Mariela :) ’s Reviews > El último monstruo > Status Update

—Ay, Arco —contestó Fuego, y luego se detuvo; se quedó sin palabras por lo frustrante que era. Le parecía muy gracioso, y triste a la vez, que Arco la acusara de amar a alguien y que, por una vez en su vida, tuviera razón.


Así, de la nada lo aceptó

Arco el más fértil

—Y no me digas quién es el padre de estos niños, porque me sentiré tentado de hacerle daño. Y eso no nos conviene, ¿no crees? Entre que esperamos recibir a Brocker y toda esa gente que lo adora
—Tampoco sería un buen ejemplo para Hanna—añadió Fuego por lo bajito; dado que Brigan había descifrado tantas cosas, no tenía sentido seguir fingiendo.
—¡Aaaj! —Brigan se llevó el puño a la boca. Y seguro que ninguna sabe.

Manchitas estaba dando vueltas en círculo con un palo en la boca que acababa de encontrar. En realidad, era una rama de un tamaño considerable que se extendía con cada vuelta que daba el animal.
—¡Ah, no, eso sí que no! —exclamó Brigan. Se levantó y fue hacia el perro. Forcejeó hasta que le quitó la rama, la rompió en pedazos. Al parecer estaba decidido que si Hanna no iba a tener amigos al menos conservara los ojos.

Welkley le explicó que eran los mejores que había podido encontrar en tan poco tiempo. Fuego debía escoger uno de los cuatro como regalo de la familia real.
Fuego creyó adivinar cuál de los miembros de la familia real se había tomado un momento entre todas sus obligaciones para pedir que le consiguieran los mejores violines de la ciudad, y otra vez estuvo a punto de romper a llorar.

—¿Por qué sois amable conmigo?
Brigan guardó silencio mientras miraba a Fuego tirar de la hierba. Se agachó hasta quedar a la misma altura.
—Porque confío en vos.
Fue como si el mundo se paralizara a su alrededor; y Fuego se quedó con la mirada clavada en la hierba. Era de un verde radiante bajo la luz del sol.


Ya hay avances eeehh

—Las paces, Arco —volvió a decir Fuego.
Los ojos de Arco se posaron en el rostro de Fuego. —Está bien —dijo a regañadientes—. Haremos las paces, porque estar en guerra es insoportable.
Roen resopló.
—Vosotros dos tenéis la relación más extraña de todos Los Valles.
Arco esbozó una ligera sonrisa. —Ella no acepta que la convirtamos en un matrimonio.