The Good Conscience is Carlos Fuentes's second novel. The scene is Guanajuato, a provincial capital in Central Mexico, once one of the world's richest mining centers. The Ceballos family has been reinstated to power, and adolescent Jaime Ceballos, its only heir, is torn between the practical reality of his family's life and the idealism of his youth and his Catholic education. His father is a good man but weak; his uncle is powerful, yet his actions are inconsistent with his professed beliefs. Jaime's struggle to emerge as a man with a "good conscience" forms the theme of the book: can a rebel correct the evils of an established system and at the same time retain the integrity of his principles?
Carlos Fuentes Macías was a Mexican writer and one of the best-known novelists and essayists of the 20th century in the Spanish-speaking world. Fuentes influenced contemporary Latin American literature, and his works have been widely translated into English and other languages.
Fuentes was born in Panama City, Panama; his parents were Mexican. Due to his father being a diplomat, during his childhood he lived in Montevideo, Rio de Janeiro, Washington, Santiago, and Buenos Aires. In his adolescence, he returned to Mexico, where he lived until 1965. He was married to film star Rita Macedo from 1959 till 1973, although he was an habitual philanderer and allegedly, his affairs - which he claimed include film actresses such as Jeanne Moreau and Jean Seberg - brought her to despair. The couple ended their relationship amid scandal when Fuentes eloped with a very pregnant and then-unknown journalist named Silvia Lemus. They were eventually married.
Following in the footsteps of his parents, he also became a diplomat in 1965 and served in London, Paris (as ambassador), and other capitals. In 1978 he resigned as ambassador to France in protest over the appointment of Gustavo Diaz Ordaz, former president of Mexico, as ambassador to Spain. He also taught courses at Brown, Princeton, Harvard, Penn, George Mason, Columbia and Cambridge.
--- کارلوس فوئنتس در ۱۱ نوامبر ۱۹۲۸ در پاناماسیتی به دنیا آمد. مادرش برتا ماسیاس ریواس و پدرش رافائل فوئنتس بوئهتیگر است. پدر وی از دیپلماتهای مشهور مکزیک است. وی سفیر مکزیک در هلند، پاناما، پرتغال و ایتالیا بود.
دوران کودکیاش در واشنتگتن دی.سی. و سانتیاگوی شیلی گذشت. فوئنتس در دانشگاه مکزیک و ژنو در رشتهٔ حقوق تحصیل کرد. او به زبانهای انگلیسی و فرانسه تسلط کامل دارد.
آثار * مرگ آرتمیوکروز، ۱۹۶۲ * آئورا، ۱۹۶۲ * زمین ما، ۱۹۷۵ * گرینگوی پیر، ۱۹۸۵ * ملکهٔ عروسکها * آسوده خاصر، ترجمهٔ محمدامین لاهیجی. * مرگ آرتمیو کروز، ترجمهٔ مهدی سحابی. * آئورا، ترجمهٔ عبدالله کوثری. * سرهیدا. * خودم با دیگران (به تازگی با نام از چشم فوئنتس) ترجمهٔ عبدالله کوثری.
--- Carlos Fuentes Macías fue un escritor mexicano y uno de los novelistas y ensayistas más conocidos en el mundo de habla española. Fuentes influyó en la literatura contemporánea de América Latina, y sus obras han sido ampliamente traducidas al inglés y otros idiomas.
Fuentes nació en la ciudad de Panamá, Panamá, sus padres eran mexicanos. Debido a su padre era un diplomático, durante su infancia vivió en Montevideo, Río de Janeiro, Washington, Santiago y Buenos Aires. En su adolescencia regresó a México, donde vivió hasta 1965. Estuvo casado con la estrella de cine Rita Macedo de 1959 hasta 1973, aunque era un mujeriego habitual y, al parecer, sus asuntos - que se ha cobrado incluyen actrices como Jeanne Moreau y Jean Seberg, su llevados a la desesperación. La pareja terminó su relación en medio del escándalo, cuando Fuentes se fugó con un periodista muy embarazada y entonces desconocido de nombre Silvia Lemus. Se casaron finalmente.
Siguiendo los pasos de sus padres, también se convirtió en un diplomático en 1965 y sirvió en Londres, París (como embajador), y otras capitales. En 1978 renunció al cargo de embajador en Francia en protesta por el nombramiento de Gustavo Díaz Ordaz, ex presidente de México, como embajador en España.
No me dejó un buen sabor, sin que eso signifique que es una mala novela, más bien todo lo contrario, a veces la literatura nos enseña una parte del mundo que no nos gusta ver, o que tal vez nos revive algo de nosotros que no queremos reconocer. El fin de la inocencia, el claudicar un ideal para vivir en el conformismo, la aceptación de que somos parte de un gremio y que debemos ser consecuentes con el lugar en donde el destino nos puso. No es algo de ensueño, ni de pesadilla, es más bien la realidad...
Leí el preámbulo del libro, y predije que llegaría un momento al leer el libro en donde encontraría su conexión con el resto de la novela. Como seis o siete veces, durante el inicio de mi lectura, regresaba a ese preámbulo, sin encontrar aún ese vínculo que me hiciera suficiente sentido. Al regresar, releía cada vez con placer aumentado la descripción de Fuentes sobre la casa de cantera de la familia Ceballos, recordaba la genealogía de la familia, comparaba sus generaciones, sus comportamientos y motivaciones. Cuando llegué a Jaime, ya no volví más al preámbulo. Había olvidado incluso de qué trataba esa primera hoja, concentrándome ahora en Jaime, en sus inquietudes, en sus batallas y frustraciones. Me sentí incluso identificada con él, y luego me ví atrás de él; rebasada por su capacidad de enfrentar. Capacidad de la cual yo carecí a su edad y que me hizo ver mi conciencia más cercana a los Barcárcel que a Jaime. Elevé mis esperanzas en que existieran adolescentes como Jaime, y despúes el regaño del Padre Obregón lo sentí como si ambos compartiéramos la misma decepción por Jaime. Entonces es ahora cuando entiendo que el preámbulo conecta sólo con el fin de la novela: el drama de ver a Juan Manuel partir; y de Jaime regresar a esa casa de cantera en Guanajuato, albergue de las buenas conciencias.
این کتاب با عنوان "آسوده خاطر" توسط محمد امینی لاهیجی به فارسی ترجمه شده و در سال 1364 توسط نشر تندر منتشر شده است. از کارلوس فوئنتس کتاب دیگری با نام "خودم و دیگران" توسط عبدالله کوثری به فارسی ترجمه شده که مجموعه مقالات نویسنده در باره ی خودش ، سروانتس، گوگول، لوئیس بونوئل، بورخس و مارکز است.
Leerlo y saber que se ha crecido en esa ciudad, sin que necesariamente fuera Guanajuato; reconocerlos sin que fueran los Ceballos; recordar su rostro, sin que fuera Jaime.
Las buenas conciencias sólo me recordó a él y a su familia. Sus aires de superioridad intelectual, sus desdén racial, su humildad falsa y su bondad de dientes para afuera.
Recordé las burlas a espaldas de sus amigos y las comparaciones de quien merecería ser su esposa y quienes no cumpliríamos el requisito. Volví a sentir esa sensación de miseria que una persona siente cuando ruega por un abrazo, cuando se sabe el amor es falso y sólo se es alguien de paso, alguien que se quiere "mientras llega alguien más".
Recordé su hipocresía al ir a misa aunque él ya no era creyente. Supe que se casó por la iglesia: qué mayor señal de que hay que cumplir con el que dirán y no con lo que "qué voy a hacer".
Todo ello recordé, porque este libro describe con perfección cómo un católico se convierte en mocho, en eso que alguna vez alegó no querer ser, cómo se alejan el verdadero camino y al hacerlo, nos engañan a todos.
No me gustó La muerte de Artemio Cruz; leí Aura un tanto intrigada y el cuento del Chac Mool era lo único que me convencía, pero Las buenas conciencias me hizo arrepentirme de no dejarle una rosa en su tumba y decirle que me disculpe la tardanza de leerlo, que no vuelvo a dudar de él y que no dejaré de agradecerme de recordarme de que la que me salvé.
Las buenas conciencias (1959) es la segunda novela escrita por Carlos Fuentes, en esta seguimos de cerca la huella histórica de Los Ceballos, una de las grandes familias de Guanajuato, México; quienes cuentan con un legado y con un porvenir prometedor. Jaime Ceballos, adolescente y último descendiente de la familia se enfrenta con la carga de su apellido y con el peso de la “consciencia cristiana” que rodea su transformación a hombre.
Opinión: Antes que nada, me gustaría decir que es mi primera lectura de Fuentes; la comencé esporádicamente, sin saber mucho sobre la obra del autor. Como ya habrán visto la calificación no es buena del todo, y es qué, creo que esta novela en general no termina de “cuajar”. Me aventuraría a decir qué es un trabajo inmaduro ya que fue de los primeros escritos del autor, pero quizá me equivoque al hacerlo ya que he escuchado muy buenos comentarios de su primera novela, La región más transparente. La novela consta de 10 capítulos, los tres primeros son un contexto de como se posiciono la familia como un emblema de la ciudad, nos introducen a los antepasados del protagonista de la obra: padres, abuelos, tíos, etc. Esta parte la disfrute porque se sintió como una especie de recordatorio del curso de historia que uno veía en la primaria, vemos nombrarse a grandes figuras como: Porfirio Díaz, Cárdenas, Calles, Villa; así como los acontecimientos que azotaron el entorno de Los Ceballos. Todo esto te envuelve en el aura de la novela, algo que Fuentes hace muy bien. Ahora, aquí hay varios puntos a mencionar, a pesar de que no me disgustaron estos capítulos, me parece que destinar casi un tercio de la obra al contexto esta de más, llevas ya una buena cantidad de páginas y no sabes todavía la trama principal del libro, se podría decir que el hilo principal inicia con la introducción de Jaime Ceballos. Otro detalle es que los personajes mencionados en el contexto son muy enaltecidos y hacen que los protagonistas se vean como una prenda deslavada, un vestigio de la grandeza anterior: Qué distinto… lo que somos de lo que pudimos ser. Estos aspectos me parecen interesantes y creo que son la causa de que considere que la novela no termine de despegar, por ejemplo: el que los antepasados sean una figura enorme da ganas de escuchar más de ellos, de que la historia les pertenezca; pero lo que dejan es un hueco muy difícil de llenar y esto deja una sombra permanente sobre los protagonistas: Jaime Ceballos repetía su nombre en voz baja. Ceballos. ¿Por qué se llamaba así? ¿Quiénes y para qué se habían llamado así antes que él? Para mi gusto, uno se queda partido por lo antes mencionado, se intenta hacer mucho con poco, poco porque son 190 páginas y me parece difícil lograr un balance entre el tercio que se basa en el pasado y los dos que pertenecen al presente. Brincando a la trama principal, me pareció fluida y nada tediosa, si bien es simple creo que para nada es aburrida. Considero que es un texto enfocado en esa metamorfosis de adolescente-adulto por lo que pienso que podría ser más indicada para el publico joven y más para el guanajuatense (jajaja). Ese conflicto interno que envolvía a Jaime Ceballos y lo forzaba a crecer me trajo varios recuerdos a viejas lecturas de Herman Hesse, creo que por ese lado conecte un poco más, también por las menciones de varios autores que me son familiares: Nietzsche, Stendhal, el Andréiev de Sachka Yégulev, Dostoievsky, Dickens, Balzac, Max Beer, Michelet, eran sus interlocutores cotidianos, y Calderón, Tirso, Berceo. No obstante, el muchacho no podía perder la conciencia de su origen y de los problemas diarios de esa raíz, decidía con mayor ardor conjugar las ideas que descubría con la situación que conocía. Jaime Ceballos como muchos otros jóvenes atormentados encontraba refugio en los libros, se nutría de lo aprendido y comenzaba a juzgar los actos ajenos, soñando con poder responderle a sus guardianes y echarles en cara su hipocresía. Los libros eran suministrados por su humilde amigo Juan Manuel (a quién la cita anterior hace referencia), una de las figuras presentes en la novela que motivó a nuestro protagonista enseñándole una cara distinta de la realidad, creciendo junto a el y siendo su único apoyo. Como esta figura vemos algunas otras, todas fungen como un hincapié en el desarrollo de Jaime, su hogar no carecía de autoridad, pero si de figuras paternales, es aquí donde las figuras llegan a llenar esos huecos: tenemos a la primera persona que lo visualizo como un “hombre”, Ezequiel Zuno; a su igual, Juan Manuel; y a aquella mujer abandonada que jamás pudo conocer y confrontar: su madre. Todos ellos cumpliendo un rol específico y ayudando a Jaime a comprender lo que en realidad era una relación humana: qué todos somos víctimas y cómplices de nuestro contexto. Otro tema siempre presente es la religión, aquí Carlos Fuentes escoge muy bien la cita con la que inicia el libro: Los cristianos hablan con Dios; Los burgueses hablan de Dios. – Soren Kierkegaard. ¿Qué hace a un buen cristiano? Es una de las preguntas que continuamente se hace Jaime, su hogar y su círculo no le entregan más que inconsistencias: porque se juzga; porque darle más importancia al vicio que la virtud; porque pretender, para alguien lleno de estas cuestiones no queda más remedio que culparse y autoflagelarse, cargar con la culpa considerándose igual que Jesús. Aquí es donde se exhibe la respuesta al conflicto de nuestro joven, el rostro de la realidad mostrado por las figuras que admiró es tan chocante con la propia, que necesita tomar una decisión, ya que elegir la realidad planteada por los “extranjeros” es renunciar a La buena conciencia y allí es donde Dios habita, ese camino no tiene certidumbre y tomarlo sería romper a martillazos la existencia conocida, algo que Jaime Ceballos no esta dispuesto a hacer. Jaime decide seguir el camino del orden (toma la píldora azul), el señalado por sus guardianes: Cristo quiere a los justos, pertenece a los hombres de bien, a la gente decente, a las buenas reputaciones. Y con esta elección La adolescencia había terminado.
Suppose your father is the black sheep in his Mexican bourgeois family and he marries a lower class woman, who becomes your mother. Then your father's sister, who has dutifully married a suitable but impotent man, decides to take you and raise you as her own, relegating your father to the background and your mother back to the slums. You are brought up in Catholic piety close to the bosom of your aunt who is called Mama Asuncion. As you reach puberty you begin to figure out who's who in your home.
So Jaime Ceballos, sole heir to the family's wealth, spends his teens in secret rebellion and religious confusion. The whole story of this novel is the price Jaime must pay to grow up into a young man with a "good conscience."
The tale of an idealistic youth being won back into the fold of respectable, if essentially dishonest family tradition, is not new nor is it confined to any particular culture. What stands out in Fuentes's second novel is the vivid depiction of both Jaime's inner life and the environment of a provincial Mexican city.
The dangerous brew of Spanish descendants, Catholicism, native Indians, and class warfare, produces a colorful yet cautionary example of the ways nothing ever changes but nothing stays the same.
یک کتاب خوب و نایاب از فوئنتس که خیلی وقت هست چاپ نمیشه با ترجمه ای خوب و اینکه جاهای ممیزی نقطه چین گذاشته شده و با احترام به کتاب آئورا و ترجمه آقای کوثری من این کتاب رو برای ورود به دنیای فوئنتس بهتر میدانم تا آئورا البته اگر یافتید پی دی اف رو دارم اگر خواستید
“Toda gran acción es extremista cuando un hombre grande la emprende. Y solo cuando se ha cumplido les parece grande a los mediocres.”
Frase que rescato de un libro que por temática y mensaje me desagrado de principio a fin. No dudo que esté escrito con una prosa espectacular y por eso lo califico con dos estrellas.
Tampoco sé si era intención del autor, pero el final del libro me resultó molesto por el mensaje que transmite. Abandona tus aspiraciones y déjate llevar por el orden de la vida. Conformismo puro. Lo mejor de este libro es acabarlo y pasar al próximo.
I am very sorry to say that I did not care for this novel. I have little experience with Mexican or Hispanic literature, though I had heard of Fuentes as a good writer. He has a good style (though I did not care for it) in which he seems rather at home. The development of the characters was, however, somewhat confusing, and at times seemed a little confusing. Often, characters seemed to undergo crises that did not fit their prior development or their personality. It seemed to me that Fuentes was trying to make political or social points at the expense of his characters' natural developments.
Again, I've very little experience with this genre, and this may have added to my dislike of the book. But, in the end, it seemed to me that Fuentes set up some interesting and compelling characters and yet did not let them fully develop.
La historia y la pre-historia familiar resultan asfixiantes, ahogan al protagonista de esta obra, Jaime Ceballos. Entre el engrandecimiento y el des-conocimiento de sus orígenes, Jaime se enfrenta al quehacer de explorar las posibilidades, aunque no necesariamente las tome.
Entiendo que la historia de Jaime Ceballos se repite a diario en nuestro México, pero la pluma de Carlos Fuentes la hace mucho más aprehensible, le da cuerpo, la hace real.
این کتاب با عنوان "آسوده خاطر" توسط محمد امینی لاهیجی به فارسی ترجمه شده و در سال 1364 توسط نشر تندر چاپ و منتشر شده است. از کارلوس فوئنتس کتاب دیگری با نام "خودم و دیگران" توسط عبدالله کوثری به فارسی ترجمه شده که مجموعه مقالات نویسنده در باره ی خودش ، سروانتس، گوگول، لوئیس بونوئل، بورخس و مارکز نوشته است.
«گمان میبرید که من آمدهام تا آرامش را بر زمین جاری سازم؟ نه: من آمدهام تا جدایی اندازم. از این پس خانهها به دو نیم تقسیم خواهد شد: پدر بر پسر و پسر بر پدر خواهد شورید.»
سخنان عیسی مسیح در انجیل که خایمه سیبایوس در بخشی از کتاب زمزمه میکرد، از فصل پنجم، صفحهٔ ۱۰۵ و ۱۰۶، برگردان محمد امینی لاهیجی، چاپ اول ۱۳۶۴، نشر تندر
The solid oomph of the last couple of pages aside, The Good Conscience crams together a number of Fuentes' themes and ideas, but in a rather undeveloped and awkward manner. As it's only his second novel, one feels he's trying to find his execution. 2.5 stars.
Οταν η πίστη γίνεται τυραννία .... αν κι εμένα ,το συγκεκριμένο,δεν με άγγιξε όσο περίμενα,κανείς δεν μπορεί να αμφισβητήσει ότι ο Φουέντες είναι εξαιρετικός συγγραφέας....αναγλυφοι χαρακτήρες και μοναδική τοιχογραφία εποχής...
me trababa en ocaciones, no sabía donde iba el hilo en los recuerdos o en algunos parrafos, explicaba muchas cosas, pero al fin y al cabo un buen libro
yo sé que no es válido comparar peras con manzanas pero cuando vienen del mismo árbol considero que nos podemos tomar ciertas libertades. después de leer Aura, mis expectativas sobre las obras de Fuentes estaban por los cielos, para mí fue una gran obra literaria la publicada en el 62.
Sin embargo, cuando me encuentro con Las Buenas Conciencias, que además todo este tiempo creí que se llama "las buenas coincidencias", me encuentro con algo diferente, lo cual no significa malo solo, como siempre en estos casos, la expectativa nos hace caer en la decepción un poco.
La historia en sí es buena y la narración también, la vida de un muchacho "de cuna", de "alta curnia" es la protagonista de esta historia. Situada en Guanajuato, Fuentes nos va llevando de la mano por lo que era vieja tierra de las oportunidades, contextualizandonos muy bien sobre cómo se comportaba la sociedad de aquél entonces. Me parece maravilloso cómo hemos cambiado tanto y a la vez tampoco. En este pueblo lo importante son las apariencias, durante generaciones y generaciones y lo que más sufre el protagonista es enfrentarse al ¿Qué dirán?
Además de las pretenciones sociales que lo persiguen por más de 4 décadas atrás, el protagonista se enfrenta a un dilema moral y religioso que me parece muy curioso. Nuevamente el autor nos remonta a problemas de la sociedad mexicana de ese entonces y precisamente creo que refleja el comienzo de un cambio de "prioridades" dentro del pensamiento juvenil, planchando el camino a como la conocemos hoy en día.
El protagonista tiene dos momentos canónicos que me parecieron maravillosos, no diré más para no spoilearlos pero uno es frente a su madre y el otro frente a un desconocido que en una sola noche le hace cuestionarlo toda la estructura social bajo la cual vive. La relación con su padre también creo que es muy significante para él y para la definición de su personalidad en un momento tan crucial como lo es la adolescencia.
Cambié mi rate de 3 a 4 estrellas mientas escribía esto porque me di cuenta que sí lo había disfrutado bastante, y al final en mayor o menor medida, todos hemos sido en algún momento Jaime Ceballos, tratando de tener una buena conciencia.
Wow. Ese final me recordó a 1984. Que prosa tan buena. Ni siquiera puedo formar sentencias coherentes de lo increíble que fue esta lectura, la segunda novela de Carlos Fuentes. Simplemente wow.
Una novela corta con un estilo ligero y un final que no lo vi venir y no se qué pensar de él. Es una combinación entre saga familiar y novela de transición adolescencia-adultez situada en la ciudad de Guanajuato entre finales del 1800 y 1940. La parte histórica es muy fluida y aunque no es abundante en detalles ambienta muy bien la novela.
La historia se centra en Jaime Ceballos, un joven de una familia muy antigua y acomodada de Guanajuato de corte conservador, quien en sus años de adolescencia sufre una especie de crisis existencial (como muchos) por la constante lucha entre sus pensamientos personales y lo que su familia espera de el, además de los problemas que a heredado de su familia y que perturban lo que siente y el lugar que le corresponde dentro de su familia y la sociedad. Es una historia muy al estilo de las de Hermann Hesse pero con un final que me impacto bastante por el golpe de realidad que este conlleva, lo cual me dejó con una sensación dulce amarga, por qué lo entiendo perfectamente pero mucho de mi se resiste a ello.
Pero a pesar de que la novela toca muchos temas de religión y moral no es muy moralista pues en ella se encuentra una crítica muy dura a aquellas personas que aparentan ser religiosas y rectas pero en realidad no lo son (el típico mocho adinerado que bebe hasta quedar ahogado, pero eso si, va a misa todos los domingos) y uno de los mensajes que recuperó del libro es el del amor incondicional a tus seres queridos, a tu familia y a tus amigos. Sin duda un libro que vale la pena leer y que me dejó pensando en muchas cosas. El único problema es como maneja el tiempo la obra, a veces lo dilata mucho y de repente da saltos bruscos lo cual resulta un poco confuso y rompe un poco con la inmersión, pero solo un poco pues el estilo fluido hace que sea sencillo volver a agarrar el hilo.
De lo poco que el leído del autor, creo que es de lo que más me a gustado y sin duda lo recomendaría si buscas un lectura corta con la cual empezar a conocer su obra, o si buscas una novela de esas de transición con mensaje y un final que puede sacudirse un poco. Aunque la novela es justa en su extensión y no siento que le faltará nada, creo que me hubiera gustado que se extendiera un poco en algunos personajes que son interesantes y de los que se habla poco.
Las buenas conciencias (1959) ya he hablado de lo mucho que me agrada la forma de escribir de Carlos Fuentes al menos en las únicas dos novelas que he leído de él (sin sumar esta), y “Las buenas conciencias” no es la excepción.
ubicada en mi querido Guanajuato, nos presenta esta historia donde nuestro protagonista Jaime es producto de una familia acomodada, cristiana y “de buenas costumbres”. La novela nos muestra el catolicismo que se vivía (y parece ser que aún se vive en algunas familias) en varías regiones de México, donde Fuentes nos muestra su comprensión de este tipo de sociedades, a diferencia de otros autores que podrían hacer más hincapié en la crítica y nos ofrece un gran panorama siempre endulzado con un gran marco histórico y social.
Crisis de adolescencia, catolicismo, México, los errores humanos y sobre todo la virtud de Fuentes al contar esta historia es lo que podemos esperar de esta obra.
hago mucho la referencia a que el estilo de Carlos Fuentes que personalmente me agrada y es realmente agradable y no solo eso, lo hace de una manera trascendental, “Las buenas conciencias”, a mi parecer no es mejor que (al momento) considero su mejor obra “La Muerte de Artemio Cruz” pero si es más fluida, recordando que "Las buenas conciencias" es la segunda novela que Fuentes publicó y me parece más sobresaliente que “Aura”. sin duda es una lectura recomendada.
I haaaaaate this book. First off, the first few chapters started off like bad Cliffs Notes to set the scene, then it got kind of interesting, then kinda not. Then it got super inappropriate! I don’t want to read about anyone masturbating, especially in a church! Tossed it aside, but decided to give it another chance as Fuentes is supposed to be a giant of Hispanic literature. Well, besides doing it again and again, the main character also gets sexual feelings for his aunt and senses she has the hots for him too. Before I took up this book again, I turned to Mario Vargas Llosa, another giant of Hispanic literature, and he wrote about boys having sex with chickens and molesting and raping each other at military boarding school. I cannot for the life of me imagine equivalent figures in the English-speaking world - and Nobel hopefuls and winners to boot - writing about things like this! Kinda scared to read another Latin author! Anyway, I have about 50 or so pages to go and I don’t really want to finish it. I don’t really care anymore. But if I cast it aside in disgust, can I still list it as a book read in my reading challenge? Because I have three others that I DNF due to boredom and disgust too!
Alright, this book was...? Honestly, I started to like Jaime, but...he killed the cat. I guess this book is kind of good...in a sense. Rodolfo's quote on page 124 was amazing though, but not in the context of the book. "How different we are from what we could be." Speaks wonders. I won't rate this because I have mixed feelings. The flagellation? What in the world...? Yeah, yeah it means something plot wise...but...nevermind that then
He started to be really interesting when he was talking to Obregon, but the first few chapters, with him playing mass because he didn't have friends? OH MY GOD. That was just...it's funny to think that everyone felt bad for him while I was just like, "kid...what do you think you're doing?" Basically, I didn't feel any sympathy or whatever for him. Look, in a sense, I can understand/relate (but I won't explicitly admit this) to some (maybe even all) of Jaime's overall struggle or whatever, but not the religious aspect of it. So...the outline of the shape but not what fills in the shape.
This entire review has been hidden because of spoilers.
Alright. The first quarter of this book was incredible, using a rich language that I’ve never really encountered before to sketch lives within history. I loved it. But when Fuentes dropped us in the present tense and introduced us to his real characters, I was very disappointed. His chosen characters were caricatures that fell flat, and I only related to them insofar as they too looked backwards to their ancestors, whose stories, traced briefly by Fuentes, seemed far more interesting. Simply put, the characters were boring and the protagonist was annoying. This book, probably the first “leftist novel” I’ve read since Germinal, portrayed the capitalists as hypocritical fat cats and the workers as beautiful, dashing, and brilliant. Boring and easy. To its credit, however, the book had the dignity to end poorly, with the humane Catholicism of our young goodhearted bourgeois dissident roundly defeated. I’m very critical but this book seemed like the promising but undercooked work of a young, young author. I will give Carl one or two more tries, because he definitely earned them.
در آن لحظه، غمگين و تا اندازه اي نگران بود، با وجود اين احساس نوعي سبك بالي مي كرد، زيرا اندوه احساسي بود كه به او آرامش مي داد.
پس خدا را نبايد يار خود دانست، پس خدا براي بچه ها نيست، بلكه تنها مال بزرگترهاست، و آدم نبايد خودش به سوي خدا برود؛ بايد از ميدان محل بگذرد و در كليسا پيدايش كند.
هر آنكه بخواهد زندگيش را نجات دهد بايد آن را فدا كند.
هيچ چيز نبايد تمايلات پنهانش را آشكار كند، بايد چنان پوشيده و مرموز باقي بمانند كه حتا خود نيز آنها را بجا نياورد. بله، پوشيده و مرموز در هاله اي از سكوت روياها و ابري از تخيلات تاريك، و بر فراز آن سرپوش سياهي از سركوب؛
دوستي كه به حرف تو گوش مي دهد، و تكه اي از يك كتاب تازه، يك ايده تازه، يك روياي تازه را با تو قسمت مي كند.
هر كدام از ما كفاره اش را بايد خود بپردازد. درست نيست، پدر؟ چرا بايد فكر كنم ديگران ممكن است بدتر از من باشند؟ من فكر مي كنم مه مكافات من خاص خود من است، كفاره اي ست كه خودم به تنهايي بايد بپردازم، طوري كه انگار خودم، تنها گناه كار جهانم.
ما براي ابد زندگي نمي كنيم... ما سراسر زمان را مي ميريم.
Las "buenas conciencias" -- o sea, la hipocresía y la autocomplacencia de la burguesía provinciana -- triunfan sobre la juvenil rebeldía de un muchacho idealista en Guanajuato, c. 1946. Fuentes se permite entrar en las cabezas no sólo del muchacho conflictuado, Jaime Ceballos, sino también en las de la gente que lo oprime y lo sofoca (sus tíos, que lo están criando), las dos personas fuera de su círculo social que le muestran otras posibilidades, y del pobre cura Obregón, que resulta ser un hombre más inteligente y complejo de lo esperado. Hay descripciones bellísimas de Guanajuato, de las pasiones y frustraciones de esos burgueses, y de cómo se pasa el tiempo en una ciudad de provincia -- como en el capítulo 4, que empieza "Cada año de la vida…" Al final, es un estudio sociológico de un caso inventado pero realista, triste y muy creible y, en muchos momentos, muy conmovedor.