Encarni Arcoya Alvarez's Blog

–Los grupos uno a cinco os toca este año el norte. Grupos seis y siete, serviréis de apoyo a los anteriores. –Bajó la cabeza y repasó el documento–. Grupos ocho a doce, el sur. Trece, catorce y quince, de apoyo. ¿Alguna duda?

–¡No, señor! –gritaron varias voces.

–Podéis retiraros. Y recordad que debéis volver con el saco vacío… –agregó antes de que varios aleteos enmudecieran su voz–. ¡Dieciséis! –chilló tan fuerte que todos se volvieron. Todos menos al que había nombrado, que suspiró hondo y sonoramente, dejó caer sus hombros y se giró con demasiada tranquilidad.

Dieciséis se acercó lentamente, sorteando a sus compañeros que ya se marchaban.

–¿Qué? –lanzó quejumbroso y taciturno.

–Tú también sales este año. Tengo una misión especial para ti.

–¡Qué guay! –ironizó. Haría lo de todos los años, buscar algún tipo de diversión y luego tirar a la basura el contenido del saco.

–Toma.

Curioso, agarró el sobre que le tendía. Lo abrió y vio la foto de una niña. Detrás, una dirección.

–¿Esto qué significa?

–Te harás cargo de ella.

–¿Por qué ella? ¿Qué tiene de especial para dedicarle un saco entero?

–Ya lo verás. Y recuerda…

–Sí, sí, no volver hasta que el saco esté vacío –cortó.

–Recuerda que si no recibe lo del saco, perderemos mucho. Y tú el que más –dijo serio señalando lo que tenía a su espalda.

No se lo podía creer… ¿Para qué lo habían mandado allí? ¿Para qué necesitaba esa niña lo que tenía en su saco? ¿Cómo iba a vaciarlo en ella si su aura rebosaba?

La pequeña se encontraba durmiendo en su cama, abrazada a un peluche que había conocido tiempos mejores. No parecía tener más de siete u ocho años, y su carita, aun dormida, tenía una sonrisa dulce y mágica. Pero daba igual que esa niña pareciera un angelito; seguro que, cuando despertara, pediría a sus padres una docena de nuevos regalos para Papá Noel y los Reyes Magos. Todos eran iguales. Las Navidades eran así: gente de arriba abajo comprando cosas que no usarían, o con las que se endeudarían para poder alardear. Ya se había perdido el espíritu. Eran unas fiestas basadas en el consumismo, sin sitio para la ilusión.

De pronto, la puerta de la habitación de la pequeña se abrió y entró una mujer. Se sentó a los pies de la cama infantil zarandeando el pequeño cuerpo hasta que abrió los ojos.

–¿Es la hora?

–Sí, cariño. Si queremos hacer todo lo que has pedido en la lista, tenemos que salir ya.

Claro, habría pedido demasiadas cosas como para poder ocuparse de todas en unas horas. ¿Cuántos regalos había pedido? ¿Diez, quince? ¿Cincuenta tal vez?

Dieciséis siguió los pasos de ambas. Con sus alas oscuras voló cerca del coche dejando caer, de vez en cuando, más contenido de su saco al aire.

La madre aparcó el coche y salió abriendo la puerta a la niña que corrió hacia el maletero. Cogió una de las cajas que había en su interior y caminó despacio hacia la puerta del edificio. Como pudo, sostuvo la caja al tiempo que llamaba al timbre.

–¡Buenos días! Madre mía… cuántos regalos… –saludó la anciana que abrió la puerta.

–Ellos no reciben regalos y también se los merecen. Así que he traído uno para Papá Noel y tres para los Reyes Magos para cada uno.

La anciana miró a la madre, que se acercaba con una caja y una gran bolsa. Se le escaparon las lágrimas y no pudo articular palabra.

Cuando desaparecieron en su interior, Dieciséis bajó y leyó el cartel. Orfanato. ¿Esa niña había llevado regalos a otros niños? O en su corta edad había acumulado demasiados regalos, o eran ricos y querían acallar su conciencia con ese acto altruista. Pero eso no explicaba el aura de ilusión que ella poseía…

Pasaron varios minutos antes de que salieran y, cuando lo hizo, notó que el brillo de la pequeña había disminuido un poco.

–Mamá… ¿por qué esos niños tienen que estar solos en Navidad?

La mujer no pudo más que volverse hacia ella, agacharse y abrazarla.

Sin darse cuenta, él agarró un puñado de polvo y lo dejó caer sobre la niña haciendo que refulgiera como antes de que entrara.

–Vamos, hay que llegar a la siguiente parada –dijo la pequeña.

Un albergue, una residencia canina, un asilo… Hasta una cárcel habían sido los destinos. Y en cada lugar, Dieciséis había dejado caer un puñado de ilusión, cada vez mayor, paliando la pérdida que esa pequeña tenía al salir.

–¡Para, mamá! –gritó cuando iban en el coche.

La pequeña se bajó y corrió hacia un mendigo que intentaba protegerse del frío.

–Toma… –le dijo quitándose su bufanda–. No es mucho, ni tampoco muy grande, pero da calorcito– le explicó.

–Que Dios te bendiga, pequeña…

–Es Navidad… Y lo importante es ayudar a todos. Mi papá me lo enseñó.

Dieciséis la vio volver al coche mientras se le encogía el corazón. Las siguió en silencio hasta que llegaron a un cementerio.

–Hola, papá –saludó la niña rozando con su manita la fría losa–. Feliz Navidad… Espero que te estés portando bien en el cielo. Este año te he hecho un muñequito con plastilina. Mamá dice que es el que mejor me ha salido. –La pequeña perdió su sonrisa–. Espero que no te importe que la llame mamá. Ya sé que no lo es de verdad, porque mamá está ahí contigo. Pero ella es muy buena conmigo y no le importó adoptarme a pesar de mi edad… No pasa nada, ¿verdad, papá?

Dieciséis echó mano al sacó y se dio cuenta que estaba vacío. Pero necesitaba volver a hacer brillar la luz de esa pequeña. Así que descendió y abrazó a la pequeña. A sus ojos afloraron varias lágrimas; a su mente, varias imágenes. Las palabras de la niña le confirmaron lo que acababa de recordar:

–Me encanta sentir tus abrazos, papá… Feliz Navidad a ti también.

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Los adolescentes es quizá el público que menos
lee, aunque les guste. Muchas veces las “opiniones” de sus
amigos, el hacer algo diferente, los coarta a leer, y eso hace que
sea complicado regalarle un libro (porque puedes pensar que no le
gustan).

Sin embargo, todos sabemos la importancia de
que los jóvenes lean, no solo los libros que les obligan en el
instituto, sino aquellos que realmente les gusten.

A veces, nos equivocamos regalándoles libros que
no les atraen, por eso, os voy a dejar algunos consejos para elegir
buenos libros para adolescentes:

¿Conoces a tu hijo o hija? ¿Sabes cuáles son
los hobbies que tiene? ¿Sus cantantes, escritores, personas famosas
que le gustan? Esto es como el capítulo de Los Simspson donde
Marge le hacía cinco preguntas a Homer y no acertaba ninguna. ¿Tú
serías capaz de hacerlo?

Para saber qué libro le va a gustar a tu hijo o
hija primero tienes que conocerle. Así descubrirás si le gusta la
fantasía, el terror, el romance, etc. Y ya tienes un paso dado.

El siguiente paso es saber qué libros pueden
entrar dentro de los que le gustan a tu hijo o hija. Teniendo en
cuenta que hay muchos, debes tomarte tu tiempo.

Mi consejo es que no te vayas solo a los libros
que suenan (los que tienen en las librerías en primera plana,
los que salgan en revistas, etc.). Vale la pena invertir un poco de
tiempo en encontrar joyas escondidas, por ejemplo entre
autopublicados, que no tienen tanto poder para anunciar sus obras y
son, a menudo, mejores que las que publican las editoriales.

Pues sí. Mucho pedir que tu hijo lea, que tu hija
lea pero, ¿qué hay de ti? Si quieres saber si un libro es bueno
para ellos, primero léelo tú y verifica que todo lo que hay es
apto para un niño o una niña de la edad que tenga.

No te dejes llevar ni por el título ni por la
portada, tu responsabilidad es saber lo que le das a tus hijos, y
para eso tienes que leerlo antes y valorar si está preparado para
entenderlo y es apto para él o ella.

Por mi parte, solo puedo recomendar mis libros
juveniles por si te animas a darles una oportunidad. Tienen
valores y situaciones en las que muchos jóvenes pueden verse
metidos. Y eso es importante porque se sentirán identificados.

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Aquellos que me conoc��is sab��is que publico con
dos nombres. Y el motivo por el que lo hago.

Encarni Arcoya, mi nombre real, es el que
he adoptado para las publicaciones infantiles y juveniles,
para un p��blico menor de 18 a��os. Son historias con un lenguaje
cuidado, sencillo pero a la vez con un significado entre las palabras
que llega a ni��os y grandes.

Kayla Leiz, mi seud��nimo, es el nombre que
adopt�� con la primera publicaci��n de Planeta y que, hoy d��a,
utilizo para publicar novela rom��ntica, er��tica, narrativa y lo
que est�� por venir.

El motivo por el que hice eso fue para evitar
que novelas m��as para mayores de 18 a��os cayeran en manos de quien
no deb��an, porque sabemos que, cuando te conviertes en una
escritora de la que tienes fans menores, tienes que cuidarlos muchos
y evitar que quieran leer libros a los que a��n no est��n preparados.

Hasta hace poco, mi sitio web encarniarcoya.com albergaba los dos alter egos, tanto Encarni Arcoya como Kayla Leiz. Sin embargo, y para darle m��s profesionalidad a mi carrera, adem��s de conseguir un mejor marketing, esto ha cambiado.

Si quieres encontrar mis libros infantiles y juveniles, tienes mi p��gina encarniarcoya.com.

Si quieres encontrar mis libros rom��nticos, er��ticos, narrativos u otros g��neros que ir�� escribiendo, p��sate por kaylaleiz.com.

Yo te espero en las dos.

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Hoy os quiero hablar de otro de los relatos que pod��is encontrar en la Aplicaci��n Leemur, una aplicaci��n basada en historias a trav��s de mensajes de WhatsApp.

En este caso, la historia la titul�� Danger Play. Cuando me la corrigieron, mi correctora me pregunt�� por qu�� hab��a puesto el t��tulo en ingl��s, que en espa��ol quedaba bien. ��Y sab��is qu��? En espa��ol no me gustaba, no lo ve��a potente. Haceros una idea:

Danger Play vs Juego peligroso

No s�� vosotros, pero cuando yo pens�� en Juego peligroso lo primero que me vino a la cabeza es una t��pica pel��cula de serie B de las que echan en Antena 3 los fines de semana. O una novela o historia subidita de todo. Y Danger Play es una historia juvenil.

As�� que no quise que me lo cambiaran y es algo que agradezco porque se ha mantenido la esencia de esa historia.

Por supuesto, la historia la dej�� un poco abierta, sin saber el final, sin saber lo que le puede pasar a los protagonistas o lo que han hecho. Pero eso era lo bueno. Porque si os anim��is a leerla y ven que tiene tir��n, quiz�� me pidan la segunda parte.

Pues imag��nate recibir un mensaje invit��ndote a jugar. No sabes qui��n te lo manda y aunque preguntas, te rebota el mismo mensaje. ��Qu�� haces? ��Ignoras? ��Aceptas?

Ella acept��, y a veces las consecuencias de invitar a un extra��o, a seguirle el juego, pueden no ser adecuadas. Sobre todo si el juego va subiendo de tono e implica hacer cosas��� al margen de la ley.

Ojal�� y lo le��is. Yo os dejo el link a la aplicaci��n y despu��s, en el buscador, solo ten��is que poner el t��tulo.

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Como sabes, Hessa. Un amor entre leyendas es mi primera incursi��n a un g��nero narrativo puro, es decir, que no se engloba en ninguna rama, ni es rom��ntica, aunque tiene romance, ni es de aventuras, aunque las tiene, y muchas, ni es de historia, aunque en realidad tiene mucho���

Hessa naci�� coci��ndose a fuego lento. En esa ��poca en la que la estaba planificando, la novela sab��a que iba a llevar muchas leyendas, sab��a que quer��a un personaje que recorriera las calles de Granada, que se sintiera cercano, sobre todo para los que vivimos en Granada. Pero, al mismo tiempo, no lograba conectar, llegar a saber lo que quer��a o cu��l era el nexo de uni��n.

Conoc��a la leyenda del soldado porque la hab��a le��do unos a��os atr��s y me hab��a gustado mucho. Pero, aunque es una de las leyendas principales, no terminaba de conectarme bien. Hasta que un d��a, buscando por Internet, encontr�� una p��gina que hablaba de la leyenda del Patio de los Leones. Y claro, esa leyenda no se conoce tanto. De hecho, todav��a no he encontrado a nadie que me diga que la conoc��a de antes.

Esa leyenda fue la que conect�� de pronto las
historias e hizo que Hessa cobrara m��s fuerza en mi cabeza y pudiera
empezar a escribirla. Pero no creas que fue f��cil; tuve muchos
parones porque no estaba segura de si lo estaba haciendo bien.

Ahora, sabiendo que ha gustado a todo aquel que la
lee, estoy contenta, aunque me gustar��a superarme a m�� misma. Y
espero conseguirlo.

La entrada Un secreto sobre��� Hessa. Un amor entre leyendas se public�� primero en Kayla Leiz / Encarni Arcoya.

Hace un tiempo comenc�� una nueva andadura con Leemur, una aplicaci��n para el m��vil y tablets donde, mediante mensajes de WhastApp, se cuenta una historia.

Mi primer intento fue Un sobre cargado de amor.Era la primera vez que hac��a una historia donde solo deb��a haber di��logos, ni comentarios ni narraci��n. Y, bueno, no ha salido tan mal.

Leemur es gratis para leer y adem��s est�� muy en boca de muchos. As�� que, si te la descargas, te animo a leer mi historia, Un sobre cargado de amor.

Os dejo la sinopsis: Julia decide escribirse cartas con desconocidos. Pero, ��y si alguien la conoce demasiado?

Corta, ��verdad? Pero con esas palabras, ya os estoy diciendo mucho. Ya ver��is, ya.

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Teniendo en cuenta las fiestas que se aproximan, y que Papá Noel y los Reyes Magos ya empiezan a hacer sus listas, hoy me voy a dirigir a ellos para que, si algún niño o niña pide un libro como regalo (sé que es raro, pero hay quien sabe lo poderosos que son los libros), pueda contar con los míos.

De hecho, hoy quiero centrarme en presentarles a ellos los libros infantiles, que no son muchos, pero que están hechos con el corazón, buscando a esa niña interior para que aflore y se ilusione con las historias.

Así, tenéis:

¿Te has preguntado alguna vez cómo es posible que un niño se eche a reír de repente? Ellos son muy rápidos y siempre vigilan a los niños pequeños para ver si se portan bien. Si eres bueno, entonces se acercan muy despacito, por detrás, y cuando no te lo esperas…

Los monstruos de las cosquillas, un cuento infantil que te hará descubrir a unos seres muy simpáticos, ¿te gustaría conocerlos?

En la ciudad de las Eñes de las palabras… vive un niño diferente, una Eñe que no tiene rabito. ¿Quieres conocer su historia y saber cómo consiguió su rabito y ese sombrerito? ¡Lee La Eñe sin rabito!

La rata, el buey, el tigre, el conejo, el dragón, la serpiente, el mono, el caballo, la cabra, el gallo, el perro y el cerdo tienen la visita de una persona muy especial. Y lo primero que deben hacer es presentarse. Pero, ¿sabes que ellos guardan un secreto?

Sí, hay dos libros más, Álex y Alma: nos vamos a la pastelería; y Álex y Alma: nos vamos al espacio. Estos libros no tienen ilustraciones, son para que los niños lean y, de paso, pinten ellos las ilustraciones según van leyendo. Son cuentos que buscan esa complicidad de los niños cuando dicen, sosteniendo una cuchara, que es una varita mágica, o una espada, o una rama de un árbol

No sé, yo me lo paso pipa escribiendo estos cuentos. Así que espero que Papá Noel y los Reyes Magos también se diviertan.

La entrada Regalos con corazón para los más peques se publicó primero en Encarni Arcoya.

Teniendo en cuenta las fiestas que se aproximan, y que Pap�� Noel y los Reyes Magos ya empiezan a hacer sus listas, hoy me voy a dirigir a ellos para que, si alg��n ni��o o ni��a pide un libro como regalo (s�� que es raro, pero hay quien sabe lo poderosos que son los libros), pueda contar con los m��os.

De hecho, hoy quiero centrarme en presentarles a ellos los libros infantiles, que no son muchos, pero que est��n hechos con el coraz��n, buscando a esa ni��a interior para que aflore y se ilusione con las historias.

As��, ten��is:

��Te has preguntado alguna vez c��mo es posible que un ni��o se eche a re��r de repente? Ellos son muy r��pidos y siempre vigilan a los ni��os peque��os para ver si se portan bien. Si eres bueno, entonces se acercan muy despacito, por detr��s, y cuando no te lo esperas���

Los monstruos de las cosquillas, un cuento infantil que te har�� descubrir a unos seres muy simp��ticos, ��te gustar��a conocerlos?

En la ciudad de las E��es de las palabras��� vive un ni��o diferente, una E��e que no tiene rabito. ��Quieres conocer su historia y saber c��mo consigui�� su rabito y ese sombrerito? ��Lee La E��e sin rabito!

La rata, el buey, el tigre, el conejo, el drag��n, la serpiente, el mono, el caballo, la cabra, el gallo, el perro y el cerdo tienen la visita de una persona muy especial. Y lo primero que deben hacer es presentarse. Pero, ��sabes que ellos guardan un secreto?

S��, hay dos libros m��s, ��lex y Alma: nos vamos a la pasteler��a; y ��lex y Alma: nos vamos al espacio. Estos libros no tienen ilustraciones, son para que los ni��os lean y, de paso, pinten ellos las ilustraciones seg��n van leyendo. Son cuentos que buscan esa complicidad de los ni��os cuando dicen, sosteniendo una cuchara, que es una varita m��gica, o una espada, o una rama de un ��rbol

No s��, yo me lo paso pipa escribiendo estos cuentos. As�� que espero que Pap�� Noel y los Reyes Magos tambi��n se diviertan.

La entrada Regalos con coraz��n para los m��s peques se public�� primero en Kayla Leiz / Encarni Arcoya.

��Buenos d��as! Hoy toca hablarte de algo que hice con mucha ilusi��n y que me gustar��a que le dieras una oportunidad. Se trata de aplicaciones para el m��vil (s��, como Whatsapp, Instagram, etc.) pero enfocadas a la lectura.

LEER��zate, KMK ��Qu�� me cuentas?, o El castillo de los cuentos. Esos son los t��tulos de las tres aplicaciones que puedes encontrar en Google Play, descargarlas gratis y disfrutar de cuentos, relatos y novelas que voy publicando.

S�� que son aplicaciones muy b��sicas, que quiz�� tengan errores o se puedan hacer mejor, pero las he hecho lo mejor que he podido aprender, junto con la ayuda de la empresa que pone la base de las aplicaciones, y mi objetivo es llegar a ti tambi��n de esa forma.

Algunos escritores est��n anim��ndose a publicar en ellas, por lo que no solo me vas a poder leer a m��, tambi��n podr��s conocer a otros. Y, por supuesto, est��n abiertas a otros que se animen y quieran aportar su granito de arena.

Por mi parte, solo pido que les eches un vistazo, que aunque sean b��sicas, lo importante son las historias que hay dentro, esas que cada escritor vuelva un poquito de su coraz��n para que lleguen al lector. Si eso lo conseguimos, ��qu�� m��s da el envoltorio si lo que importa es el interior?

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��Sabes de qu�� va la historia de Caza a la mentirosa? Te contar�� un secreto, esta novela corta se me atraves�� una ma��ana que estaba trabajando. Iba a ir a desayunar cuando, en mi mente, apareci�� corriendo una chica por un largo pasillo hacia una puerta que hab��a al final del mismo. La abri��. Entr��. Cerr�� y se puso a aporrearla gritando “Ay��dame, ay��dame, ay��dame”. Raro, ��verdad?

M��s raro fue que sab��a que ese largo pasillo era como un lugar interno en el cerebro (al m��s puro estilo de la pel��cula basada en el libro de Stephen King “El cazador de sue��os”).

Y si encima no sabes qu�� ha pasado, solo te suelta que ha mentido a un chico y este viene a verla, y que por m��s que intentas que le diga la verdad ella se rebela, estamos arreglados.

Te dir�� que esa novela tard�� solo tres d��as en acabarla porque no me la lograba sacar de la cabeza. Y ahora la tienes disponible en papel y en digital a trav��s de la editorial Planeta. ��Te animas a leerla? Es casi gratis.

Chloe y Storm mantienen una relaci��n v��a email desde hace un a��o. Gozan de una amistad muy s��lida, pero ��qu�� pasar�� cuando Storm decida ir a conocerla y se d�� cuenta de que la foto que ella le envi�� no era suya? Chloe no tendr�� m��s remedio que confesarle la verdad, que la persona que ��l conoce como Sunny es ella en realidad, Chloe, una chica normal y corriente que le ha estado mintiendo, incluso cuando su primera norma fue ��no mentir��. ��Podr�� perdonarla?

La entrada Un secreto sobre��� Caza a la mentirosa se public�� primero en Kayla Leiz / Encarni Arcoya.