What do you think?
Rate this book
La sombra del ciprés es alargada
Pedro es un huérfano que crece sin calor humano, educado primero por un tío y después por don Mateo, un maestro que le transmite una concepción pesimista de la vida. La muerte de su gran amigo Alfredo sume al protagonista en una profunda crisis existencial, que le lleva a tomar una tremenda determinació se convertirá en marino para vivir sin amor ni posesión alguna. Pero Pedro se enamora de Jane, una joven americana, vital y alegre y, aunque pretende huir de la felicidad, el piloto Bolea y la suegra le ayudan a cambiar de principios. Sin embargo, un trágico acontecimiento parece obligarle a volver al contexto de la infancia.
First published January 1, 1947
127 people are currently reading
2692 people want to read
About the author
Miguel Delibes
187 books608 followersMiguel Delibes Setién was a Spanish novelist, journalist and newspaper editor associated with the Generation of '36 movement. From 1975 until his death, he was a member of the Royal Spanish Academy, where he occupied letter "e" seat. Educated in commerce, he began his career as a cartoonist and columnist. He later became the editor for the regional newspaper El Norte de Castilla before gradually devoting himself exclusively to writing novels.
He was a connoisseur of the flora and fauna of Castile and was passionate about hunting and the countryside. These were common themes in his writing, and he often wrote from the perspective of a city-dweller who remained connected with the rural world.
He was one of the leading figures of post-Civil War Spanish literature, winning numerous literary prizes. Several of his works have been adapted into plays or have been turned into films, winning awards at the Cannes Film Festival among others. He has been ranked with Heinrich Böll and Graham Greene as one of the most prominent Catholic writers of the second half of the twentieth century. He was deeply affected by the death of his wife in 1974. In 1998 he was diagnosed with colon cancer, from which he never fully recovered.
He was a connoisseur of the flora and fauna of Castile and was passionate about hunting and the countryside. These were common themes in his writing, and he often wrote from the perspective of a city-dweller who remained connected with the rural world.
He was one of the leading figures of post-Civil War Spanish literature, winning numerous literary prizes. Several of his works have been adapted into plays or have been turned into films, winning awards at the Cannes Film Festival among others. He has been ranked with Heinrich Böll and Graham Greene as one of the most prominent Catholic writers of the second half of the twentieth century. He was deeply affected by the death of his wife in 1974. In 1998 he was diagnosed with colon cancer, from which he never fully recovered.
Ratings & Reviews
Friends & Following
Create a free account to discover what your friends think of this book!
Community Reviews
Displaying 1 - 30 of 274 reviews
February 6, 2014
¿Qué es mejor? ¿Tener algo y perderlo, o nunca haberlo tenido? Esta novela es deprimente y pesimista. La leí después de otra del mismo estilo y quedé sumergida en una sensación de desesperanza que me oprimía el pecho y me llenaba los ojos de lágrimas.
Tengo sentimientos encontrados. Me gustó poder adentrarme tanto en la historia. Yo era él. Pensaba lo que él pensaba. Sentía lo que él sentía. Por otro lado, ¡qué horrible sensación! ¡Qué horrible vida! El pesimista sólo ve las espinas en los rosales, la muerte en el hombre y la carne en el amor. Alimentados de pesimismo, no vivimos la vida, la sufrimos. ¡Sufrí!
Tengo sentimientos encontrados. Me gustó poder adentrarme tanto en la historia. Yo era él. Pensaba lo que él pensaba. Sentía lo que él sentía. Por otro lado, ¡qué horrible sensación! ¡Qué horrible vida! El pesimista sólo ve las espinas en los rosales, la muerte en el hombre y la carne en el amor. Alimentados de pesimismo, no vivimos la vida, la sufrimos. ¡Sufrí!
November 6, 2025
¿Y si todo estuviera condenado desde el principio? ¿Y si la vida no fuera más que un simulacro de esperanza, una tregua engañosa antes del golpe final?
No es una pregunta agradable, lo sé, pero es la que atraviesa cada página de La sombra del ciprés es alargada, la primera novela de Miguel Delibes, esa que ya desde su título nos advierte que la muerte acecha, silenciosa y persistente, como una sombra imposible de esquivar.
Pedro, el protagonista, llega de niño a Ávila para estudiar en casa de un maestro severo y pesimista, quien le inculca una filosofía de vida basada en la renuncia y el desapego: “No ames nada y nada te será arrebatado.” Y así, Pedro crece bajo la certeza de que la felicidad es una ilusión peligrosa y el dolor, la única constante. Lo que sigue es el relato de una educación sentimental marcada por la pérdida, el miedo a la vida y una lucha silenciosa contra un destino que parece escrito de antemano.. “No es lo mismo perder que no llegar. Si os dan a elegir, quedaos con lo último. El hombre acostumbrado a dos, si le dan tres será feliz; si desciende a uno, apenas percibirá la diferencia (…) porque hay una raya en que, rebasada, las conquistas no proporcionan felicidad.”
La infancia es una trampa. Nos dicen que somos esponjas, que aprendemos rápido, pero nadie nos advierte de que lo que aprendemos a los diez años puede perseguirnos toda la vida. Pedro no solo crece en la sombra del ciprés, sino también en la de unas ideas que lo encadenan. Aprende a desconfiar de la felicidad antes incluso de saber lo que es. Y cuando alguien te enseña a temer la vida, ¿cómo demonios aprendes luego a vivirla?
Si conoces al Delibes de El camino, Los santos inocentes o Cinco horas con Mario, puede que este te sorprenda. Es un Delibes más filosófico, más introspectivo. Aquí su prosa es más contenida, más reflexiva, con una claridad engañosa que esconde un mundo de emociones reprimidas. Es una escritura sin excesos, de frases sobrias pero precisas, como si cada palabra estuviera medida al milímetro. Lo curioso es que, a pesar de su aparente frialdad, hay un lirismo sutil que se cuela entre líneas, sobre todo en las descripciones de Ávila, una ciudad de piedra y silencios que se convierte en un personaje más, testigo de la educación sentimental de Pedro.
Porque Ávila no es solo el escenario; es un estado de ánimo. Sus calles estrechas, sus murallas impenetrables, su frío que se cuela hasta los huesos... Delibes la dibuja con la precisión de quien sabe que los lugares también pueden ser cárceles. Pedro no vive en Ávila, sobrevive en ella. Y aunque cambie de ciudad, lleva esas murallas dentro. Esa es la verdadera condena.
La estructura de la novela refuerza su tono pesimista. No hay giros espectaculares ni concesiones melodramáticas: todo avanza con la inevitabilidad de una tragedia griega. Y eso es lo que más desasosiego provoca: la sensación de que el protagonista está atrapado en un destino del que nunca podrá escapar. Y cuando la vida parece darle una tregua, cuando encuentra un atisbo de afecto, la realidad le recuerda que no hay refugio posible. Algo ocurre, algo que golpea justo en el centro de sus miedos más profundos. Y en lugar de cuestionar las enseñanzas de su maestro, Pedro las graba a fuego.
Desde ese momento, ya no hay marcha atrás. Delibes nos muestra cómo las ideas con las que crecemos pueden convertirse en una cárcel, cómo la educación puede ser una condena si solo nos enseña a temer, y cómo la soledad se arraiga en el alma cuando la vida se vive con miedo.
Lo interesante es que, aunque todo en la novela apunta al pesimismo, hay un margen para la duda. ¿Y si Pedro estuviera equivocado? ¿Y si su maestro le hubiera enseñado a mirar solo una parte de la realidad? En cierto modo, La sombra del ciprés es alargada es una trampa para el lector: nos sumerge en una visión del mundo tan gris y asfixiante que, al cerrarla, uno se pregunta si realmente es la única posible. Y en esa pregunta, en esa incertidumbre final, tal vez resida el verdadero impacto de la novela.
Porque sí, ciertamente, la sombra del ciprés es alargada… pero ¿y si uno decidiera caminar fuera de ella?
No es una pregunta agradable, lo sé, pero es la que atraviesa cada página de La sombra del ciprés es alargada, la primera novela de Miguel Delibes, esa que ya desde su título nos advierte que la muerte acecha, silenciosa y persistente, como una sombra imposible de esquivar.
Pedro, el protagonista, llega de niño a Ávila para estudiar en casa de un maestro severo y pesimista, quien le inculca una filosofía de vida basada en la renuncia y el desapego: “No ames nada y nada te será arrebatado.” Y así, Pedro crece bajo la certeza de que la felicidad es una ilusión peligrosa y el dolor, la única constante. Lo que sigue es el relato de una educación sentimental marcada por la pérdida, el miedo a la vida y una lucha silenciosa contra un destino que parece escrito de antemano.. “No es lo mismo perder que no llegar. Si os dan a elegir, quedaos con lo último. El hombre acostumbrado a dos, si le dan tres será feliz; si desciende a uno, apenas percibirá la diferencia (…) porque hay una raya en que, rebasada, las conquistas no proporcionan felicidad.”
La infancia es una trampa. Nos dicen que somos esponjas, que aprendemos rápido, pero nadie nos advierte de que lo que aprendemos a los diez años puede perseguirnos toda la vida. Pedro no solo crece en la sombra del ciprés, sino también en la de unas ideas que lo encadenan. Aprende a desconfiar de la felicidad antes incluso de saber lo que es. Y cuando alguien te enseña a temer la vida, ¿cómo demonios aprendes luego a vivirla?
“Soy así, veo así, siento así, porque un día, cuando mi alma era aún virgen, me dijeron: “Sé así, porque la vida es de esta manera”. Y yo, que carecía de criterio propio, vi la vida como me dijeron que era; y fui y obré en consecuencia con esta manera de estimar la vida (…) La vida era perder y para no perder deberíamos prescindir de ganar antes. Aquí estaba determinado el ritmo de mi conducta a lo largo de la vida.”
Si conoces al Delibes de El camino, Los santos inocentes o Cinco horas con Mario, puede que este te sorprenda. Es un Delibes más filosófico, más introspectivo. Aquí su prosa es más contenida, más reflexiva, con una claridad engañosa que esconde un mundo de emociones reprimidas. Es una escritura sin excesos, de frases sobrias pero precisas, como si cada palabra estuviera medida al milímetro. Lo curioso es que, a pesar de su aparente frialdad, hay un lirismo sutil que se cuela entre líneas, sobre todo en las descripciones de Ávila, una ciudad de piedra y silencios que se convierte en un personaje más, testigo de la educación sentimental de Pedro.
Porque Ávila no es solo el escenario; es un estado de ánimo. Sus calles estrechas, sus murallas impenetrables, su frío que se cuela hasta los huesos... Delibes la dibuja con la precisión de quien sabe que los lugares también pueden ser cárceles. Pedro no vive en Ávila, sobrevive en ella. Y aunque cambie de ciudad, lleva esas murallas dentro. Esa es la verdadera condena.
La estructura de la novela refuerza su tono pesimista. No hay giros espectaculares ni concesiones melodramáticas: todo avanza con la inevitabilidad de una tragedia griega. Y eso es lo que más desasosiego provoca: la sensación de que el protagonista está atrapado en un destino del que nunca podrá escapar. Y cuando la vida parece darle una tregua, cuando encuentra un atisbo de afecto, la realidad le recuerda que no hay refugio posible. Algo ocurre, algo que golpea justo en el centro de sus miedos más profundos. Y en lugar de cuestionar las enseñanzas de su maestro, Pedro las graba a fuego.
“Entonces yo no era más que un rapaz animado por una vitalidad prestada, sin jugo propio, sin capacidad de raciocinio. Ahora las cosas habían cambiado y, por lo menos, ya sabía que de una sociedad de dos, uno fatalmente ha de enterrar al otro (…) Sabía que la sombra del ciprés es alargada y corta como un cuchillo.”
Desde ese momento, ya no hay marcha atrás. Delibes nos muestra cómo las ideas con las que crecemos pueden convertirse en una cárcel, cómo la educación puede ser una condena si solo nos enseña a temer, y cómo la soledad se arraiga en el alma cuando la vida se vive con miedo.
Lo interesante es que, aunque todo en la novela apunta al pesimismo, hay un margen para la duda. ¿Y si Pedro estuviera equivocado? ¿Y si su maestro le hubiera enseñado a mirar solo una parte de la realidad? En cierto modo, La sombra del ciprés es alargada es una trampa para el lector: nos sumerge en una visión del mundo tan gris y asfixiante que, al cerrarla, uno se pregunta si realmente es la única posible. Y en esa pregunta, en esa incertidumbre final, tal vez resida el verdadero impacto de la novela.
Porque sí, ciertamente, la sombra del ciprés es alargada… pero ¿y si uno decidiera caminar fuera de ella?
October 26, 2020
We have now an exhibition in the Biblioteca Nacional on Miguel Delibes in commemoration to the hundred years since he was born. His novels are not well known outside Spain although he has been translated into several languages. Some time ago I wrote a review on Señora de rojo sobre fondo gris and I have finally read what was his first novel. As it received in 1947 the still new but already prestigious Premio Nadal Delibes jumped into fame and continued a literary career. In Valladolid, where he was born, he is worshiped, but his origins are however French. His great granduncle was the composer Léo Delibes and his grandfather had moved to northern Spain to work in the building of the railway in Cantabria.
The shadow is a Bildungsroman. It follows the destiny of the ten-year old Pedro, an orphan, as he is parked by his uncle and tutor, in the home of a provincial teacher in Avila. This happens around 1905, for there are a couple of references to the failed proletarian revolution in Russia. Avila is a city that even today, completely surrounded by its astounding medieval walls, gives the impression to the modern visitor that the city has been incapsulated in an ageless eternity. A tragedy takes place and the first half of the novel finishes. The second half follows Pedro as he comes out of his cocoon and enters the world. During this period, he has to grapple with his own identity and sort out the relationship between his life and death – for the shadow of a cypress is long.
I have enjoyed reading this. The language flows very naturally and there are some exquisite lyrical sections with a perfect Castilian note -- by this I mean that they remain sober in their lyricism. Delibes plays with symbols, and the cypress is a successful one as its cutting shadow pursues him; and Delibes fleshes out the haunting presence of trees in the lives of men. The novel however remains somewhat unfledged; the second part seemed weaker , and some other symbols did not achieve the impact of the cypress and were simply more predictable.
Underneath it all lies what became a Delibes trademark, a muffled pessimism, which with time it both lightened as life unfolded well but deepened when his wife passed away in her 50s. Of this melancholy his family speak in the documentary.
This gloominess however, suits to the T the various settings of his novels, in the barren, cold, unpopulated but bewitching Castile.
November 21, 2021
este libro es otra de las grandes obras de delibes. Es un libro que rezuma por todos los lados dolor, tristeza, melancolía, soledad pero está escrito de forma brillante como casi todos sus libros. Posiblemente por su temática no sea una lectura recomendable para todo el mundo, sobre todo si uno está en una etapa de bajón
October 12, 2022
Delibes no suele ser fácil de leer. Acordemos que tiene libros con una prosa, relativamente, sencilla y otros más densos, como es el caso de ésta, su primera novela. Pero lo que impregna mi espíritu cuando lo leo, no solo es admiración por su calidad literaria, es un profundo pesimismo que arraiga y permanece conmigo durante mucho tiempo.
¿ Estaré muy equivocada si comparo a Unamuno y Delibes, y les encuentro puntos en común?
El pensamiento sobre el final de la vida siempre sobrevuela sus libros. Unamuno no halla el consuelo de una vida ultraterrena, Delibes sí. Pero en ambos es palpable que toda vida, la de sus personajes por ende, va acompañada de sufrimiento, soledad y muerte.
Pedro, el protagonista de esta novela y al que acompañaremos hasta bien entrada la edad adulta, es un niño sin padre, ni madre, que en cuanto alcanza cierta edad, es enviado por su tío para ser criado e instruido por un maestro y su mujer. Seres insípidos, incapaces de una palabra de aliento o una caricia. Sus días se alegrarán con la llegada de un nuevo alumno, que se convertirá en su hermano. Pero... el hombre propone y Dios o la vida dispone.
Una novela hermosa, triste, densa, pesimista... Hay quiénes piensan que el final es esperanzador. Yo debo pertenecer al grupo de los pesimistas, no le veo maldita la esperanza ....
Con este libro me pasa como con otros de Delibes, me hubiera gustado una segunda parte. Después de tanto sufrimiento ¿cómo fue la vida de Pedro a partir de entonces?
Vuelta a Unamuno, si hay un personaje que mereciera rebelarse contra su escritor-creador es sin duda nuestro protagonista.
( Recuerdo en la Universidad una compañera me dijo que si lo hubiera sabido no lo habría leído. Lo estuve mirando de reojo desde entonces... Yo si me alegro de haberlo leído ahora, aunque me haya commovido profundamente y sienta como el propio Delibes confesara, que no va a ser mi libro favorito)
¿ Estaré muy equivocada si comparo a Unamuno y Delibes, y les encuentro puntos en común?
El pensamiento sobre el final de la vida siempre sobrevuela sus libros. Unamuno no halla el consuelo de una vida ultraterrena, Delibes sí. Pero en ambos es palpable que toda vida, la de sus personajes por ende, va acompañada de sufrimiento, soledad y muerte.
Pedro, el protagonista de esta novela y al que acompañaremos hasta bien entrada la edad adulta, es un niño sin padre, ni madre, que en cuanto alcanza cierta edad, es enviado por su tío para ser criado e instruido por un maestro y su mujer. Seres insípidos, incapaces de una palabra de aliento o una caricia. Sus días se alegrarán con la llegada de un nuevo alumno, que se convertirá en su hermano. Pero... el hombre propone y Dios o la vida dispone.
Una novela hermosa, triste, densa, pesimista... Hay quiénes piensan que el final es esperanzador. Yo debo pertenecer al grupo de los pesimistas, no le veo maldita la esperanza ....
Con este libro me pasa como con otros de Delibes, me hubiera gustado una segunda parte. Después de tanto sufrimiento ¿cómo fue la vida de Pedro a partir de entonces?
Vuelta a Unamuno, si hay un personaje que mereciera rebelarse contra su escritor-creador es sin duda nuestro protagonista.
( Recuerdo en la Universidad una compañera me dijo que si lo hubiera sabido no lo habría leído. Lo estuve mirando de reojo desde entonces... Yo si me alegro de haberlo leído ahora, aunque me haya commovido profundamente y sienta como el propio Delibes confesara, que no va a ser mi libro favorito)
March 6, 2015
Una joya. Un así sí. Un “discúlpame pero tengo que irme a pensar”. Un grito al vacío, a la inmensidad más absoluta, pero con el miedo de escuchar una respuesta y tener que salir de ella. Reseña completa:
http://www.libros-prohibidos.com/migu...
http://www.libros-prohibidos.com/migu...
December 8, 2013
Lo mejor de las novelas de Delibes son las frases de los personajes, se nota que esas frases en muchos casos no son invención, se nota que han sido escuchadas anteriormente. Son frases demasiado profundas, sencillas y macabras en muchos casos, como para haber sido inventadas. Un libro con fuerza.
June 9, 2022
Tuve que teclear todos los botones de la app hasta que por fin, me permitió escribir.
Me impresionó muchísimo la primera vez que lo leí, sobre todo la etapa de su juventud.
La segunda vez, esperaba ese placer sosegado y más atento a detalles que me suele acompañar en las segundas lecturas. No me esperaba ese desgarro. Una obra magnífica y demoledora, en mi opinión.
Me impresionó muchísimo la primera vez que lo leí, sobre todo la etapa de su juventud.
La segunda vez, esperaba ese placer sosegado y más atento a detalles que me suele acompañar en las segundas lecturas. No me esperaba ese desgarro. Una obra magnífica y demoledora, en mi opinión.
February 3, 2018
Leí la última línea sumida en una profunda desesperanza y nostalgia. Este libro transmite con exquisita precisión del proceso mental al sentir emociones positivas, como el placer de contemplar la naturaleza, de pasear por una vieja ciudad, de amar y ser amado, pero sobretodo incide en la terrible melancolía que hay detrás de cada uno de esos placeres. Perder a quienes amamos, volver a un hogar en el que nadie es el mismo, o a una ciudad que ya no es la tuya. Sentir el mismo frío, en el mismo lugar años más tarde, pero sabiendo que nada es igual, que tu espíritu se ha ido quebrando con el paso de los años. Triste final pero dejando una ventana abierta. La melancolía también es bella.
March 24, 2019
Nunca le he agradecido tanto a un autor por partirme el corazon
March 29, 2025
Sin palabras. Si este libro lo escribe cierto intelectual ruso, estaríamos hablando de su obra magna. Se me hace muy difícil hacer una review porque toca ataca temas como la vida, la muerte, el tiempo o la razón de ser.
La piedra angular del libro es: qué es mejor, tener algo y perderlo, o nunca haberlo tenido?
Hay muchas frases y apuntes que he tomado de este libro, pero personalmente me quedo con esta: "me percaté entonces de que la alegría es un estado del alma y no una cualidad de las cosas; que las cosas en sí mismas no son alegres ni tristes, sino que se limitan a reflejar el tono con que nosotros las envolvemos."
Y a coalición de lo que debatimos ayer, me quedo con esta frase:" La vida terrena es del hombre neutro, de quien no ha puesto la base de su felicidad en nada caduco, finito, limitado, aunque tampoco en una vida ulterior; de quien ha hecho de la vida una experiencia sin profundidad, altura, consistencia ni raíz..."
Me gusta la manera en que Pedro, con un alma completamente pesimista, se acerca a Dios y le encuentra en sus peores momentos. No se suicida porque sabe que Dios nunca nos da batallas más duras de las que podamos librar. Hay que dar gracias cada día por los que sufren más que nosotros, y los que sufren han de saber que pueden superarlo.
Me dejo muchas cosas porque es imposible de tratarlo en una review, pero no quiero dejar pasar la barbaridad de Delibes representando Ávila, que se presenta como el personaje más importante.
MIGUEL DELIBES PADRERA Y ESOS COJONES QUE NO CABEN EN LA GIRALDA.
La piedra angular del libro es: qué es mejor, tener algo y perderlo, o nunca haberlo tenido?
Hay muchas frases y apuntes que he tomado de este libro, pero personalmente me quedo con esta: "me percaté entonces de que la alegría es un estado del alma y no una cualidad de las cosas; que las cosas en sí mismas no son alegres ni tristes, sino que se limitan a reflejar el tono con que nosotros las envolvemos."
Y a coalición de lo que debatimos ayer, me quedo con esta frase:" La vida terrena es del hombre neutro, de quien no ha puesto la base de su felicidad en nada caduco, finito, limitado, aunque tampoco en una vida ulterior; de quien ha hecho de la vida una experiencia sin profundidad, altura, consistencia ni raíz..."
Me gusta la manera en que Pedro, con un alma completamente pesimista, se acerca a Dios y le encuentra en sus peores momentos. No se suicida porque sabe que Dios nunca nos da batallas más duras de las que podamos librar. Hay que dar gracias cada día por los que sufren más que nosotros, y los que sufren han de saber que pueden superarlo.
Me dejo muchas cosas porque es imposible de tratarlo en una review, pero no quiero dejar pasar la barbaridad de Delibes representando Ávila, que se presenta como el personaje más importante.
MIGUEL DELIBES PADRERA Y ESOS COJONES QUE NO CABEN EN LA GIRALDA.
July 7, 2020
Nunca dejo un libro a medias, pero este es inacabable, cada párrafo es una tortura.
Espero que nadie cometa jamás el error de empezar a leer a Delibes por aquí.
Espero que nadie cometa jamás el error de empezar a leer a Delibes por aquí.
October 28, 2024
Son muy pocos los autores que consiguen con sus libros marcar la vida de los lectores, pero Miguel Delibes lo ha hecho conmigo con esta desgarradora novela.
He de decir que al principio no conseguí conectar con el autor debido a las continuas descripciones que hace del paisaje y su entorno (algo que, por otra parte, es característico de su estilo). Sin embargo, poco a poco va profundizando cada vez más en la psicología de los personajes y, fundamentalmente, de su protagonista: un niño que es dejado por su tío en manos de un señor para que se encargue de su educación.
Este hombre, Mateo Lesmes, le imbuye su pesimista manera de ver la vida. Moldea su espíritu haciéndole ver las ventajas de cortar todo vínculo afectivo con la gente, de ser una isla en medio del inmenso mar, pues es preferible no tener nada a vivir con la preocupación de perder lo que se tiene.
He de decir que al principio no conseguí conectar con el autor debido a las continuas descripciones que hace del paisaje y su entorno (algo que, por otra parte, es característico de su estilo). Sin embargo, poco a poco va profundizando cada vez más en la psicología de los personajes y, fundamentalmente, de su protagonista: un niño que es dejado por su tío en manos de un señor para que se encargue de su educación.
Este hombre, Mateo Lesmes, le imbuye su pesimista manera de ver la vida. Moldea su espíritu haciéndole ver las ventajas de cortar todo vínculo afectivo con la gente, de ser una isla en medio del inmenso mar, pues es preferible no tener nada a vivir con la preocupación de perder lo que se tiene.
October 16, 2019
La primera novela de Miguel Delibes tenía un matiz muy sombrío. La pregunta central es qué esperamos de la vida: es mejor disfrutar los pequeños placeres de la felicidad transitoria, o más bien para escapar de las pérdidas evitar todas las alegrías posibles. Su tío deja a Pedro en el sótano del maestro Lesmes en Ávila; la sentencia es de siete años, y la filosofía del maestro sobre la vida no disminuye la soledad del huérfano. Sin embargo, un día llega Alfredo, quien es solo una carga para su madre en su relación extramatrimonial.
La novela se divide en dos partes: la primera mitad presenta la vida del joven Pedro cómo un estudiante en la casa del señor Lesmes, y la segunda cuenta de las decadas primeras de su edad adulta. De vez en cuando la alegría se cuela en la vida solitaria, introvertida y religiosa de Pedro, mientras las pérdidas le acechan en cada esquina.
En la primera novela de Delibes dibujó una gran imagen de una vida dura.
La novela se divide en dos partes: la primera mitad presenta la vida del joven Pedro cómo un estudiante en la casa del señor Lesmes, y la segunda cuenta de las decadas primeras de su edad adulta. De vez en cuando la alegría se cuela en la vida solitaria, introvertida y religiosa de Pedro, mientras las pérdidas le acechan en cada esquina.
En la primera novela de Delibes dibujó una gran imagen de una vida dura.
December 16, 2014
Novela "de inicio". No es de mis favoritas de Delibes, pero hay que reconocer su pulso y buen conocimiento de los recursos.
April 24, 2013
It would be great if you have a place to visit when you need to talk to yourself. Pedro has one.
November 8, 2013
Un libro pesimista como pocos. Magistralmente escrito, pero no apto para momentos especialmente sensibles.
July 5, 2018
Indudablemente bien escrito, la primera parte del libro me parece de lo más interesante, pero la segunda se me ha hecho bastante farragosa, con demasiada autocontemplación por parte del protagonista.
September 2, 2025
«Me percaté de que hay temperamentos que parecen agujas y temperamentos que parecen dedales. Temperamentos incisivos y temperamentos receptores. Imaginé que una sombra determinada cobija a los hombres en la vida lo mismo que en la muerte. Adiviné que la sombra que a mí me cruzaba el corazón era alargada y fina como la de un ciprés, idéntica a la que partía en dos la lápida de Manolito García...».
Un libro obsesivo, decadente y muy humano. No le doy más puntuación, entre otras cosas, porque siento que toda la profundidad que se le da al protagonista va en detrimento de otros personajes, especialmente de Jane, que simplemente encarna una "feminidad" que hace al personaje demasiado simple (como en tantísimas novelas escritas por hombres...).
Aun así, disfruté mucho de todas las reflexiones que se plantean en torno a los vínculos con otras personas y a la pérdida de éstas. Y las descripciones de Ávila, meticulosas y poéticas al mismo tiempo, me encantaron...
Muy recomendable :)
Un libro obsesivo, decadente y muy humano. No le doy más puntuación, entre otras cosas, porque siento que toda la profundidad que se le da al protagonista va en detrimento de otros personajes, especialmente de Jane, que simplemente encarna una "feminidad" que hace al personaje demasiado simple (como en tantísimas novelas escritas por hombres...).
Aun así, disfruté mucho de todas las reflexiones que se plantean en torno a los vínculos con otras personas y a la pérdida de éstas. Y las descripciones de Ávila, meticulosas y poéticas al mismo tiempo, me encantaron...
Muy recomendable :)
November 5, 2016
Tenía muchas ganas de leer este libro y me ha costado mucho terminarlo, incluso he estado a punto de abandonarlo varias veces. Y no es que esté mal escrito, todo lo contrario, Delibes hace un uso magnífico del lenguaje y demuestra su conocimiento profundo del castellano.
Ha sido el ambiente que describe y la moralina cristiana que rezuma todo momento lo que me ha resultado tan desagradable. Una moral trasnochada y rancia que hace que la obra se vea gris, triste y anticuada.
Han pasado muy mal los años para ella, se ha quedado como esas obras del franquismo que tuvieron éxito en su momento y ahora están justamente olvidadas, pero Delibes no se merece el olvido.
Ha sido el ambiente que describe y la moralina cristiana que rezuma todo momento lo que me ha resultado tan desagradable. Una moral trasnochada y rancia que hace que la obra se vea gris, triste y anticuada.
Han pasado muy mal los años para ella, se ha quedado como esas obras del franquismo que tuvieron éxito en su momento y ahora están justamente olvidadas, pero Delibes no se merece el olvido.
October 14, 2019
Siento no haber leído esta obra antes. Me ha encantado. Creo que Delibes deja en esta novela una filosofía acerca de cómo afrontar la vida; con o sin miedo a los acontecimientos venideros. Plantea la tesitura de mojarse o no con lo que dicta el corazón.
"La sombra del ciprés es alargada" se divide en dos historias perfectamente separadas por el autor que giran en torno al mismo tema.
Los capítulos son perfectos en longitud y me han permitido leerlo de manera pausada, además de dejarme un tiempo para reflexionar sobre la idea soterrada que cada uno encierra.
El final; perfecto.
Pues eso; que hay que leerlo.
"La sombra del ciprés es alargada" se divide en dos historias perfectamente separadas por el autor que giran en torno al mismo tema.
Los capítulos son perfectos en longitud y me han permitido leerlo de manera pausada, además de dejarme un tiempo para reflexionar sobre la idea soterrada que cada uno encierra.
El final; perfecto.
Pues eso; que hay que leerlo.
March 15, 2020
Llevaba tiempo queriendo leer la primera novela de Delibes. Debo decir que me ha gustado, pero la segunda parte se me ha hecho muy larga y su final me ha resultado particularmente descorazonador. Si hay una palabra con la que tuviera que describir el argumento de la novela sería "desasimiento", término que se reitera a lo largo del libro. Pedro, el protagonista, pasa su infancia en Ávila en casa de su maestro, don Mateo, que le enseña que es mejor no tener nada a tener algo y después perderlo. Esa visión pesimista marcará profundísimamente a Pedro, a quien veremos sufrir a lo largo de toda su vida por las enseñanzas de su maestro. Sin duda, me ha gustado mucho más el primer libro, en el que se narran los años de Pedro en Ávila, por resultarme más tierno y nostálgico. En el segundo, con un Pedro adulto de narrador, la trama se ha ido estancando y, a ratos, se me hacía repetitiva. La novela está muy bien escrita, pero solo recomiendo leerla cuando estés de humor para un libro triste de verdad.
Read
May 24, 2025realmente no lo he acabado, pero quiero que conste que no pude con la pena. me quedé justo a la mitad. sé que ahora vendrían cosas buenas y prometo retomarlo, pero de verdad que joder
October 1, 2025
Pedro significa piedra.
December 27, 2020
La escritura de Delibes es excelente. No cabe duda. Sin embargo, es un libro muy pesimista y descorazonador. No ha sido la mejor lectura para terminar 2020, desde luego
November 9, 2024
Lo que más me ha llamado la atención de esta novela es que Miguel Delibes la publicó con veintisiete años, sorprende un debut con lenguaje tan elaborado y un perfil psicológico del protagonista tan profundo, por muy desacertadas que parezcan a veces sus elecciones. Al estilo, al lenguaje y a las formas literarias no se le puede poner ni un pero, ya estaba aquí el maestro de las letras que sería después. Lo que me ha cabreado y mucho son las elecciones del personaje principal.
Arguye que el secreto de la estabilidad estriba en quedarse en poco, porque junto al tener siempre acompaña el temor a perder lo que que se tiene, lo que ocasiona tanta intranquilidad como el no ser nada. Propone vigilar nuestras conquistas terrenas tanto como a nosotros mismos con un sentido de ascética trascendencia muy difícil de encontrar hoy en día. El que no tiene nada que perder, dice, tiene más de la mitad del camino andado para ser valiente.
Aparece también una reflexión sobre la guerra y el eterno intento de ser los agredidos que se defienden y no como agresores. Visto ahora con perspectiva fue en su momento una declaración más valiente de lo que parece.
La pérdida del único amigo y este escenario de la guerra terminan por moldear el triste pesimismo conformista de nuestro protagonista que prefiere aislarse dentro de un caparazón social y personal para no sufrir el tener que desprenderse de las personas que se quieren. Triste remedio es el de dejar los sentimientos sin usar, como regalo que ni siquiera se desenvuelve de su papel, abrir la puerta al cariño de la demás no es solo bajar las defensas de un castillo inexpugnable, es la única forma de transitar por esta vida sin estar aislado como un ermitaño. Cerrar las puertas por miedo al sufrimiento deja también fuera la felicidad. Ni siquiera tiene un soporte teológico cristiano esta postura que deja a un lado al prójimo del Evangelio.
¡Qué gran irresponsabilidad no vivir intensamente la vida que se nos ha dado! Hay que aceptarla con lo malo y con lo bueno que trae y jugar lo mejor que podamos las cartas que nos deja en el tapete. El empecinamiento en no traicionar unos principios equivocados solo causa ahondar más en tus problemas, lo mismo que el miedo al sufrimiento futuro no solamente anticipa innecesariamente el dolor sino que pareciera que lo atrae. Al final qué es vivir sino darse a uno mismo la oportunidad de levantarse. Por muchas veces que te caigas y por mucho que pierdas por el camino siempre va a haber a dónde y a quién agarrarse si sabes mirar.
Si de algo me ha servido leer esta novela, que he terminado de leer montado en un avión lejos de la familia, es para valorar lo inconscientemente feliz que se puede llegar a ser en la rutina diaria, por mucho que venga bien desconectar de vez en cuando.
Arguye que el secreto de la estabilidad estriba en quedarse en poco, porque junto al tener siempre acompaña el temor a perder lo que que se tiene, lo que ocasiona tanta intranquilidad como el no ser nada. Propone vigilar nuestras conquistas terrenas tanto como a nosotros mismos con un sentido de ascética trascendencia muy difícil de encontrar hoy en día. El que no tiene nada que perder, dice, tiene más de la mitad del camino andado para ser valiente.
Aparece también una reflexión sobre la guerra y el eterno intento de ser los agredidos que se defienden y no como agresores. Visto ahora con perspectiva fue en su momento una declaración más valiente de lo que parece.
La pérdida del único amigo y este escenario de la guerra terminan por moldear el triste pesimismo conformista de nuestro protagonista que prefiere aislarse dentro de un caparazón social y personal para no sufrir el tener que desprenderse de las personas que se quieren. Triste remedio es el de dejar los sentimientos sin usar, como regalo que ni siquiera se desenvuelve de su papel, abrir la puerta al cariño de la demás no es solo bajar las defensas de un castillo inexpugnable, es la única forma de transitar por esta vida sin estar aislado como un ermitaño. Cerrar las puertas por miedo al sufrimiento deja también fuera la felicidad. Ni siquiera tiene un soporte teológico cristiano esta postura que deja a un lado al prójimo del Evangelio.
¡Qué gran irresponsabilidad no vivir intensamente la vida que se nos ha dado! Hay que aceptarla con lo malo y con lo bueno que trae y jugar lo mejor que podamos las cartas que nos deja en el tapete. El empecinamiento en no traicionar unos principios equivocados solo causa ahondar más en tus problemas, lo mismo que el miedo al sufrimiento futuro no solamente anticipa innecesariamente el dolor sino que pareciera que lo atrae. Al final qué es vivir sino darse a uno mismo la oportunidad de levantarse. Por muchas veces que te caigas y por mucho que pierdas por el camino siempre va a haber a dónde y a quién agarrarse si sabes mirar.
Si de algo me ha servido leer esta novela, que he terminado de leer montado en un avión lejos de la familia, es para valorar lo inconscientemente feliz que se puede llegar a ser en la rutina diaria, por mucho que venga bien desconectar de vez en cuando.
September 3, 2023
Este libro es impresionante en todos los sentidos posibles.
Me encanta la metáfora de que esté ambientado principalmente en Ávila, una ciudad amurallada que sin duda es un reflejo del personaje principal a quién vemos pasar de ser un niño que comienza a usar la razón moldeada por su maestro, a un adulto que tiene miedo a volver a sentir por las cosas que le ocurrieron en sus recuerdos y que hicieron que la sombra de su corazón fuera alargada.
Me han encantado todas las reflexiones sobre la vida, sobre no llegar a tener las cosas que quieres, sobre ni siquiera creer que debes desear algo más o sobre si es mejor perder a nunca intentarlo.
No sé si me equivoco al decir que al final el libro tiene cierto tono esperanzador porque creo que Pedro no se arrepiente de haber salido de su muralla, a pesar de que la vida literalmente no le ha dado ningún respiro y que cuando se lo ha dado esta se ha encargado de volverle a ahogar. Pero aún así, creo que acepta lo que le ha ocurrido y al final es capaz de mirar con afecto al pasado, con nostalgia más que con melancolía.
"Al mirar hacia el suelo comprobé que a la nieve la hace barro el contacto con el pie" como forma de explicar que sí, que lo bonito puede convertirse en algo feo cuando lo tocamos, pero sobre el barro puede volver a caer nieve porque creo que la vida es así: lo feliz y lo triste vienen de la mano, intentar vivir sin una cosa u otra es imposible, son dos caras de la misma moneda. Lo mismo ocurre con el éxito y el fracaso.
Me ha gustado muchísimo.
Me encanta la metáfora de que esté ambientado principalmente en Ávila, una ciudad amurallada que sin duda es un reflejo del personaje principal a quién vemos pasar de ser un niño que comienza a usar la razón moldeada por su maestro, a un adulto que tiene miedo a volver a sentir por las cosas que le ocurrieron en sus recuerdos y que hicieron que la sombra de su corazón fuera alargada.
Me han encantado todas las reflexiones sobre la vida, sobre no llegar a tener las cosas que quieres, sobre ni siquiera creer que debes desear algo más o sobre si es mejor perder a nunca intentarlo.
No sé si me equivoco al decir que al final el libro tiene cierto tono esperanzador porque creo que Pedro no se arrepiente de haber salido de su muralla, a pesar de que la vida literalmente no le ha dado ningún respiro y que cuando se lo ha dado esta se ha encargado de volverle a ahogar. Pero aún así, creo que acepta lo que le ha ocurrido y al final es capaz de mirar con afecto al pasado, con nostalgia más que con melancolía.
"Al mirar hacia el suelo comprobé que a la nieve la hace barro el contacto con el pie" como forma de explicar que sí, que lo bonito puede convertirse en algo feo cuando lo tocamos, pero sobre el barro puede volver a caer nieve porque creo que la vida es así: lo feliz y lo triste vienen de la mano, intentar vivir sin una cosa u otra es imposible, son dos caras de la misma moneda. Lo mismo ocurre con el éxito y el fracaso.
Me ha gustado muchísimo.
April 14, 2022
"La sombra del ciprés es alargada y corta como un cuchillo" y Delibes nos abre el corazón en canal con ella. Leí este libro por primera vez hace más de diez años y me marcó enormemente, en especial por mi cercanía a Ávila y a Castilla.
Ahora lo he releído con otros ojos y me ha emocionado tanto o más que la primera vez. El lenguaje de Delibes es magistral, los símbolos que elige, cómo recrea sensaciones con sus descripciones tan visuales. Los guerreros de la hornacina, los cuatro postes, la silueta redonda del pino, la fábrica de harinas, la nieve, siempre la nieve, Fany, los pececitos, la corbeta encerrada en una botella, el retrato, el anillo... Celebro todos y cada uno de ellos, porque se te enraizan muy profundo en el corazón.
Es un libro que te remueve por dentro, que te sume en el más hondo desconsuelo pero que, al final, celebra el recuerdo de los que nos acompañaron.
"Me sonreía el contorno de Ávila allá, a lo lejos. Del otro lado de la muralla permanecían Martina, doña Gregoria y el señor Lesmes. Y por encima aún me quedaba Dios"
Es una obra maestra del más grande Delibes.
Ahora lo he releído con otros ojos y me ha emocionado tanto o más que la primera vez. El lenguaje de Delibes es magistral, los símbolos que elige, cómo recrea sensaciones con sus descripciones tan visuales. Los guerreros de la hornacina, los cuatro postes, la silueta redonda del pino, la fábrica de harinas, la nieve, siempre la nieve, Fany, los pececitos, la corbeta encerrada en una botella, el retrato, el anillo... Celebro todos y cada uno de ellos, porque se te enraizan muy profundo en el corazón.
Es un libro que te remueve por dentro, que te sume en el más hondo desconsuelo pero que, al final, celebra el recuerdo de los que nos acompañaron.
"Me sonreía el contorno de Ávila allá, a lo lejos. Del otro lado de la muralla permanecían Martina, doña Gregoria y el señor Lesmes. Y por encima aún me quedaba Dios"
Es una obra maestra del más grande Delibes.
This entire review has been hidden because of spoilers.
February 18, 2020
Breve. Delibes no debería salir de la infancia. Solo un par de ideas: (1) es mejor no lograr algo que perderlo. Lo que cuesta es renunciar; (2) solo el hombre «neutro» no es desgraciado, el que evita toda relación con el mundo, con lo caduco, con lo finito. Pero el hombre aislado es una quimera, no existe en la realidad nada independiente, todo está coordinado // En la primera parte desarrolla ambas impresiones desde la óptica de un niño que empieza a descubrir el negro duro de la existencia: acierta. En la segunda el niño crece y la narración se vuelve torticera, revuelta y reiterativa: aburre. Delibes deja de querer decirnos algo a la mitad. Como prosista son todo elogios.
3.7/5
3.7/5
September 6, 2024
Es un libro triste de los que me dejan organizados los pensamientos y tranquila en el mundo. Tanto por el personaje, en el que me reconozco muy parcialmente (por su aceptación radical de las cosas), como por el estilo limpio y preciso que me deja una sensación muy fresca.
Delibes siempre en mi corazón porque cuando era pequeña "El camino" me enseñó la palabra alféizar que me gusta mucho.
3.5 la primera parte mi favorita
Delibes siempre en mi corazón porque cuando era pequeña "El camino" me enseñó la palabra alféizar que me gusta mucho.
3.5 la primera parte mi favorita
Displaying 1 - 30 of 274 reviews