El café frío, el
pan duro, la chica junto a la ventana, el silencio justo a su lado, las
telarañas en el techo, el pelo largo que le cae por delante y por detrás de sus
hombros, ni un solo mechón sobre su rostro.
Hace
una hora que espera. Ni el vidrio le devuelve el reflejo. Una araña se digna a
bajar desde el techo para posarse en su hombro.
Por
un instante no
Published on July 03, 2013 02:39