enorme como la que narra el libro, (novela o no novela, eso es lo de menos) es copyright nuestro sin duda.
Creo además que en muchas ocasiones, cuanto más ridícula y rebuscada es la historia, más creíble y adictiva resulta, en este caso tratándose de hechos reales resulta una narración fantástica; el ritmo de la historia es ágil y también muy apropiado. Por último la narración coral en primera persona, aportando muchos puntos de vista de la trama, y muy bien documentada, intercalando distintos períodos temporales, también de sobresaliente.
Un libro que narra la "desaparición" de una escultura de Serra desde múltiples puntos de vista, y que podía haber dado mucho más juego pero que queda lastrado por varios aspectos.
Para empezar el misterio policiaco y los "personajes" que hablan sobre él son muy aburridos: Jueces, vigilantes del Reina, policías, no aportan nada emocionante o interesante y se comen más de un tercio del libro describiendo aspectos sobre la Brigada del Patrimonio, los juzgados, etc.
La parte en la que hablan "personajes" relativos a la génesis del libro, y personajes "auxiliares" (transportistas, taxistas...) es algo más corta, tampoco aporta demasiado y, aunque es curiosa, peca de repetitiva y algo banal (por ejemplo, el último capítulo en el que el propio Tallón nos cuenta, a lo largo de varias páginas, algo que ya habíamos oído de otras bocas -su periplo por los juzgados)
Por todo ello la parte más interesante es en la que hablan los artistas y galeristas, los comisarios de exposición, etc.: en esta parte los protagonistas aportan muchos matices sobre el arte minimal, qué es el arte, como interpretar nuevas propuestas, qué es un museo...
El autor intercala estos tres aspectos a lolargo de la novela, y consigue que la narración sea fluida, pero me he pasado todo el libro deseando que volvieran a hablar de arte, en lugar de leer como se usa una grúa pluma, o como se funde metal en grandes hornos, o como se eleva una petición a un juzgado, o...
Por otro lado, otro de los grandes hándicaps del libro es que todos los personajes, absolutamente todos, hablan igual, que en el fondo, claro, es la voz del propio autor. Da igual un juez que un taxista, un periodista que un fundidor, todos hablan igual...
Bueno, todos no.Hay un capítulo en el que habla un personaje chatarrero gitano en el que hay un tufillo a tópico y a racismo que tira de espaldas, y todo su discurso está lleno de "furgonetas", "primos" y "se muera mi madre". Que digo yo que, si todos los personajes han sido capaces de usar la ironía y un lenguaje más o menos formal, quizá debería haber mantenido ese tono con este chatarrero, para no parecer un racista, más que nada...
En fin, que si te interesa el arte contemporáneo y sus mecanismos y no tienes mucha idea sobre ellos y te interesa leer algo ligerito e introductorio sobre el tema, si no te importa saber que más de un tercio del libro (el policiaco, soporífero) es relleno, y si tienes un viaje en AVE o en avión cerca y quieres pasar un ratillo agradable para quemar horas, no es mal libro.
Equal-Parallel: Guernica-Bengasi es una escultura del artista estadounidense Richard Serra, creada en 1986 expresamente para formar parte de la exposición ‘Referencias. Un encuentro artístico en el tiempo’ con la que se inauguró el museo Reina Sofía en Madrid.
La obra se compone de 4 grandes piezas de acero macizo, de dos dimensiones diferentes (dos cuadros, dos rectángulos), con un peso aproximado de 38 toneladas. De acuerdo con Serra, se trata de una obra de arte de experimentación espacial, que solo tiene sentido en relación con quien la observa, que debe moverse, para que todo cobre sentido.
Su nombre pone en relación dos ataques con un gran número de víctimas civiles como son el bombardeo de la legión Cóndor sobre Guernica (1937) y el ataque aéreo estadounidense contra Bengasi (1986).
Pero… bueno, ¿qué es esto: una reseña o una ficha de arte? ¡Prometo que tiene sentido! Y es que esta novela-investigación de Juan Tallón llamada ‘Obra maestra’ gira en torno a Equal-Parallel: Guernica-Bengasi o más bien, se centra en su sorprendente desaparición (verídica).
A finales de 2005, el Reina Sofía decide volver a exponer la escultura que llevaba desde los 90’s almacenada, fuera de la colección permanente del museo, después de haber pagado una millonada por ella. Pero… la obra no aparece. Tras más de una década sin que nadie la echara en falta, ¿cómo saber en qué momento ha desaparecido? ¿Cómo es posible robar (si es que ha sido el caso) algo de 38 toneladas sin que nadie se de cuenta? A principios de 2006, la noticia salió a la luz y con esto comienza un gran escrutinio y crítica a la institución y sus responsables. Tallón saca del olvido esta enorme negligencia e incompetencia digna de sacar los colores a muchos. ¿Te acuerdas de esta noticia?
En ‘Obra maestra’ Juan Tallón realiza una aproximación al suceso desde decenas de puntos de vista ficticios, pero utilizando nombres de personas reales: artistas, trabajadores del museo, puestos de responsabilidad en instituciones culturales, jueces, policías, investigadores, personal de seguridad, el propio Serra y muchos más para crear un amenísimo juego de ficción-realidad para hablar con todo lujo de detalles de un suceso que te mueve entre la estupefacción y el enfado. El autor demuestra la enorme investigación que llevó a cabo sobre este suceso que le obsesionó durante años al tiempo que hace visible al gran público como funcionan ciertos entramados de los organismos culturales en España y nos acerca también a numerosos debates actuales en torno al arte contemporáneo.
Una lectura que me tuvo atrapadísima y, sobre todo, muy interesada en todo lo que los mil y un personajes tenían que contarme, más allá de la ‘famosa’ escultura. Es cierto que a mí me encanta el arte y no sé qué tal será leer esta novela (que no es corta) si no es un tema que te apasione.
‘Obra maestra’ nos recuerda que la realidad, para bien o para mal, siempre supera la ficción
‘Obra maestra’ no es una novela al uso. Es la crónica de uno de los casos más inverosímiles sucedido en España en las últimas décadas: la desaparición de una escultura del famoso artista Richard Serra. La particularidad recae en que dicha obra pesaba treinta y ocho toneladas, pues el artista es conocido por hacer arte con grandes superficies de acero. Estuvo expuesta en el Museo Reina Sofía durante un breve periodo de tiempo, se almacenó, y años después cuando se quiso recuperar se había esfumado. ¿Cómo pudo pasar algo así? ¿A manos de quién?
Tallón mezcla imaginación y realidad, y estructura el libro en 73 testimonios de personas reales relacionadas con el caso para intentar arrojar luz y teorizar sobre lo sucedido. El trabajo de documentación y de síntesis es absolutamente brillante y hay lugar para reflexiones realmente interesantes sobre el mundo del arte. Está maravillosamente bien escrito y la narración es muy accesible. Mi gran pero es que siento que le hubiera beneficiado un recorte de páginas ya que en algunos pasajes cae en la repetición y puede hacerse cuesta arriba. Aún y así el ritmo no decae y de su lectura se extraen una gran variedad de conocimientos.
Si os interesa el tema os lo recomiendo mucho. Es un texto original y muy curioso para indagar en unos hechos rocambolescos que parece mentira que pudieran suceder.
El planteamiento y estructura seguidas por Tallón, que al comienzo juzgué de acierto y lo consideré como la clave del éxito del libro, se le termina volviendo en contra. Mi interés, y soy un loco del arte ─no tanto de Richard Serra─, por el texto va decreciendo, y los recursos que el autor utiliza se me hacen algo repetitivos.
Aplaudo el riesgo y, aunque me parezca que le sobran páginas, lo he pasado bien. Tallón es un gran narrador.
Tallon advierte que este libro es fruto de un acontecimiento que ocurrió hace tiempo y de la ficción . no es un ensayo ni tampoco una novela al uso. tampoco una reconstrucción fidedigna de los hechos. quizás sólo así, con la mezcla aleatoria de géneros, se consigue una #obramaestra. . paso por delante del museo Reina Sofía una media de cuatro veces al día. no tenía ni idea de que fue reconvertido como museo en 1986 ni tampoco de que exhibe una copia de un original perdido. nunca habría pensado que un museo pueda perder algo. que le roben puede valer, pero perder.... y más cuando lo que se ha perdido pesa treinta y ocho toneladas!. Richard Serra construyó en acero corten Equal/parallel - Guernica/Bengasi para ser expuesta en el museo Reina Sofía. Unos meses después el museo retira la obra y contrata los servicios de Macarrón SL para su custodia. La empresa de Jesús Macarrón quiebra y desaparece y la escultura de Serra se esfuma por arte de magia. que empiece a cundir el pánico. Con estas premisas arranca #obramaestra, la última novela de #juantallon que tras el esfuerzo monumental de conseguir la causa judicial 183/06 resuelve que no hay nada como el misterio. si un secreto busca ser revelado, el misterio pide más misterio. "sólo los aburridos preguntan el truco ' decía #miquiotero en #simón. sólo a estas alturas un aguafiestas preguntaría donde está la famosa escultura cuando << aquí hay una novela. ¿no te parece? >> . setenta y seis voces o setenta y seis testimonios crean ese espacio al que siempre atañe Serra para que sus obras tengan sentido. setenta y seis historias creando un espacio para que el lector las recorra de todas las formas y perspectivas posibles. así como Serra quiere que se vean, sientan y palpen sus obras << me interesa el hecho de que el espacio sea tan importante como el material. >> para así << involucrar al espectador en su obra. >>
Es una apreciación que parte del interés que me ha generado el libro. Quizá si hubiese sido un ensayo sobre aspectos relacionados con el arte..., pero no es novela ni es ensayo. Es un conjunto de testimonios alrededor del hecho de la desaparición de una escultura de 38 toneladas de. Ricard Serra, tipo entrevistas a muchas personas relacionadas con el suceso. Demasiadas entrevistas, misma voz en muchas, a las 100 páginas había perdido el interés y quedaban más de 250. Eso sí, está muy bien escrito, es original la estructura y hay mucha documentación detrás. Puedes aprender mucho sobre el mundillo del arte, pero...
Rewind puso el listón alto y las comparaciones eran inevitables. El recurso de usar +70 voces es cuanto menos original pero no ha llegado a convencerme.
Prometía en un principio, por ser un tema que resultaba interesante pero poco a poco se fue desinflando está expectativa...Me resultó muy repetitivo y aburrido. De hecho, estuve a punto de dejarlo en varias ocasiones. Una pena porque Tallón me gusta como escribe.
“(…) y en su lugar elaboró una escultura nueva a partir de dos monumentales lingotes de acero, uno de los cuales, de nueve toneladas, se sostenía en equilibrio sobre el inferior, de siete. La llamó ‘Bilbao’. Para encontrar los grandes lingotes de acero que necesitaba hizo un viaje en coche por Asturias. Carmen lo llevó por varios astilleros. Comían en sitios populares y dormían en hoteles baratos. Hasta que al fin Serra encontró lo que buscaba en Avilés. Eran dos grandes moles de hierro. Serra se quedó prendado, le contó a Carmen qué quería nacer con ellas y Carmen las compró”.
Se lee esta indagación de Tallón sobre la desaparición de una obra de gran formato de Serra de unos almacenes de las afueras de Madrid con el interés de una novela policiaca. Pero lo que más me gusta de su especulación es lo que va dejando caer no sólo sobre la evanescencia de una obra de enorme tamaño, sino también sobre la inconsistencia de casi todo, también de la empresa dedicada a su depósito y custodia. Ambos entes acaban siendo puras entelequias.
Cuando ayer y esta mañana veía los restos ruinosos de parte del cinturón industrial de Avilés, donde Serra encontró el material para hacer ‘Bilbao’, pensaba en el centro cultural Neimeyer, plantado desde hace unos años como un ovni con las formas puras y limpias del futuro en medio de factorías oxidadas, chimeneas y almacenes en ruinas del pasado, y me parecía en el fondo como una obra de Serra, una abstracción que podría estar en cualquier lugar del espacio o del tiempo, una fábrica que ya no produce objetos sino sensaciones.
Cuando Richard Serra se entera de la desaparición de su obra por la llamada de una responsable del centro Reina Sofía ironiza con ir a Madrid para encontrar su escultura de acero quizás convertida en el cabecero metálico de una cama. Bromeaba seguramente sin querer con los tiempos ya pasados en los que con el metal aún se producían objetos sólidos. Pero ya dijo Marx que todo lo sólido desvanece en el aire.
Resumo en una frase arquetípica y más propia de una ruptura que de una crítica. Estoy seguro que no eres tú, que soy yo. Mi ignorancia autoreconocida y, si se me permite, casi ajutofestejada, sobre el arte contemporáneo, hace muy probablemente que se me haya hecho tedioso, y hasta me haya puesto de mal humor esta lectura. Compré el libro tras quedarme prendado con "Rewind" pero no me ha satisfecho. Sólo puedo decir en su favor, que está muy bien escrito, cosa que, para los tiempos que corren, está bastante bien. Sin embargo entiendo que es un reportaje poliédrico con un importante trabajo de campo, en el que la ficción asoma de vez en cuando con destellos muy dignos, pero... Lo siento, no me gusta el arte contemporáneo. Que haya un capítulo entero destinado a hacer inventario de piezas, no es precisamente algo que me de placer, aunque fuere necesario. He comprado este libro después de quedarme prendado con "Rewind", y reconozco que está bien escrito. Sólo ocurre que yo no soy su público rector. Estoy seguro que a mucha gente le va a encantar. Siento no encontrarme entre ellos.
Hubo un momento, en torno a las páginas 100-150, que estuve tentado de dejarlo, porque me parecía que era más un artículo de investigación con un formato novedoso que una novela. Pero empecé a leer en diagonal los testimonios que no me interesaban (que fueron pocos, a lo mejor 10 en total) y volví a coger ritmo y empecé a sentir, ahora sí, muchas cosas. No es un artículo, es una novela sutilísima de tema nacional. Me ha gustado mucho, y me ha resultado interesante e impresionante desde todos los puntos de vista. Se disfruta muchísimo.
4 estrella. 5. Yo qué sé si leo para divertirme y lo he pasado genial.
Son un monto de testimonios (¿Alexievich?) uno detrás de otro sobre la ppfff escultura de Richard Serra que desapareció de los almacenes del Reina Sofía. Sólo que pesa...38 FRUTAS TONELADAS. Va de menos a más, reflexiona sobre el arte, la administración, los alcaldes que se vuelven to locos por poner bichacos de metal caros en plazas porque son arte. Lo de la escultura es la pista de despegue para mucho más. Es finísima. Es un sainete. Es una mojiganga. Es surrealista. Es una virguería. Es una obra de arte
El libro acaba con "en general a las bibliotecas públicas" y nada, pos guanyadíssima és clar. Lo que más he disfrutado sin duda son las aportaciones de las voces más literarias, la verdad me la sopla lo de la guardia civil etc.
Arranca muy bien, me gustó mucho el capítulo final y cómo Tallón muestra el recorrido por la obra de Serra, su visión como artista.
Muy buena la idea de llevar a un libro un hecho real y narrarlo desde ficción - no ficción. Es difícil creer que de verdad un gran museo perdió una escultura con un peso de 38 toneladas y nadie supo nada y acá, el escritor, logra entre testimonios contar el cuento.
Igual, creo que hubo demasiados testimonios que no sumaron y hubo partes en las que que me aburrí un poco, pero en general es bueno y la lectura es entretenida.
Como todas las novelas de Juan Tallón, "Obra maestra" está muy bien escrita. Sin embargo, en esta ocasión he sentido que la trama era como un globo que se inflaba deprisa en las primeras páginas y que luego no para de desinflarse hasta acabar la novela. Es lo que suele ocurrir cuando un novelista toma una anécdota como pretexto narrativo e intenta alargarla hasta convertir una noticia de periódico en una novela de trescientas páginas. Engancha por el morbo del 'clickbait', pero aburre por la praxis redundante y por la trama hueca.
Buenísimo, mezcla de investigación policial, crónica de una burocracia y sobre todo, arte. Me ha gustado mucho cómo a través de distintas entrevistas se trata el tema de qué es el arte y la controversia que genera esta pregunta una y otra vez. Muy recomendado.
Un poquito más de tres estrellas, pero menos de cuatro sin duda.
Esta novela mezcla ficción y realidad, lo cual puede ser una premisa interesante, pero el principal problema que le veo es que, para mi gusto, le sobran páginas y testimonios que no aportan nada salvo, quizá, enfatizar que el autor ha hecho un trabajo de investigación para escribir esta novela.
El misterio a través del cual, en teoría, debería circular esta novela va perdiendo fuerza con el trascurso de la novela, llegando a un final que considero un poco descafeinado.
Agradezco las mini dosis de conocimiento sobre arte moderno que esta novela me ha brindado, pero como novela no la termino de ver, una pena.
¿Cómo puede desaparecer una obra de arte que pesa 40 toneladas del Reina Sofía? Como dijo Isidoro Valcárcel Medina, «la obra maestra es robar la escultura de Richard Serra, no hacerla».
Cuesta creer que una obra de arte de 38 toneladas pudiera desaparecer, perderse o robarse; yo, una vez vista dicha obra, me lo creo bastante.
Bromas aparte, el libro es una entrenida crónica de aquel suceso (la desaparición de la Equal-Parallel/Guernica-Bengasi de Richard Serra), contado de una manera dinámica y ágil que tampoco ofrece mucho más que una sucesión de testimonios y reflexiones sobre el arte moderno y la maravillosa burocracia española.
Un novelón. Completamente fascinante. Una pieza increíble para conocer qué pasó con la desaparición de la obra de Serra, conocer su obra y los debates del arte moderno. Una pasada.
La idea es genial y la historia también. Pero arriesgó mucho en el "cómo".
Las diferentes intervenciones que hacen los entrevistados a veces se hace muy pesada y considero que tampoco aporta mucho a la trama general. Esto hace que estés super dentro del libro, pero en 5 páginas te den ganas de dejarlo. Tal vez te puedas ir saltando "capítulos" aún y con el riesgo de perder información.
Me parece muy buena idea cómo ha sido escrito para poder explicar cualquier cosa relacionada con la historia, pero con menos páginas y eligiendo las mejores intervenciones hubiera mejorado muchísimo.
Diferente. "Obra maestra" narra unos hechos tan sorprendentes como desconocidos hasta el momento para mí.
¿Cómo es posible que una escultura de 38 toneladas desaparezca? A través de más de 70 narradores, Juan Tallón nos cuenta verdades mezcladas con ficción de una manera magistral. Ojo, la forma de contarlo no gusta a todo el mundo, puede resultar tedioso saltar de una voz a otra, pero para mí ha sido uno de los puntos fuertes de la novela.
3'5 ⭐ Original y entretenida aunque a veces resulta algo repetitiva por seguir continuamente el mismo formato de testimonio tras testimonio. Pero en conjunto ha merecido la pena leerla.