Canal

CanalCanal de Javier Fernández
Mi «puntuación»: 4/5

He llegado a este libro por recomendación de un poeta, Gerardo Venteo Fernández, que viene a casa en Junio a presentar su libro La veladora (que ya he empezado a leer).

Hace mucho tiempo que no leo poesía, le dije. Y me habló de este libro, de la impresión que le causó cuando lo descubrió («esa cubierta completamente blanca en un libro de Hiperión»), de la impresión que le causó cuando lo leyó. Ha insistido. Incluso me lo ha prestado.

Al abrirlo me he encontrado con unos fragmentos en prosa compuestos con amplios márgenes, centrados en la página, justificado por ambos lados; prosa como si fueran versos pero sin serlo, aunque quizás sí lo son. Una belleza de composición que contribuye a la belleza del texto.

Empieza así:

1.
Mi hermano Miguel murió el 5
de marzo de 1975, tres semanas
antes de su sexto cumpleaños.
Murió pasado el mediodía, era
una mañana nublada y de mucho
viento.

(pero no es exactamente así, aquí no puedo reproducir la composición, imagina que el texto está justificado también a la derecha)

¿Por qué un texto así se califica de poesía? ¿Por qué dicen de este libro que es un largo poema dividido en fragmentos?

Sé poco de poesía. Tampoco me interesa demasiado aplicar etiquetas a lo que leo. A mí me parece poético. No sé si por el ritmo, no sé si por lo que cuenta, no sé si por lo que provoca en mí. Es sencillo, es directo, es emocionante.

11.
Necesito contar todo esto, quiero
hablar de ello. Y no me sirve otro
lenguaje. Tiene que ser directo,
seco.

Asignar una calificación en forma de número de estrellas a un libro como este me parece casi una grosería. Lo hago porque también es una forma de recomendarlo, de hacer que otros puedan descubrirlo.

View all my reviews

 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on May 22, 2025 07:14
No comments have been added yet.