A lo largo de los siglos, hombres y mujeres han sido arrastrados por el inevitable impulso de poseer a quien parece ostentar el sentido de la vida. Y de esta atracción impetuosa no se libran los grandes forjadores del destino de una nación, ¿qué apetitos y obsesiones sirvieron de causa para algunos de los protagonistas de la historia de México? Con su singular estilo, donde confluyen una rigurosa investigación y la maestría narrativa, Francisco Martín Moreno hurga en la memoria de nuestro país y se adentra en un viaje íntimo hacia el corazón y la alcoba de la monja, el dictador, el revolucionario, el político reformador, el emperador y el líder de la Independencia. Un libro provocador que revela la condición humana y su inevitable rendición ante la pasión amorosa.
Escritor, novelista, articulista y conferencista mexicano.
Realizó sus estudios en el Colegio Alemán Alexander von Humboldt, cursó la licenciatura en Derecho y obtuvo un doctorado en la Academia Mexicana de Derecho.
Como articulista ha publicado más de 2000 columnas en diferentes periódicos y revistas. Ha colaborado para los periódicos Novedades, Excélsior, El País y revistas como Milenio y Cambio. Se ha especializado en el género de la novela histórica en temas fundamentalmente políticos, mezclando en sus libros episodios de ficción.1 Con estilo siempre ameno, además de una prosa clara y fluida, Francisco Martín Moreno ha logrado un amplio reconocimiento como periodista y escritor.
Pueden contarse entre sus premios y distinciones los siguientes: en España recibió el Laurel de Oro a la Excelencia Literaria por su publicación Las cicatrices del viento, y en México ha recibido el Premio Nacional de Periodismo en 1994, 1995, 1996, 1997 y 1998 el cual es otorgado por el Club de Periodistas de México A.C.
Un día de esos en los que no tenía mucho por hacer me fui a Plaza Río (Tijuana) al cine. No había función y decidí dar una vuelta por la Feria del Libro. Caminando me encontré con grupo de gente escuchando a un señor canoso muy parecido al personaje de “Doc” de Volver al Futuro (con esas greñas de científico loco). Me quede escuchándolo, me atrapo la historia. Al final compre el libro (lo bueno que traía dinero). Como todavía tenía tiempo hice fila para que lo firmara. Al llegar con él me vio y me dijo: “No estas muy chiquita para leer el libro”, “tengo 25 años” le dije. Me lo firmó, me agradeció por interesarme. Lo típico creo.
En las primeras 10 páginas leídas comprendí por que me preguntó la edad. La novela es muy explícita en las pasiones que viven sus personajes. Confieso que me envolvió cada historia. Desde el inicio.
Así refresque mis conocimientos generales de la historia de México y me desengañe más de la historia oficial.
A los que les gusta la historia léanla. A quienes no les guste, léanla como novela. Pero lean
• De lo sublime a lo ridículo no hay más que un paso…Aunque estuviera permitido jugar con los individuos, no se debe jugar con las naciones, porque Dios las venga. Carlota de Habsburgo. La emperatriz.
• Unirme a un enemigo tuyo no ha sido para ofenderte; al contrario, he deseado ser la paloma que con la rama de olivo calme las tormentas políticas de mi país. Carmelita, esposa de Porfirio Díaz. En una carta dirigida a Lerdo de Tejada.
• A la voz de preparen, apunten, me detuve un momento, unos brevísimos instantes, para llenar mi mente con una idea con la que había decidido irme al otro mundo: Francisca, mi amor, mi ilusión, mi razón de ser. Morelos antes de ser fusilado.
• Afirmo mi creencia que es también mi convicción, de que a la mujer de hogar no deben importarle los extravíos amatorios del esposo si en el seno del hogar, si en el santuario de su misma vida, la esposa es querida y respetada. Luz Corral de Villa
• En su momento las adoraba y estaba dispuesto a dar lo que juera por ellas, pero qué haces si cada día te encuentras una más hermosa que la de ayer?. Francisco Villa
• Quien no ha padecido la sed agónica de tocar, de mirar, de imaginar, de palpar a la amante, la necesidad apremiante de la presencia, ha pasado la vida en blanco. José Vasconcelos.
o Ser Mujer, ni estar ausente No es de amarte impedimento; Pues sabes tú, que las almas Distancias ignoran y sexo. Sor Juana Inés de la Cruz
Librito entretenido pero completamente chacotero, sensacionalista, y con un dizque basamento histórico para resaltar escenas de cama de algunos célebres de la historia de México. Algunos pasajes son de una prosa bastante chabacana. Si te gusta el morbo, adelante, si te gusta la historia, ni te asomes.
Comencé a leer este libro con bastante escepticismo, casi por imposición. Sin embargo, línea tras línea el autor logró atraparme, seducirme y llevarme a los rincones más insospechados del deseo de nuestros grandes personajes.
Aunque en cada relato es claro que el autor se permite libertades al describir los sentimientos y pensamientos de los personajes principales, es imposible descartar que Morelos haya sido capaz de amar con una pasión desmedida, o que Don Porfirio considerara que al único al que podría rendirle cuentas es a Dios, o incluso, es hasta placentero pensar en las sesiones de alcoba de Sor Juana. Una de las más gratas sorpresas fue encontrar que cada historia tiene un narrador diferente, y pronto me descubrí a mí misma tratando de adivinar quién podría ser el próximo narrador.
Sin duda Arrebatos Carnales I fue una grata sorpresa en mi lectura mensual, un libro que queda atesorado como favorito y una manera pasional de reconocer nuestra historia nacional.
Es una pena que no ofrezcan calificaciones por debajo de cero. No terminé de leerlo (leí un par de capítulos), pero ni aunque el resto de este libraco hubiera sido una obra maestra de la literatura la calificación podría subir. Este libro es una basura monumental y el que sea tan popular habla muy mal de lo que mucha gente gusta de leer (entiendo que el libro y los que le siguen es un "best-seller"). El problema no es el tema central. Cada quien sus gustos y de ser una novela porno barata no me hubiera tomado la menor molestia. Lo que me causa verdadero estupor y alarma es que en una gran mayoría de los comentarios leídos, la gente dice 'estar feliz de, finalmente, haber leído historia de México de forma amena' y hasta se preguntan por qué no serán tan divertidos ("atrapantes", dice alguien) los demás libros de historia. También dicen que está muy documentado (dudo mucho que alguien haya comparado la fuente contra el resultado, y el autor tiene el buen cuidado de no citar exactamente qué sacó de dónde). He leído libros con temática semejante, pero donde el tono del autor es muy cuidadoso, cita sus fuentes para cada cosa que dice que requiera cita, donde deja muy claro qué es lo que parece más bien especulación y qué es lo que parece ser cierto. Donde ni por "efectos dramáticos" o amenidad el emperador Maximiliano es tratado de "Maxi" (asumo que esto hace "realista" la posible homosexualidad del sujeto), según el autor pone en boca de los amantes.
He leído también historia novelada donde el tono se cuida como en la literatura de verdad y se busca una coherencia en acciones y diálogos con lo que sí se sabe del personaje y la situación, y donde al final se aclara debidamente qué se SABE que ocurrió, qué es, en cambio, especulación o una forma posible de llenar los espacios vacíos.
"Arrebatos carnales" parece simple literatura barata, que puede ser fluida y llamar la atención pero con un valor de cero más allá de eso. No cabe duda que vender basura diciendo que te es de mucho provecho es una clave de éxito, pero sólo buena para el vendedor.
En fin. Mi recomendación sincera: NADIE que lea este libro presuma por allí que aprendió sobre historia de México al leer este bodrio, y por las dudas yo no presumiría de haberlo leído siquiera. Eso es una profunda falta de respeto a cualquier historiador medianamente serio. Que cada quien se divierta leyendo lo que guste pero que no salga con que en este caso además aprendió historia. Que el autor diga que "la mayoría de los historiadores son mojigatos y no hablan de las cosas que él 'se atreve'" es su único atrevimiento real, queriendo utilizar contra los demás historiadores su seriedad y con ello, de pasada, quedar él mismo como muy osado y defensor de la verdad.
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Claro ejemplo de que el morbo vende. Nada enriquecedora la lectura, decepcionante si el lector busca aprender algo valioso sobre la historia de México.
Impresionada de lo mucho que me gustó un libro que hable sobre algunos personajes icónicos de México con su debido contexto histórico de la verdader, sin pintártelo lindo, no lo que enseñan en la escuela. La forma en la que cada uno es relatado de diferente manera lo hizo más entretenido y personal, esos trapos sucios de cada uno de ellos, su vida y la razón por la cual los llevó a cada decisión tomada.
La constante idea de que al momento de la creación literaria, ésta se puede sustentar mediante datos verídicos, es total y completamente factible, aunque también peligroso. Tomar un referente científico para el desarrollo literario ha sido un proceso inherente dentro de la historia de la literatura. Para el libro en cuestión llamado Arrebatos Carnales del autor: Francisco Martín Moreno, cuyo objeto gira en torno a seis personajes históricos de gran relevancia: Porfirio Díaz, José Vasconcelos, Maximiliano de Hadsburgo, Francisco Villa, Sor Juana Inés de la Cruz y José María y Morelos. Inútil tratar de replicar en esta reseña la importancia de tales personajes en la historia general de México. Ahora, el objetivo de este libro está enfocado en un punto algo particular: las pasiones que encerraron a estos personajes a lo largo de su vida; entreveres amorosos que buscan ser resueltos mediante la supuesta búsqueda “inquisitiva” en datos bibliográficos y la misma ficción encausada por el autor. De manera general, el libro cumple a medias, entretiene al lector con pequeñas semblanzas del personaje dentro de cada historia, mientras resuelve con situaciones “de alcoba”. No debe olvidarse del morbo que siempre llamará la atención del lector -no se diga de la editorial-, siempre consciente de lo que vende y lo que no. Aún así, el punto fuerte se encuentra en las mini biografías dentro de la historia de cada personaje, ya que apunta a un público en general, dejando de lado lo científico y objetivo que nos puede proveer, por ejemplo, un Porfirio Díaz. Una biografía política de Paul Garner o el acucioso Francisco Villa de Friedrich Katz. Nos encontramos ante un libro que puede dar una idea general histórica de estos personajes, además de que rescata de manera adecuada el contexto de cada época, un punto que se le reconoce al autor. Sin embargo, se llega a abusar de la llamada ficción, que en cualquier novela histórica sería aceptable, pero este último término no entra dentro de esta obra, ya que Martín Moreno explora la historia dentro de lo objetivo y lo subjetivo, ya que además de varias citas bibliográficas confusas (no deje de verse una que otra cita referentes a páginas dudosas de Internet), no interesa al autor explicar que gran parte de las situaciones sentimentales son obra de su propia imaginación, cuestión que podría perjudicar a un lector ávido de conocimientos históricos. A final de cuentas el autor cumple su cometido que es entretener y, como tal, este libro debe ser visto de esa manera, ya que tomarlo en serio, sería un error que involucraría una equivocada visión de tan importantes personajes históricos. De esta manera, esperemos que así como se difunde de gran manera este tipo de literatura (las ventas y los sucesivos arrebatos II y III no mienten), se agradecería también esta promoción en ciertas investigaciones históricas, siempre derrotados en lo que se refiere a su llegada a un público en general
Las tres estrellas son por el buen trabajo de investigación. Pero en cuanto a la redacción y estilo literario, le doy solo 2 estrellas. En el intento de ser tan pasional, tan erótico, abusa de estos elementos y facilmente se vuelve tedioso. Dificilmente leería la segunda parte.
No es particularmente bueno, los datos históricos al parecer no importan, importa más con quién hayas tenido encuentros sexuales que lo que hayas hecho.
Excelente recomendación que recibí ya que el título no me hubiera animado a comprarlo. El autor nos lleva a través de varios personajes historicos de México y los desnuda frente a tus ojos para complementar sus logros con sus fortalezas y debilidades en el manejo de sus vidas amorosas y familiares. Cada retrato lo complementa con histrias pasionales, caracterizando la sexualidad de cada personaje. Definitivamente un abre ojos de como tus logros publicos pueden distar de tu felicidad personal. Una constante a traves de la historia de los personajes es el papel devastador de la iglesia en la ignorancia y retraso de nuestro pais. Lo cual tristemente sigue reflejado a través de los siglos y que no permiten a nuestra a sociedad del adoctrinamiento, sumision y pobreza de pensamiento. Altamente recomendado, para aprender otro ángulo de la historia de Mexico. Como sugerencia, un refrescamiento de la historia y contexto de cada personaje se recomienda para no quedar solamente con la version del caracter y logros que el autor describe. Una lectura recomendada para todos los mexicanos que quieran entender nuestro presente con claridad de como nos forjo nuestro pasado y que seguimos encadenados a muchos de nuestros errores históricos.
Los disfrute mucho!! Desde la primera palabra hasta la última, me declaro sorjuanista, y es que cómo no hacerlo, semejante mujer en pleno siglo XVII!!!
Cómo mujer intelectual que soy, la empatía que sentía al leer la historia de esta mujer intelectual, me hace sentir acompañada!!
Que gran mes tuve con este libro, no lo podía soltar, estás interpretaciones me hacen amar la historia, y poner en contraste la historia que cuenta la SEP.
Estoy fascinada!!! Ahora me iré directo a las referencias!!!
Eso tiene mucho mérito!! Las novelas nue suelen tener bibliografía, así que este detalle para los lectores, le da mucho puntos a este escrito
Los hombres nos acusan de aquello de lo que nos convencieron hacer; nos incitan al mal para, acto seguido, reclamarnos haber incurrido en el mal; nos seducen para acusarnos de liviandad; parecen crear un monstruo para Lugo asustarse de su obra; empañan el espejo para alegar qué no se ve claro el reflejo; se si nos tratan mal y se burlan si se les quiere bien; a la que deja es casquivana y la que los rechaza es ingrata. ¿Quién es más culpable, el que paga por pecar o la que peca por la paga? ¿Como relacionarse con los del se o puesto cuando se piensa de ellos en los términos antes expresados?
De las primeras lecturas que tuve en la universidad. Si, gracias, Francisco, por mostrarnos la historia real y enseñarnos que los personajes de la historia de México no son todos hé(roes)teros, pero siento que toca todo con mucho morbo y/o vulgaridad. Nada placentero leer como sor juana se tijereaba a la virreina, ni tampoco leer la independencia con la Güera Rodriguez plasmando los primeros registros de un “what 0 pussy does to a mf”. Mucho morbo y escenas de sexo prolongadas innecesariamente
Vaya que me quedé sorprendida, conocer la historia de personajes mexicanos desde otra perspectiva, abrir los ojos ante la verdad que ha sido ocultada, y no fue la vida privada lo que me sorprendió más, pues todas las personas guardan secretos, sino la falsedad de instituciones políticas y religiosas que por cientos de años han sido la característica que los han llevado a cometer errores grandes en la historia. Un libro revelador, y a su vez con una lectura intrigante.
Es un libro que te atrapa con la serie de historias cortas personales de personajes de la historia de México, planteando el lado humano y pasional que muchas veces no se refleja en los libros tradicionales de historia. Tal vez no se refleje al 100% de manera historica, por lo que hay que verlo solo como lectura, novelas cortas. Muy entretenido.
Mi primer libro que lei sobre ficcion de historia mexicana, pero que me oriento a elegir mi genero favorito para leer. Excelente para las personas que tienen la curiosidad de saber que pasaba con las relaciones amorosas de diferentes personajes historicos de México.
No es una gran novela como otras de este autor pero tengo que decir que el morbo que envuelve a este libro te mantiene picado de principio a fin. Un libro que se lee en pocos días y que señala algunos arrebatos humanos que tienen en algunos casos consecuencias en la vida pública nacional. Vale la pena leerlo.
Me gusto mucho el libro. Cuenta historias que no son muy conocidas de los personajes más influyentes en la historia de México, tales como Maximiliano, Porfirio Díaz, Pancho Villa, Sor Juana, Vasconcelos. Muy recomendable para quienes gustan de la historia.
Novela pasional de los amoríos de diferentes personajes históricos de Mexico. Lo que no me gusto es que al ser novela, deja la puerta abierta a falacias e inconsistencias con la historia real de Mexico y su bibliografía no es tan detallada
In contrast to the pious academics who de-sex historical figures and focus on their altruistic or megalomaniacal goals, bestselling author Moreno irreverently turns his attention to their romantic passions. He embellishes archival information with imaginative and plausible first-person narrative to create a gripping work of historical (and occasionally erotic) fiction. This is revisionist history at its most titillating. The narrators of each chapter are either the protagonists themselves or wry confidants who interweave emblematic events with the relationships in the lives of individuals central to Mexican history, perhaps from least to most revered: Emperor Maximiliano and Carlota, dictator Porfirio Díaz, liberator priest José María Morelos, revolutionary Pancho Villa, politician José Vasconcelos, and finally (courageously), writer and nun Sor Juana. Serious readers seeking to discern the effects of personal relationships on the historical trajectory of a nation will likely be disappointed, but fans of historical fiction will be tickled. The sympathetic and intimate presentations of Maximilian's bisexual affairs, Díaz's machinations to marry his niece, Father Morelos' concubine, etc. lead us to view the foibles and the passion as an indispensably delicious part of the human drama. Likely to delight anyone with interest in Mexican history or historical fiction, this is recommended for bookstores and public libraries.