Mistral Quotes

“La instrucción de la mujer es una obra magna que lleva en sí la reforma completa de todo un sexo. Porque la mujer instruida deja de ser esa fanática ridícula que no atrae a ella sino la burla; porque deja de ser esa esposa monótona que para mantener el amor conyugal no cuenta más que con su belleza física y acaba por llenar de fastidio esa vida en que la contemplación acaba. Porque la mujer instruida deja de ser ese ser desvalido que, débil para luchar con la miseria, acaba por venderse miserablemente si sus fuerzas físicas no le permiten ese trabajo. Se ha dicho que la mujer no necesita una mediana instrucción. Y es que aún hay quienes ven en ella al ser capaz solo de gobernar el hogar.”
― Gabriela Mistral, Bendita mi lengua sea. Diario íntimo

“Pero el reverso: lo que jamás me daría Santiago: para vivir dichosamente, yo necesito cielo y árboles. Mucho cielo y muchos árboles ¡Sólo los ricos tienen en Santiago estas cosas!”
― Gabriela Mistral, Bendita mi lengua sea. Diario íntimo

“She came into my life like the Mistral breeze. She showered me with love and care. She splashed me with smiles and laughs. And slowly and silently, she healed me of my depression.”
― Avijeet Das

“I quelcom teixit, i quelcom forjat, i quelcom donat a la mar.”
― Mistral Frederic

“Casi siempre oí opinar sobre el caso de matrimonios mal venidos en el sentido de que, si el marido falla, la mujer debe, pesar de todo, tolerarlo, sufrir y callar con tal de mantener la vida conyugal" (. ..) "yo vengo de una familia mal avenida; siempre creí que mi madre tenía que haber ahorrado los sufrimientos que le dio mi padre y haber salvado algo de felicidad para su vida”
― Gabriela Mistral, Bendita mi lengua sea. Diario íntimo

“She came into my life like the Mistral breeze. She showered me with love and care. She splashed me with smiles and laughs. And slowly and silently, she healed me of my depression.”
― Avijeet Das

“The soft wind from the south-west calls in a voice like my mother's. Italy, it whispers. Greece. Corsica, Sardinia. Its name is Sirocco, Levante, Ostrale, and sometimes even Khamaseen, and it promises magic, and freedom, and love. But that cold, clean wind from the north-north-east has a chilly charm of its own: its name is Mistral, and it calls to me in a voice I think I know; a voice I first heard when I opened the map and saw the village with my name. The voice of an unknown future.
Vianne or Mother? Which will it be?”
― Joanne Harris, Vianne