helena

“Lolita, luz de mi vida, fuego de mis entrañas. Pecado mío, alma mía. Lo-li-ta: la punta de la lengua emprende un viaje de tres pasos paladar abajo hasta apoyarse, en el tercero, en el borde de los dientes. Lo. Li. Ta.
Era Lo, sencillamente Lo, por la mañana, cuando estaba derecha, con su metro cuarenta y ocho de estatura, sobre un pie enfundado en un calcetín. Era Lola cuando llevaba puestos los pantalones. Era Dolly en la escuela. Era Dolores cuando firmaba. Pero en mis brazos fue siempre Lolita.
¿Tuvo Lolita una precursora? Naturalmente que sí. En realidad, Lolita no hubiera podido existir para mí si un verano no hubiese amado a otra niña iniciática. En un principado junto al mar. ¿Cuándo? Aquel verano faltaban para que naciera Lolita casi tantos como los que yo tenía entonces. Pueden contar en que la prosa de los asesinos sea siempre elegante, vaya que lo sé.
Señoras y señores del jurado, la prueba número uno es lo que los serafines, los mal informados e ingenuos ángeles de majestuosas alas, envidiaron. Contemplen esta maraña de espinas.”
― Vladimir Nabokov

“You can't just make yourself matter and then die, Alaska, because now I am irretrievably different, and I'm sorry I let you go, yes, but you made the choice. You left me Perhapsless, stuck in your goddamned labyrinth. And now I don't even know if you chose the straight and fast way out, if you left me like this on purpose. And so I never knew you, did I? I can't remember, because I never knew.”
― John Green, Looking for Alaska

“Obstinate, headstrong girl!”
― Jane Austen, Pride and Prejudice

“History, lie of our lives, mire of our loins. Our sins, our souls. Hiss-tih-ree: the tip of the pen taking a trip of three steps (with one glide) down the chronicle to trap a slick, sibilant character. Hiss. (Ss.) Tih. Ree.

He was a pig, a plain pig, in the morning, standing five feet ten on one hoof. He was a pig in slacks. He was a pig in school. He was a pig on the dotted line. But in my eyes it’s always the ones signing dotted lines that become pigs.

Did this pig have a precursor? He did, indeed he did. In point of fact, dating all the way back to the Biblical Age. Oh where? About everywhere you look there's pigs giving that fancy ol’ snake a chase. Yeah, yeah, yeah, you can always count on a fuckin’ pretentious sarcastican for a fancy prose style.”
― Brian Celio, Catapult Soul