Este poema lo dedico a un buen amigo, poeta y escritor de México.
Él se define como: “Soy un inadaptado en busca de estacionarse dentro de un mundo pervertido”.
¡Va por ti amigo! Roberto Soria – Iñaki.
¡Qué no se muera la pluma!
Que no se muera la pluma,
con ella moriría el silencio,
el silencio que lento emana,
de esa pluma y del tintero.
Pluma, la suave voz del poeta,
tinta, que quiebra los silencios,
rasgos, cantando una protesta,
alma y sentimiento, sus versos.
Si a la pluma se le entierra,
qui...