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El curso que hice al revés
¿Dónde especular con toda libertad, confesar manías, recoger hilos para encordarlos firmemente en la reflexión, volcar escenas resonantes, inesperadas, ligadas a la rica experiencia cotidiana, tragicómica tantas veces, de ser profesor de Literatura?
¿Dónde publicar esos textos breves sobre libros y literatura que no son artículos académicos ni estudios literarios ni escritura utilitaria?
¿Dónde abrir la tapa de la máquina de leer literatura en la academia y observar algunos de sus aceitados mecanismos y algunos de sus terribles desperfectos?
¿Dónde leer a alguien que lee, a veces incluso a alguien que ve a alguien leer?
Aquí.
¿Dónde publicar esos textos breves sobre libros y literatura que no son artículos académicos ni estudios literarios ni escritura utilitaria?
¿Dónde abrir la tapa de la máquina de leer literatura en la academia y observar algunos de sus aceitados mecanismos y algunos de sus terribles desperfectos?
¿Dónde leer a alguien que lee, a veces incluso a alguien que ve a alguien leer?
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220 pages
Published January 1, 2022
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Community Reviews
Displaying 1 - 26 of 26 reviews
June 24, 2022
Lo que más me gustó de este libro es la Libertad con que el lector, profesor y académico escribió y recopiló estas notas. La inteligencia que muestran estos textos no está en la erudición, sino en el respeto con que trata a sus lectores y, especialmente, el sano escepticismo con que toma sus propias conclusiones.
July 26, 2022
Está muy bien escrito, con mucha información y reflexión sobre la vida y obra de autores chilenos como Baldomero Lillo, Alberto Blest Gana y por supuesto Manuel Rojas, de quien el autor estuvo a cargo de una edición crítica de sus Cuentos Completos. Además de análisis y reflexiones sobre la experiencia pedagógica y la experiencia como lector. Me gustó mucho.
July 30, 2022
Lo pasé regio.
August 4, 2022
Cándido, detallista sin pasarse a lo fotográfico, culto sin aspavientos y sobre todo ágil. Qué preciosura el capítulo de Moby Dick y el oficio de escribir.
December 19, 2022
Gran y sorpresivo libro.
Es un libro escrito por un profesor de literatura que habla de literatura. Uno podría pensar que es un texto pedante que hace gala de mucho conocimiento. Mas no, son breves y muy entretenidas reflexiones, muy simples, que ayudan a apreciar aún más a la literatura. Aprendí, disfruté, todo desde un punto de vista que invita e incluye. Me lo devoré.
Es un libro escrito por un profesor de literatura que habla de literatura. Uno podría pensar que es un texto pedante que hace gala de mucho conocimiento. Mas no, son breves y muy entretenidas reflexiones, muy simples, que ayudan a apreciar aún más a la literatura. Aprendí, disfruté, todo desde un punto de vista que invita e incluye. Me lo devoré.
November 4, 2022
Una pequeña joya de libro para cualquiera a quien le guste pensar sobre la literatura. El ensayo que da su título a la colección, y aquel con el que cierra, "Leer, analizar, interpretar, juzgar", me parecen especialmente valiosos. No siempre estuve de acuerdo con los postulados de Álvarez, pero siempre me hicieron pensar.
Los análisis de literatura contemporánea que más disfruté fueron aquel de Jeidi en "Nuevos narradores viejos" y el de Muriendo por la dulce patria mía en "Un libro resucitado". ¿Coincidencia que sean los dos que había leído de los contemporáneos que analiza? Obvio que no, sino que da cuenta de un dato quizás obvio: leer un análisis sobre un libro ya leído es más satisfactorio que leer un análisis sobre un libro no leído, pero sobre el que tal vez diremos "oh, suena bacán, lo leeré".
El principal pero: todos los grandes clásicos que menciona en "Por qué leer los clásicos", y casi todos los otros libros de los que habla –creo que a excepción de Jeidi y las novelas de Elena Ferrante– son escritos por hombres. En Words Are My Matter: Writings About Life and Books, 2000–2016, with A Journal of a Writer's Week, Le Guin señala la injusticia de que James Joyce (a quien Álvarez menciona) sea parte del "canon" cuando casi nadie lee el Ulises entero salvo por obligación, mientras que se podría argumentar que Virginia Woolf (a quien Álvarez ni menciona) ha sido más leída y más influyente en la novelística posterior que Woolf. Habría sido ignorada, postula Le Guin, básicamente por ser mujer. Es una pena que el excelente texto donde Álvarez defiende la necesidad de un canon contra los argumentos de la posmodernidad esté opacado por esta omisión, que supongo no es malintencionada pero que a estas alturas del siglo XXI y con toda la tinta que ha corrido en torno al feminismo, no esperaría ver.
Un pero menor: "El interior de un taller literario" es puro name-dropping y es bastante pretencioso. Una se siente outsider si no le ve la gracia. No se dejen engañar por ese texto que está bien al inicio de la colección, porque el resto de los textos son cero pretenciosos y 100% accesibles para cualquier outsider. Incluso sabiendo casi nada de literatura chilena, no habiendo leído (imperdonable, lo sé) la gran mayoría de los clásicos de los que habla (notable excepción Hijo de ladrón, que enmarca en su tetralogía y que ahora tendré que leer entera algún día), pude disfrutar las reflexiones y rumiaciones de Álvarez en torno a la lectura, la literatura, cómo leer, y la forma en que pensar en "cómo leer" a veces se vuelve un "cómo vivir".
Los análisis de literatura contemporánea que más disfruté fueron aquel de Jeidi en "Nuevos narradores viejos" y el de Muriendo por la dulce patria mía en "Un libro resucitado". ¿Coincidencia que sean los dos que había leído de los contemporáneos que analiza? Obvio que no, sino que da cuenta de un dato quizás obvio: leer un análisis sobre un libro ya leído es más satisfactorio que leer un análisis sobre un libro no leído, pero sobre el que tal vez diremos "oh, suena bacán, lo leeré".
El principal pero: todos los grandes clásicos que menciona en "Por qué leer los clásicos", y casi todos los otros libros de los que habla –creo que a excepción de Jeidi y las novelas de Elena Ferrante– son escritos por hombres. En Words Are My Matter: Writings About Life and Books, 2000–2016, with A Journal of a Writer's Week, Le Guin señala la injusticia de que James Joyce (a quien Álvarez menciona) sea parte del "canon" cuando casi nadie lee el Ulises entero salvo por obligación, mientras que se podría argumentar que Virginia Woolf (a quien Álvarez ni menciona) ha sido más leída y más influyente en la novelística posterior que Woolf. Habría sido ignorada, postula Le Guin, básicamente por ser mujer. Es una pena que el excelente texto donde Álvarez defiende la necesidad de un canon contra los argumentos de la posmodernidad esté opacado por esta omisión, que supongo no es malintencionada pero que a estas alturas del siglo XXI y con toda la tinta que ha corrido en torno al feminismo, no esperaría ver.
Un pero menor: "El interior de un taller literario" es puro name-dropping y es bastante pretencioso. Una se siente outsider si no le ve la gracia. No se dejen engañar por ese texto que está bien al inicio de la colección, porque el resto de los textos son cero pretenciosos y 100% accesibles para cualquier outsider. Incluso sabiendo casi nada de literatura chilena, no habiendo leído (imperdonable, lo sé) la gran mayoría de los clásicos de los que habla (notable excepción Hijo de ladrón, que enmarca en su tetralogía y que ahora tendré que leer entera algún día), pude disfrutar las reflexiones y rumiaciones de Álvarez en torno a la lectura, la literatura, cómo leer, y la forma en que pensar en "cómo leer" a veces se vuelve un "cómo vivir".
October 22, 2022
No sé si Laurel tiene un proyecto claro sobre el tema, pero este libro -siendo personalísimo en su forma, estilo y temas- me recordó mucho la idea de Quien le teme a la poesía, de la misma editorial. Muy buenas experiencias ambas. En este caso, además, una suerte de diario de inquietudes, desvelos y otras vainas relacionadas a esas cosas llamadas escritura y lectura académicas.
Pd. La última entrada está recomendada por el Mineduc para trabajar análisis de textos y me parece un tremendo acierto.
Pd. La última entrada está recomendada por el Mineduc para trabajar análisis de textos y me parece un tremendo acierto.
January 11, 2023
Este libro se compone de artículos, anécdotas pensamientos e ideas en torno a la literatura y el estudio de la misma. Haber tenido clases con el profe y conocerlo me generó una mayor cercania, ya que muchas de sus discusiones aparecen en sus cursos, y me parece que su fascinación por la lectura se refleja con amor en cada capítulo, fue un placer poder leerlo.
El último ensayo me pareció maravilloso especialmente para los que estudiamos literatura, me hubiera gustado leerlo antes de terminar la carrera.
El último ensayo me pareció maravilloso especialmente para los que estudiamos literatura, me hubiera gustado leerlo antes de terminar la carrera.
August 8, 2022
Soy fan Ediciones Laurel. Me traje de Santiago los últimos 4 libros publicados. Partí por “El curso que hice al revés” justamente por empezar al revés de mis gustos. Me lo tragué. No imaginaba que un ensayo de estudios literarios y otros apuntes me fueran a enganchar tanto.
Hay que reconocer que sentía harta curiosidad por su autor y me llevé una sorpresa enorme: siempre imaginé que @Espelunco era un señor mayor que yo, un respetable e ingenioso intelectual de unos sesentitantos. Las pinzas. Me vino el viejazo.
Lo bueno es que también le gusta El Señor de los Anillos. Si hay que creerle al libro, debemos haberlo leído por el mismo tiempo… (ya dije, yo un poquito mayor). Esperaba encontrar algún apunte al respecto… tendré que esperar para la próxima entrega.
Cierro con las tareas que me dejó el profesor: releer Hijo de Ladrón y las otras tres novelas de Rojas. Ir por más literatura nacional: Geisse, Guzmán al menos. Y definir con la familia lectora cuáles son nuestros clásicos 😉😊
Hay que reconocer que sentía harta curiosidad por su autor y me llevé una sorpresa enorme: siempre imaginé que @Espelunco era un señor mayor que yo, un respetable e ingenioso intelectual de unos sesentitantos. Las pinzas. Me vino el viejazo.
Lo bueno es que también le gusta El Señor de los Anillos. Si hay que creerle al libro, debemos haberlo leído por el mismo tiempo… (ya dije, yo un poquito mayor). Esperaba encontrar algún apunte al respecto… tendré que esperar para la próxima entrega.
Cierro con las tareas que me dejó el profesor: releer Hijo de Ladrón y las otras tres novelas de Rojas. Ir por más literatura nacional: Geisse, Guzmán al menos. Y definir con la familia lectora cuáles son nuestros clásicos 😉😊
September 15, 2022
Ya pero: palabras✨
December 15, 2022
Para rumiarlo con tiempo, gocé demorarlo e ir porcionando su lectura como un buen chocolate...
Gozado!
Gozado!
April 30, 2023
Creo muy importante, a veces, parar de leer novelas para aprender de literatura y de su mundo.
September 14, 2025
Me gustó. Marginalia inteligente y bien escrita, con un par de pequeños ensayos articulados que logran motivar y enseñar.
June 18, 2024
Men will learn everything about Manuel Rojas instead of going to therapy
April 4, 2023
El libro se demasiado técnico, es como algo que yo pondría como lectura en una clase de literatura, hay escritos buenos, se entiende el porqué de los tecnicismos pero honestamente no leería esto otra vez a menos que estudiase literatura pura y dura
October 16, 2022
Muy entretenido, lo compré en la primavera del libro y me atrapó.
July 12, 2023
No pude evitar hacerme con este libro, lo escuché en el programa Cuatro ojos de radio ADN, vi algunos bookstagramer comentarlo y por sobre ello, haberme topado con el stand de Laurel en una feria del libro en la cual participe como vendedor: la suma de los factores me llevo a un resultado inevitable.
Y que lectura. Ignacio Alvaréz desempolva los secretos que te hace una buena lectora o lector, desde las consideraciones del porqué leemos, cómo lo hacemos, desde una mirada teórica y práctica. En 31 mini ensayos pasa por anécdotas propias de un profesor de literatura y sus clases, sus primeras aproximaciones a la lectura y a la teoría de esta, además del análisis de autores en los cuales es especialista (Manuel Rojas, Baldomero Lillo), la nueva narrativa chilena y con ello también algunas herramientas de análisis, juicios y formas de leer.
Me lo devoré en dos días (215 páginas) y me encantó. Una agradable forma de pasar a la teoría literaria pero de una manera amena y entretenida, que te permite entender y querer comprender qué significa todo el acto racional, emocional y físico que genera la lectura en muchas y muchos. Una lectura de la cual no te arrepentirás.
Y que lectura. Ignacio Alvaréz desempolva los secretos que te hace una buena lectora o lector, desde las consideraciones del porqué leemos, cómo lo hacemos, desde una mirada teórica y práctica. En 31 mini ensayos pasa por anécdotas propias de un profesor de literatura y sus clases, sus primeras aproximaciones a la lectura y a la teoría de esta, además del análisis de autores en los cuales es especialista (Manuel Rojas, Baldomero Lillo), la nueva narrativa chilena y con ello también algunas herramientas de análisis, juicios y formas de leer.
Me lo devoré en dos días (215 páginas) y me encantó. Una agradable forma de pasar a la teoría literaria pero de una manera amena y entretenida, que te permite entender y querer comprender qué significa todo el acto racional, emocional y físico que genera la lectura en muchas y muchos. Una lectura de la cual no te arrepentirás.
June 20, 2022
En este libro uno se encuentra con las epifanías que tiene todo lector más o menos constante... cómo ciertos textos nos tocan de una forma especial, el rol que cumplen y por qué es importante no dejarse seducir por el buen gusto canónico.
Con guiños a Ítalo Calvino y a los innumerables profesores de literatura que pueblan la literartura nacional, el autor además, trasunta su interés por un grupo de autores chilenos del siglo XX que cayeron un poco en el olvido y que, en parte gracias a los mismos esfuerzos del autor, están cobrando nuevamente relevancia y vigor (Baldomero Lillo, Manuel Rojas y Nicomedes Guzmán).
El libro cierra con un capítulo distinto, tips de un profesor experimentado sobre cómo realizar una lectura crítica: quizás falta acá una advertencia, unos tres asteriscos o algo como en Rayuela, de que "acá se termina el libro", para dejarle el último ensayo a los interesados.
Con guiños a Ítalo Calvino y a los innumerables profesores de literatura que pueblan la literartura nacional, el autor además, trasunta su interés por un grupo de autores chilenos del siglo XX que cayeron un poco en el olvido y que, en parte gracias a los mismos esfuerzos del autor, están cobrando nuevamente relevancia y vigor (Baldomero Lillo, Manuel Rojas y Nicomedes Guzmán).
El libro cierra con un capítulo distinto, tips de un profesor experimentado sobre cómo realizar una lectura crítica: quizás falta acá una advertencia, unos tres asteriscos o algo como en Rayuela, de que "acá se termina el libro", para dejarle el último ensayo a los interesados.
July 3, 2023
"El curso que hice al revés y otros apuntes de profesor" de Ignacio Álvarez @LaurelLibros es la obra de un maestro que abraza al lector emocionado de sabiduría (otra categoría) y de la literatura como lengua y arte verbal.
No sé dónde ubicarlo en el librero: ¿Al lado de Grínor, de H. Díaz o de Lillo, Rojas, Droguett? quizás ¿en los nuevos narradores viejos? Un libro inclasificable y quizás ahí está su mayor riqueza. Inteligencia y profundidad, pero también honestidad y amabilidad. Quizás también estas son claves de lectura?
El trabajo de Álvarez es entender, mapear, darle sentido a la literatura, pero también al oficio de (enseñar a) leer, analizar, interpretar y juzgar. Se reescribe y hace comprensible desde la perspectiva del otro. Dicho de otro modo: volver a amar el mundo.
Al maestro con cariño.
No sé dónde ubicarlo en el librero: ¿Al lado de Grínor, de H. Díaz o de Lillo, Rojas, Droguett? quizás ¿en los nuevos narradores viejos? Un libro inclasificable y quizás ahí está su mayor riqueza. Inteligencia y profundidad, pero también honestidad y amabilidad. Quizás también estas son claves de lectura?
El trabajo de Álvarez es entender, mapear, darle sentido a la literatura, pero también al oficio de (enseñar a) leer, analizar, interpretar y juzgar. Se reescribe y hace comprensible desde la perspectiva del otro. Dicho de otro modo: volver a amar el mundo.
Al maestro con cariño.
August 21, 2025
A ratos me sentí en una clase (muy buenas clases, por cierto), a ratos leyendo cuentos, y a ratos leyendo un blog. En términos de animé, los mejores capítulos estaban después del relleno, pero llegaba a esos capítulos sin preparación mental para una clase tal.
Quizá fue mi error, no me contextualicé antes de leer el libro, y el capítulo del Señor de los Anillos me engañó. Quizá lo disfrute más en una futura relectura (sí puse atención, Ignacio, saludos. Imagino que lees estas reseñas, como mencionaste a Goodreads en el libro).
¿Lo grandioso? la cantidad de libros que me llevo como tarea para la casa.
Quizá fue mi error, no me contextualicé antes de leer el libro, y el capítulo del Señor de los Anillos me engañó. Quizá lo disfrute más en una futura relectura (sí puse atención, Ignacio, saludos. Imagino que lees estas reseñas, como mencionaste a Goodreads en el libro).
¿Lo grandioso? la cantidad de libros que me llevo como tarea para la casa.
December 23, 2023
Le quiero dar 4.5 estrellas, pero darle 5 sería muy mentiroso de mi parte
Disfrute mucho el libro, quizá porque vengo de dos años leyendo mucho, dos años donde igual he dado cabida al canon literario y donde me he abierto a buscar y escuchar recomendaciones
Ignacio es apasionado de la literatura, se nota, esa pasión desborda las páginas de este libro, y siendo un tema denso y a veces árido, logra mantenerte atento y con ganas de aprender más
Al menos me quedo con la meta de leer más a Carlos Droguett, Nicomedes Guzmán y Manuel Rojas
Disfrute mucho el libro, quizá porque vengo de dos años leyendo mucho, dos años donde igual he dado cabida al canon literario y donde me he abierto a buscar y escuchar recomendaciones
Ignacio es apasionado de la literatura, se nota, esa pasión desborda las páginas de este libro, y siendo un tema denso y a veces árido, logra mantenerte atento y con ganas de aprender más
Al menos me quedo con la meta de leer más a Carlos Droguett, Nicomedes Guzmán y Manuel Rojas
October 5, 2022
Un profesor y crítico literario te habla con pasión de lo que le gusta, sin pasarse el rollo, solo por el gusto de compartir. El resultado es un libro excepcional, con mucho humor y buenas anécdotas. Hacia el final, los textos -casi siempre breves- se van haciendo un poco más largos y especializados, pero como el lector ya está entusiasmado, se deja llevar y termina aprendiendo muchísimo.
September 25, 2025
Disfruté mucho este libro. Es un acercamiento amable a los estudios o la teoría literaria, donde sí o sí se aprende. Se nota que el autor sabe mucho, pero no se da color, al contrario: es cercano, pedagógico y hasta divertido.
La bibliografía es amplia y me dejó con muchas lecturas pendientes.
Además, algunos apuntes son sobre la obra de Manuel Rojas, eso siempre conquista.
La bibliografía es amplia y me dejó con muchas lecturas pendientes.
Además, algunos apuntes son sobre la obra de Manuel Rojas, eso siempre conquista.
November 1, 2022
Este libro de ensayos sobre lectura es bastante bueno. Pues evita ser tedioso y es accesible para personas que no estamos tan relacionados con la academia.
Comenzando desde ensayos más generales a escritos mucho más focalizados en obras puntuales.
Comenzando desde ensayos más generales a escritos mucho más focalizados en obras puntuales.
July 29, 2023
Qué manera de pasarlo bien leyendo este libro.
December 29, 2024
Quiero leer todo lo que aparece mencionado en este libro. Ese nivel de convencimiento.
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