Daniel Osuna's Blog

VOZ PRINCIPAL (MASCULINA).—
Escapa de tu soledad,
ven corriendo a donde estoy.
No te asustes, ven conmigo
que por ti soy lo que soy.

A nadie le has hecho mal,
a todos le das tu luz.
No te asustes, ven conmigo,
yo soy tu mayor virtud.

Nunca, nunca te lastimes;
hazte el bien, quiérete mucho.
Huye de esa soledad
que te hace tanto mal
y ven a mi compañía.

No te dejes nunca,
siempre estás contigo,
siempre estás conmigo.
Dios siempre te mira,
de ti no se olvida
al igual que yo.

Si necesitas a alguien que te quiera,
aquí siempre voy a estar por ti.
No permitiré que se envejezca
la esperanza que pusiste en mí.

No permitiré que caigas.
Voy a hacerte muy, muy feliz.

No te asustes, ven conmigo,
que por ti soy lo que soy.
No te asustes, ven conmigo,
que por ti estoy donde estoy.

PRINCIPAL Y CINCO VOCES.—
No te asustes, ven conmigo;
yo soy tu mayor virtud.
No te asustes, ven conmigo;
yo te voy a dar mi luz.

No te asustes, ven conmigo,
que por ti soy lo que soy.
No te asustes, ven conmigo,
que por ti estoy donde estoy.

No te asustes, ven conmigo;
yo soy tu mayor virtud.
No te asustes, ven conmigo;
yo te voy a dar mi luz.

© 2022, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

¿Personas como tú?
No, no hay.
Tú me quieres,
tú me amas,
tú me sabes besar.

Sabes todo de mí.
Me acaricias,
me alabas,
me empalmas el corazón
y me infundes un suave olor
a la libertad.

¿Como tú? ¿Que si hay personas como tú?
No, no hay.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

Mi luna
es esférica, circular
como mi deseo de tenerla cerca.
¡Ojalá tuviera la suerte
de ir, encontrarte y tenerte!

Mi luna
es serena; brillante como el cristal;
intangible, pero excelsamente real.

Mi luna
es suave, piadosa, enamorada.
¡Oh, círculo bendito!
Luna querida, ¿de dónde provienes?
¿Adónde te vas?

Mi luna
significa nobleza, silencio… eternidad.
¡Qué luna! ¡Qué espléndida y maravillosa!
¡Y maravilloso es su reflejo en alta mar!

Mi luna
es nueva, es llena, es media luna.
Está contenta, callada, o a veces nostálgica.
Se siente sola a veces;
llora al contemplar que no hay nadie
que la admire, que la piense,
que le desee una feliz noche,
que por ella a Dios le ore,
que dé gracias por tenerle.
Mi luna sabe que como ella ninguna
y sigue llenando el vacío del cielo…
¡Solo ella es así, solo ella, mi luna!

Mi luna.
Digna de contemplar de cerca,
de estudiarla, de quererla, de amarla.
¡Cuántos han pisado tu superficie!
En ti han clavado banderas,
mas tú no sabes nada de países.
Tú eres libre, luna adorada, eres libre.
Eres libre como la primavera.
No sabes nada de tormentos humanos,
ni de política, corrupción ni fronteras.
Eres inocente
como la vez primera,
como el primer año de existencia,
como la Tierra cuando no estaban ni Adán ni Eva.

Mi luna:
Irás y estarás,
bailarás, sonreirás y seguirán adelante.
Siempre sabré que te mantendrás brillante.
Eres mi luz y te miro siempre de noche,
a veces en una parte del día.
Irás conmigo en todo momento.
Sin ti mi existencia es un tormento.
Contigo mi vida es pura alegría.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

Hasta hoy estoy contigo
y hasta hoy estás conmigo.
Hoy me iré por un camino
que me impedirá volver.

No quisiera que me extrañes.
Sería triste que vivieras extrañando.
Porque ese cementerio de recuerdos
no podrá hacerme nunca regresar.

Habría sido todo para ti,
con todo y alegrías,
pero he ganado poco con tu amor.
Te juro que yo nunca fui feliz
quedándome a tu lado;
mi vida duró menos que una flor.

Quizá cuando me pierdas,
me esperes algún día en la puerta,
tomándote un café,
mirando una revista,
o solo imaginándome volver.

Si yo soy caprichoso, no lo sé…
pero me olvidaré de aquel cariño
que siendo así de poco un día nos dimos.
Serás como la cena de un ayer.

Dolor será lo único en mi alma
que habrá si recordara aquel amor.
Si por casualidad te recordara,
recordaría hasta tu traición.

Habría sido todo para ti,
con todo y alegrías,
pero he ganado poco con tu amor.
Te juro que yo nunca fui feliz
quedándome a tu lado;
mi vida duró menos que una flor.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

RECITADOR PRINCIPAL (MASCULINO).—
Desde el día que estás conmigo
miro y siento el aire distinto.
Ya la vida la veo bien.
Todo vuelve a tener color.

La vida la veo tan bella;
no me siento más solitario.
Digo adiós a la soledad;
todo vuelve a tener color.
Contigo todo vuelve a tener color;
vuelve todo a tener su sentido.
El tenerte a mi lado es un honor.
Eres todo lo que había pedido.

Aun cuando estuve tan solo,
sentía que vendría pronto
alguien que fuera para mí…
Todo vuelve a tener color.

Contigo siento que vivo.
Sé muy bien que no me has mentido…
Sólo siento que soy feliz:
todo vuelve a tener color.

Contigo todo vuelve a tener color;
vuelve todo a tener su sentido.
El tenerte a mi lado es un honor.
Eres todo lo que había pedido.

Contigo soy muy feliz.
SIETE VOCES.—
(Sólo contigo soy feliz).

PRINCIPAL.—
Contigo soy muy feliz.

SIETE VOCES.—
(Sólo contigo).
PRINCIPAL.—
Contigo.
SIETE VOCES.—
(Contigo…)

PRINCIPAL.—
Contigo todo vuelve a tener color;
vuelve todo a tener su sentido.
El tenerte a mi lado es un honor.
Eres todo lo que había pedido.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

¡Cuántas cosas he aprendido contigo!
Me siento muy enamorado
y motivado a seguir adelante…
¡Tú acabaste con mi hastío!

Ayer viví fracasado y cansado de ser despreciado,
hoy que me siento muy enamorado de tu figura,
me has enseñado el cielo y sus colores
para que me sienta de veras encantado.

¡Cuántas cosas he aprendido contigo!
Me siento muy enamorado
y entregado a quererte con celo y algo de devoción,
como un esposo, como un amante, como un amigo.

Pero no te vayas nunca mi amor.
Mira que por ti estoy muy enamorado
y lo que siento por ti se hace más grande, como el mar,
más brillante que la luz y más intenso que el Sol.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

No seas ingrata. Vida, evita ser así, por favor.
Si no vas a volver, al menos no olvides mi amor.
Yo siento que me olvidas y eso me preocupa,
pues el día que me olvides… me secuestrará la Tumba.

No olvides nunca mi amor, por favor,
de veras, vida mía, no olvides nunca mi amor.
Estos poemas los hice pensando en lo nuestro
que ahora que lo pienso tenía muchos defectos,

pero aún así, tenerte me hacía un hombre feliz;
no sé si de repente te sucedía lo mismo a ti,
pero yo te quería, y te quiero aunque no regreses.
No olvides mi amor, no importa si no vuelves.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

No pasarás por el ojo de la aguja
porque tu riqueza abunda,
tu gratitud es muda
y tu confianza es viuda.

Pasará más rápido un camello
que siquiera uno de tus vellos,
o la simple sombra de tu reflejo…
¡Es que no tienes remedio!

Crees que tener dinero lo es todo,
y no, no es así. Eso creen los locos.
Piensa mejor que me necesitas,
que nos queremos
y que más importante que el dinero
es el amor.

Ahora, si no te importa lo que digo
y no vas a pensar lo mismo.
Pongo punto final a este poema
y no te diré nada más.
Yo sé que un día alguna pena
por las malas te lo enseñará.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

La vida es cruel,
muy cruel conmigo.
No me ha dado una mujer,
tampoco buenos amigos.

La vida es vana,
es vana y es muy, muy cruel
porque ve dolor en mi alma
y aún así no me busca un querer.

Salgo a buscar un lugar
y encuentro desaires, maldades.
Las falsedades malignas
son reflejos de que la vida es cruel.
Y no encuentro un lugar de verdad,
no encuentro vida, espacio, amor…
Soy un estúpido soñador.

Gano más escribiendo que soñando
y la vida es cruel conmigo
porque aún viendo que estoy llorando
ni un buen amor que ha concedido.

Y ¿qué se sentirá eso de ser el amor de alguien?
Creo que es bonito que alguien se levante pensando en mí.
Yo me despierto pensando en todo, pero en mí nadie.
Me lo dijo la vida que para amar yo no nací.

La vida es cruel,
muy cruel conmigo.
No me ha dado una mujer,
tampoco buenos amigos.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor

Cuántas cosas quise compartir contigo, corazón…
Cuántas rechazaste.
No me quisiste,
no me amaste
ni me diste nunca
un poco de ti,
un poco de tu amor.

Me diste ignorancia, inconstancia…
Me abandonaste.
Me dejaste sediento,
hambriento,
necesitado de ti,
¿y todo para qué?
Igual me dejaste sin aliento.

Me habría dado lo mismo no quererte,
no extrañarte,
no tenerte,
no pensar en ti,
en tus ingratas acciones,
porque ahora que no estás,
tu ausencia me hace sufrir.

© 2023, Daniel Osuna, todos los derechos de autor