Paula Pico Estrada's Blog: Los libros de los otros
April 28, 2024
Bleak House, Charles Dickens
Disfruté muchísimo la primera mitad de Bleak House y me disponía a formar parte de las huestes que la consideran la mejor novela de Dickens. Después, se me cayó de las manos y aunque me forcé a seguir, la dejé cuando faltaban pocos capítulos. Para intentar entenderla, leí la clase de Nabokov en sus Lecciones de literatura (Buenos Aires: Emecé, 1984). Además de que aprendí mucho sobre el arte literario en general, Nabokov describe los motivos principales por los cuales primero Bleak House me fascinó: entre otros, el estilo, que combina el tono declamatorio con lo que Nabokov llama "narración brusca" (por ejemplo, la descripción de la corte de justicia con la que empieza); la vividez sensual de las descripciones; el tema recurrente de la infancia; la denuncia social (que Nabokov, por supuesto, desprecia porque no lo considera un elemento artístico). También define dos de los defectos que me sacaron de quicio y que me impedían ya seguir leyendo: la voz narrativa en primera persona de Esther es idéntica a la del narrador en tercera y Esther es lo que Nabokov llama "personaje perry", un término inventado por él para describir a los personajes cuya función es ayudar al autor a armar la historia, y por lo tanto van de un lado a otro. Como nadie puede saltar sobre su propia sombra y soy mujer, me molestó muchísimo la unidimensionalidad de Esther y la construcción estereotipada que hace Dickens de este personaje en tanto mujer virtuosa.
Pero esos son detalles y creo que para justificar por qué la novela me cansó tengo que recurrir a Henry James: "las cuestiones artísticas son (en el más amplio sentido) cuestiones de ejecución" ("El arte de la ficción"en Cómo se escribe una novela, Buenos Aires: El Ateneo, 1993). Nabokov analiza los elementos que componen Bleak House y saca a la luz el valor intrínseco de cada uno, pero para mí, como lectora, el "todo orgánico" (la expresión es de James también) no funcionó. Mi consejo es que si otro lector se cansa a mitad de camino, renuncie al develamiento de la intriga y lea la clase de Nabokov, que le va a dar herramientas para leer apreciativamente lo que le falta. Yo lo hice demasiado tarde y lo siento.
Pero esos son detalles y creo que para justificar por qué la novela me cansó tengo que recurrir a Henry James: "las cuestiones artísticas son (en el más amplio sentido) cuestiones de ejecución" ("El arte de la ficción"en Cómo se escribe una novela, Buenos Aires: El Ateneo, 1993). Nabokov analiza los elementos que componen Bleak House y saca a la luz el valor intrínseco de cada uno, pero para mí, como lectora, el "todo orgánico" (la expresión es de James también) no funcionó. Mi consejo es que si otro lector se cansa a mitad de camino, renuncie al develamiento de la intriga y lea la clase de Nabokov, que le va a dar herramientas para leer apreciativamente lo que le falta. Yo lo hice demasiado tarde y lo siento.
Published on April 28, 2024 09:36


