Cuando era pequeño, todos los veranos pasaba unos días en la casa de mis tios en Vigo.
Recuerdo que una de las visitas habituales era la de la tía Maria Angélica.
Para nosotros, la tía Queca.
La tía Queca era una tía de mi padre que vivía en Madrid y en todas sus visitas regalaba a los más pequeños de la casa unas generosas «propinas».
Exactamente, 10.000 pesetas.
Si no te pilló la peseta, te puedo decir que en aquella época un menú del día en cualquier restaurante te costaba meno...
Published on July 20, 2025 09:56