Tu amado animal, tu compañero de vida, se ha ido… ¿y ahora qué? ¿Ya está? ¿Se ha terminado todo?
Tú sabes que no. Vuestro vínculo seguirá contigo siempre.
Muchas personas (más de las que imaginas) sienten a sus animales después de fallecidos. Sueños vívidos, comunicaciones, experiencias postvida… son habituales. Si sigues sintiendo a tu peludo a tu lado, es 100% normal.
O puede que el dolor esté haciendo que pases por alto esas sensaciones. También es normal. La muerte sigue siendo un tabú en nuestra sociedad, pero son ya tantas las pruebas constatadas de que la comunicación postvida existe, que es momento de hablar sin prejuicios ni miedos.
Por eso este libro ha llegado hasta ti.
Laura Vidal es auxiliar de veterinaria, acompañante en duelo, coach y doula del alma animal. Lleva muchos años ayudando a miles de personas con su método Huella emocional a asimilar el duelo por la pérdida de un compañero de cuatro patas.
Tras escribir Espérame en el arcoiris y Cuando ya no estás, aborda en Conmigo siempre preguntas
¿Qué ocurre después de la muerte?¿Los animales tienen alma?¿Pueden reencarnarse y volver?¿Es posible la comunicación postvida con un animal querido?Indaga en los testimonios de psicólogos, terapeutas, investigadores, expertos en procesos de duelo, comunicadoras animales y otros estudiosos. Conmigo siempre es un viaje hacia una nueva visión, con el convencimiento de que la evidencia científica es compatible con las creencias espirituales.
Un libro audaz, para lectores que se atreven a indagar fuera de lo establecido.
Este libro no me ha parecido tan fácil de leer, no me parece que enganche ni tenga un atractivo, son historias inconexas entre sí, sin mucha continuidad entre ellas. Me resulta más un libro de experiencias ajenas a la autora que una novela de ayuda. Aún así, me parece que alguna frase se puede rescatar del libro para brindar algo de paz, sosiego y esperanza. Pero como ayuda, prefiero los otros dos de los cuales ya subí una reseña. Además hay muchas cosas que resultan difíciles de creer, no solo por lo que se nos explica de pequeños y con lo que crecemos sino porque tengo la sensación de que no tiene sentido como se ha llegado a ciertas conclusiones de una manera científica, con lo cual me parece más una pseudociencia que pretende brindar cierta calma, pero que no son 100% demostrables. Puede ayudar a creer en otras cosas o tener una visión menos dolorosa, pero el lector tiene que tener la mente muy abierta y no darle demasiadas vueltas. Por otro lado, considero que algunas partes del libro son muy irresponsables por parte de la autora, ya que puede generar una idea de esperanza en el lector y llevarle a cometer algún acto que suponga una amenaza o un peligro para su salud.
Me encanta el tacto de Laura, es una persona muy sensible y empática y, debido a sus experiencias, sabe perfectamente cómo nos sentimos quienes hemos perdido a nuestro compañero animal.
Este es el segundo libro que leo y sin duda lo sentí como un cálido abrazo, una reafirmación de que todo estará bien.
Personalmente, nunca le he temido a la muerte pero sí a perder a mis seres queridos. Tal como ella menciona, la muerte se nos ha presentado como algo fatal, trágico, un punto final, en embargo no es así. Yo ya había entendido que la muerte es solo un puente (mi mamá es tanatóloga) pero entender esto no nos excenta del dolor y la tristeza. Debemos entender que esas emociones son normale sy las debemos vivir, todo tiene su tiempo y no importa cuántas veces regresemos a sentirlas, lo importante es no quedarse atado.
El duelo es un proceso complicado pero no debe ser devastador, debemos quedarnos con el amor porque ese nunca muere y hacernos a la idea de que, aunque en este plano esos seres hermosos ya no están con nosotros, la conexión pasa a otro nivel y nos toca conservarlo y regarlo para que siga floreciendo.
Algo que todavía me cuesta trabajo aceptar es la reencarnación dado a que no creo en ella, creo en la vida después de la muerte, en las familias álmicas pero no en la reencarnación. Sé que me corresponde leer más al respecto para poder formar una mejor opinión pero por el momento me mantengo con esto.
En fin, este libro es un curita para el corazón, ¡no se lo pierdan!
Me ha gustado mucho. Este libro ha llegado de casualidad a mi vida justo cuando mi compañero canino falleció el día 10 de este mes. Es muy reconfortante leer las experiencias, estudios y opiniones escritas en estas páginas. Además, no solo ofrece un apoyo emocional/espiritual sino que indaga en lo que puede haber tras la vida, una fase de transición hacia un nuevo plano. Muy recomendable, y no hace falta leerlo solamente si has perdido a un compañero. Si no en cualquier momento de tu vida.
En este momento de despedida con mi gatihijo, que todas esas preguntas que necesito sean al menos dibujadas no os podéis imaginar cuanto ayudan. La muerte aquello en lo que la vida continua... 💖
Una tablita de empatía, al dolor de la perdida de un animalito de compañía, solo el que lo ha vivido, puede entenderlo, ellos son un amor que perdurará siempre en nuestros corazones.