Alfredo Gómez Cerdá > Quotes

“Las dudas a las que trataba de aferrarse se iban disipando y ya estaba convencido de que un hombre, un ser humano, con toda la complejidad y hondura de un ser humano, pude convertirse en un pedazo de escoria. Solo era preciso que otros seres humanos se empeñasen en conseguirlo.”
― Alfredo Gómez Cerdá, Eskoria

“Pretendía que le resbalasen las palabras de los verdugos, de igual manera que las gotas de lluvia resbalan por los cristales de las ventanas empañadas. Pero era imposible, porque aquellas palabras no eran simples palabras, sonidos articulados; eran aguijonazos o, peor, eran dardos envenenados, lanzadas violentas... No podían resbalar por su piel por la sencilla razón de que se clavaban, la atravesaban y soltaban su veneno dentro.”
― Alfredo Gómez Cerdá, Eskoria

“Así tendría que aguantar los treinta minutos de recreo. Se animó pensando que ya solo quedaban veintitrés minutos. Mil trescientos ochenta segundos. Podría contarlos para no aburrirse, para no pensar en otras cosas, para no pensar en sí mismo, encerrado en un retrete, acuclillado sobre la taza del váter. Olía mal. Olía muy mal. A orines. A mierda.”
― Alfredo Gómez Cerdá, Eskoria

“Intentó tranquilizarse. Sólo tendría que llegar hasta el vestíbulo principal, atravesarlo y tomar el pasillo del lado opuesto hasta la puerta de la biblioteca. Apenas treinta metros. Apenas cuarenta pasos. Apenas veinte segundos. Apenas cuarenta y cinco pulsaciones de su corazón.”
― Alfredo Gómez Cerdá, Eskoria

“Ya no soy una persona, Gloria. Conmigo también han acabado. Es tarde para reaccionar. Se ha roto algo importante dentro de mí y no hay forma de recomponerlo. Y eso me impide hacer lo que me gustaría hacer y decir lo que me gustaría decir.”
― Alfredo Gómez Cerdá, Eskoria